La Otra

Mentiras

La historia me pertenece, los personajes son de Masashi Kishimoto.

Personajes con OoC.

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§Mentiras§

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Los flashes de la pista me golpearon en los ojos cuando abrí la puerta, el mareo multiplicándose. Caminé, más lentamente, hacía mí mesa.

La mesa de mí marido y la mía.

Antes de llegar, un mozo me ofreció una copa de champagne que acepté sin mirar hacia arriba. Desgraciadamente no hizo nada para que me sintiera mejor mientras la tomaba de un sólo tirón, después de lo que había escuchado supongo que necesitaba algo más fuerte.

Me senté en mí silla, más dejándome caer sin nada de delicadeza. Mis manos apretando mis sienes adoloridas, mis ojos cerrados fuertemente.

¿Había hecho algo mal?

Más de diez años de relación, con ambas personas. Ni siquiera sabía que se deseaban entre sí. O ellos eran muy buenos engañando o yo era la más grande imbécil y ciega del planeta. Un sabor amargo subió por mí garganta, peligrosamente a punto de devolver toda la comida que había pagado mucho dinero.

Tantas mentiras, tantos engaños y... ¿Para qué? ¿Que hagan ellos haciéndome esto?

Conocí a mí marido cuando apenas éramos adolescentes, él había estado conmigo en los momentos más difíciles y los más felices. Siempre me había apoyado, ese mismo día me dijo que me amaba...

¿Me enamoré de una mentira?

¿Todo él era una mentira?

Y ella ...

Mí amada y única amiga. Yo le dí todo a ella, cuando sus padres se enojaron porque salía con un motoquero llamado Sasori, yo la acogí en mí casa. Yo la consolé cuando el perro la dejó, yo limpié sus lágrimas y la traté como una hermana, como una que siempre había querido.

Parpadee las lágrimas que me asaltaron en los ojos y limpie con furia una que se escapó por mí mejilla. Amase mí cabeza, sin importar el peinado que tanta dedicación le puso la maquilladora. Las orquídeas empezaron a molestarme y me las arranque, molesta con el tiempo que habían invertido en verme bonita para un embustero.

—El de verdad te ama...

Había dicho la mentirosa ¡Mirándome a los ojos!

Traidora...

Zorra...

Mis pensamientos se llenaron de momentos en que los ví juntos. Jamás le había prestado demasiado atención, ellos eran amigos también. Las miradas y sonrisas cómplices, las había tomado como algo fraternal, pero ahora..

Ahora podía ver el brillo del deseo detrás de ellas, el anhelo..

El engaño.

Continuará...