Capitulo 24: Daño colateral

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En la cafetería, Naruto arrastro a Sasuke a la mesa central, lo sentó a la fuerza y le susurro al oído al sentir un desagradable aroma que acechaba al azabache: Sasuke... quédate aquí... ta regreso... me haré cargo del fenómeno que te esta siguiendo -- el omega lo observó incómodo y preguntó tras cruzarse de brazos: ¿Si te vas quien los detiene a ellos? -- el alfa rió y añadió: Tranquilo... ellos no harán nada... su vida depende de la impresión que te den -- los otros alfa se miraron a las caras temerosos y asintieron con una sonrisa nerviosa al recibir la amenaza, Sasuke los observó aún desconfiado y advirtió a Naruto antes de que este se fuera: Ese sujeto se ve peligroso Naruto... no bajes la guardia... -- el rubio sonrió y tras besar al omega en la frente respondió antes de salir de la cafetería: Tranquilo... nadie es más peligroso que yo en toda la academia... lo mataré si me causa problemas -- el azabache se encogió de hombros aun preocupado y suspiró preocupado de que algo malo le sucediera a Naruto pues según la información que había conseguido de Lee, este padecía un serio trastorno mental acompañado de un problema de actitud y control de impulsos; y eso era lo poco que había alcanzado a leer de él, se levantó incapaz de quedarse de brazos cruzados y fue tras Naruto.

En el pasillo del segundo piso, Naruto sacudía a Lee como un estropajo amenazando con asesinarlo si se volvía a acercar a Sasuke, el contrario hábilmente se mantuvo en silencio, en espera de una oportunidad para atacar y acabar con Naruto, pues había robado un cuchillo del club de repostería y lo mantenía escondido en su espalda esperando un momento de vulnerabilidad; guardo silencio varios minutos hasta que el rubio finalmente se harto de gritarle y lo soltó, fue precisamente en ese instante que Lee le saltó encima con cuchillo en mano exclamando que lo mataría por interponerse en su relación con Sasuke

El joven Uchija corrió los pasillos a toda velocidad en busca de Naruto, pues en su recorrido por las aulas alcanzó a oír que un cuchillo se había perdido y aquello fue suficiente para ponerlo en alerta, pues si aquel extraño alfa había buscado un arma significaba que no era un novato, sino un asesino con experiencia; observó por los cristales de las aulas, topandose con que del otro lado del pasillo, atravesando las aulas del segundo piso Naruto forcejeaba a muerte con Lee, pues el alfa de corte ridículo estaba sobre el con el arma sobre el rostro del rubio. Sasuke corrió con todas sus fuerzas hacia ellos atravesando las aulas y aprovechando en robar algunas tizas con las que lograría cegar a su oponente; al llegar a ellos, lanzó el polvo de la tiza al rostro de Lee, lo lanzó al suelo de una patada y levantó a Naruto del suelo; el alfa rubio lo abrazó preocupado y admitio que todo se puso peligroso por bajar la guardia, Sasuke rió y respondio: Ya no importa, ahora hay que pensar en que hacer con él -- en lo que Naruto y el omega conversaban, Lee se levantó del suelo aún cegado por el polvo de la tiza, tomó el cuchillo, apunto a la cabellera rubia y asestó una puñalada profunda en el costado derecho del contrario, Naruto se sobresalto pues de repente sintió algo caliente humedeciendo su camisa y como el omega se desvanecía en sus brazos, lo sostuvo en cuanto sintió que caería y observó confundido su alrededor pues no tenía sentido nada, Lee debería estar inconsciente en el suelo, como se suponía que se había puesto de pie; la ira se apoderó de Naruto en cuanto Sasuke se desmayó en sus brazos, apenas lo había recuperado y ahora corría el riesgo de perderlo para siempre. Iracundo y fuera de si, dejo con suavidad al omega en el suelo y tras mostrar la bestia que llevaba dentro, se lanzó contra Lee dispuesto a matarlo, sin embargo se detuvo, Sasuke estaba muriendo y el tiempo era vital para sarlvarle la vida; se detuvo antes de arrancarle la cabeza al contrario, se apartó y amenazó antes de irse con el omega en brazos: Vas a pagar por esto... y no seré yo tu verdugo... sino el padre de Sasuke... y créeme cuando te digo que... cuando caigas en sus garras suplicarás porque te asesine -- Lee se encogió de hombros al borde del llanto pues había lastimado al omega que "amaba", observó sus manos temblorosas y pensó antes de tirar el cuchillo: Debo arreglar esto... tengo que resolver esto... o el jamás va a quererme.

Fuera de la escuela, y tras amenazar a un transeúnte y robarle su auto, aseguró a Sasuke en el asiento trasero y arrancó el vehículo a toda velocidad rumbo a su residencia. Ya estando cerca, llamó a la única persona que podía salvar al azabache, la madrina de Naruto, Lady Tsunade, cirujana veterana con gran experiencia en casos graves como el de Sasuke, conocida por desafiar a la muerte y ganar en cada enfrentamiento; para fortuna de Naruto, su madrina estaba de visita en la residencia principal, lo que ayudaba al rubio pues el consultorio de aquella alfa estaba a 30 minutos de su hogar. Apenas llegó, Lady Tsunade lo recibió ya preparada para atender a Sasuke, Naruto lo llevo al quirofano improvisado en el laboratorio de Kabuto y suplico por que lo salvara a toda costa, su madrina suspiro al ver el estado físico del azabache y respondio: No creo que hayan muchas esperanzas... pero haré lo que este en mi manos para salvarle la vida -- el alfa rubio abandonó al laboratorio para dejar trabajar a los profesionales y comenzó a dar vueltas impaciente por toda casa, suplicando mentalmente porque Sasuke lo logre y que pueda verlo sonreír una vez más.

Después de 5 horas de intensa lucha, Tsunade apareció ensangrentada en la sala y anunció para alivio de Naruto que Sasuke estaba débil pero estable, el rubio suspiró aliviado y lo primero que hizo al saber que estaba a salvo fue llamar a Itachi, pues si alguien podía darle el escarmiento adecuado a esa sabandija eran los Uchiha. El hermano de Sasuke al recibir la llamada de Naruto casi se desmaya al recibir la noticia de que su hermano casi fue asesinado en fuego cruzado; Shisui que estaba junto a él tuvo que sostenerlo para que no cayese por la impresión. Después de varias minutos en el baño vomitando por la impresión, finalmente  tras recomponerse y pensar en un plan, fue a pedir prestado a la mujer de la cafetería un saco de papas, compró cinta industrial, dio ciertas indicaciones a Shisui y fue en busca de Lee, pues ahora que ya tenía lista la trampa, lo único que hacía falta era la carnada, y él al ser un omega bien parecido, era perfecto para ese trabajo.

Amor al estilo YakuzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora