Amor al estilo Yakuza

Capítulo 40: Despedida

Mientras Naruto y Sasuke se reunían una vez más después de que la muerte casi los separa, Fugaku planeaba un último golpe contra los Uzumaki, esta vez utilizando el odio que los No Sabaku tenían en contra de los Uzumaki, Temari una de los tres sobrevivientes de la masacre a su clan, fue la que encabezó el plan contra los Uzumaki, pues culpaba a Naruto de su desgracia, Gaara y Kankuro la apoyaron porque tenían sus propios motivos para acabar con dicho clan; así 4 poderosos estrategas unieron fuerzas para derribar finalmente el poderoso imperio, teniendo planeado usar a su más poderosa arma contra ellos.

Pasaron 8 meses y medio desde el regreso de Naruto, tiempo en el que el alfa por tener que cuidar de Sasuke no lograba casi ningún avance en su recuperación, casi no dormía ni reposaba como debía, ya que constantemente el omega al ser primerizo sentía diferentes malestares y sufría extremos cambios de ánimo, pasaba de la ira al llanto en segundos; superó con dificultad aquello, ya que no fue fácil lidiar con un omega neurótico durante 8 meses; pero el desafío aún no había terminado, el día en el que finalmente la fuente se rompió, el rubio corrió por toda la casa buscando a sus padres, pues no sabía que hacer, Itachi estuvo presente cuando sucedió, pero se abstuvo de hacer algo, ya que ver a Naruto tan estresado le parecía divertido; el omega mayor no actuó hasta que Sasuke comenzó a quedarse por las fuertes contracciones que llegaban cada 30 segundos, Naruto al ser padre primerizo entró en pánico y comenzó a gritar histérico por toda la casa que ya venía el bebé, todos los omegas en la residencia dejaron lo que estaban haciendo para ayudar a Sasuke, ya que la pareja líder del clan no se encontraba en casa. Kakashi rápidamente puso manos a la obra y junto con Itachi llevaron a Sasuke a la clínica particular donde trabajaba Lady Tsunade. Al llegar Orochimaru bajo del auto, acomodó la silla de ruedas y junto con Itachi entraron al centro médico. Pasaron casi 4 horas en labor de parto, Sasuke fue incapaz de tener al bebé naturalmente ya que era demasiado joven y su cuerpo no estaba del todo preparado para el parto, fue necesario que se le hiciera una cesárea de emergencia; al sacar al bebé hubo un silencio sepulcral en la habitación a espera de que este empezara a llorar, Pasaron varios segundos hasta que el infante tomó color y comenzó a quejarse, todos suspiraron aliviados de haberlo sacado con vida y lo llevaron a la incubadora en lo que el omega recuperaba la conciencia. Pasó 24 horas en observación, tiempo en el que Naruto seguía corriendo por la casa, el despistado alfa estaba tan nervioso por el nacimiento de su bebé, que ni siquiera había notado la ausencia del omega, ningún alfa se lo pudo decir, se les hizo imposible ya que Naruto estaba muy histérico y no escuchaba a nadie a su alrededor. Por la noche del día siguiente Sasuke regreso a la casa con su bebé en brazos, encontrando que el rubio estaba tirado en el suelo rendido ante el cansancio físico y emocional que había sufrido en su ausencia; el azabache suspiró, sonrió y se le acercó para despertarlo, le acarició con suavidad el cabello tras sentarse junto a él y espero a que reaccionara; después de varios segundos de espera finalmente Naruto despertó y lo primero que vio fue a su cachorro, que estaba abrazado a la ropa del omega profundamente dormido, el rubio se sentó miró a Sasuke y preguntó: ¿Puedo cargarlo? -- el omega rió ante la pregunta y tras acomodar al bebé en los brazos del alfa respondio: Claro que puedes... eres su padre -- Naruto acunó paternalmente al bebé y señaló: Se parece mucho a ti... -- el omega se apoyó sobre el hombro del contrario y respondió: Tal vez... pero tiene tus marcas distintivas -- el alfa sonrie ante el comentario de Sasuke, se pone de pie y junto al azabache va rumbo a la habitación a dormir, sin saber lo que le esperaba horas más tarde.
En la madrugada, tres horas después de la media noche, el bebé se despertó y comenzó a llorar, Sasuke fue quien se le levantó las primeras 3 veces, pero ya harto de no poder conciliar el sueño, obligó al alfa a atender al cachorro. Así fue durante 3 meses, el bebé lloraba constantemente y la pareja al ser inexperta perdía los estribos al no saber que hacer, y ni hablar de los demás miembros de la casa, todos estaban hartos de escuchar al bebé quejarse cada dos horas; ante aquella situacion Minato tuvo la brillante idea de asignar a varios omega para que cuidaran de su nieto siendo Orochimaru Kakashi e Itachi los elegidos para la tarea, los omega se turnaban para cuidar del cachorro, el infante requería mucha atención y paciencia, necesidades que fueron cubiertas a la perfección por cada uno de ellos; Óbito Jiraiya y Shisui observaban a distancia como los omega acunaban y cuidaban al bebe como si fuese suyo, les generaba cierta intriga al considerar tener con ellos su propio cachorro; pero verlos diariamente sonreír y jugar con el infante les hizo finalmente decidirse por comentarlo con ellos. Orochimaru se negó rotundamente al principio, pero después de varias semanas de constante insistencia, finalmente terminó por acceder, quedando embarazado después de un calculado y premeditado primer y único intento; Kakashi por otra parte dio una respuesta afirmativa casi al instante, estaba tan emocionado por la idea que desde que Óbito se lo propuso, lo hacían cada vez que podían y todas las veces posibles hasta que al décimo quinto intento finalmente dio positivo.

Los Uzumaki vivieron en paz durante al menos un año desde el atentado, todo marchaba bastante bien, hasta que una tarde mientras acunaba a su cachorro Sasuke vio por la ventana a una gran cantidad de vehículos acercándose a la casa, retrocedió al ver que las placas eran de su clan y rápidamente cerró las cortinas, respiró hondo tratando de no entrar en pánico y comenzó a pensar en alguna forma de escapar; se mantuvo sentado en el suelo varios minutos, hasta que finalmente cayó en cuenta de que no había ninguna forma en la que la familia Uzumaki saliera viva de aquel ataque si él estaba con ellos, suspiró tristemente al pensar que no volvería a ver a su hijo ni a Naruto, pero sabía que si no se entregaba acabarían muertos, así que disimulando su dolor, se quitó el anillo de bodas, lo escondió en la manta de su bebé, lo abrazó susurrandole que lo amaba y acto seguido fue en busca del rubio. Corrió por toda la casa con Menma en brazos, pues debía sacar a su alfa y su familia de allí antes de que fuera demasiado tarde; Naruto que estaba al teléfono con un subordinado informándole de la situación fue interrumpido por el azabache,  quien lo llamó en un tono tan lastimero que el alfa no pudo evitar pensar en lo peor; Sasuke lo llevó consigo al fondo de la casa y preguntó inquieto por la ubicación de Minato y Kushina, Naruto respondió que su padre estaba en la sala de juntas planeando una defensa contra aquel ataque masivo; Sasuke no tuvo alternativa, queria pasar el mayor tiempo posible con el rubio, pero viendo el peligro en el que estaba la pareja Uzumaki dejó al alfa a cargo de Menma y salió corriendo en su búsqueda pues se le acaba el tiempo. Interrumpió la junta llevándose a rastras a la pareja tan lejos como fuese posible de las ventanas, ya que lo más probable es que en cuanto los Uchiha alcanzaran una distancia óptima comenzarían a lanzar granadas; y así fue, apenas salieron de la habitación, la ventana fue rota por una granada fragmentada que al detonar asesinó a quienes aún se encontraban dentro. Más granadas comenzaron a ser lanzadas por diversas ventanas, destruyendo muebles y acabando con la vida de quien estuviera en la habitación, la casa era una zona de guerra, escombros volaban por doquier y con cada explosión habían más heridos, Minato veía con horror como sus aliados caían muertos y el no podía hacer nada al respecto, lo único que le quedaba era huir y aprovechar que los sobrevivientes luchaban para que el saliera de ese infierno con vida.
Tras esquivar esquirlas, escombros y dejar a varios aliados atrás, finalmente llegaron a la habitación más profunda de la casa, Naruto ya los esperaba ahí con el bebé en brazos y sumamente preocupado, pues no tenían a donde ir...

M: .... (sigue conmocionado por lo sucedido)

Ku: ¿Ahora que haremos? No tenemos a donde ir...

S: De hecho...

N: *confundido* Sasuke...

S: *suspira* (se encoge de hombros apenado por lo que hizo) Sabía que... esto sucedería tarde o temprano... así que... a sus espaldas y con ayuda de varios beta... construimos un túnel que nos sacará de la ciudad...

M: *sorprendido* (no se puede creer que haya pasado por alto tan grande proyecto)

Ku: Bien... ¿que esperan para irse?

N: ¿Disculpa? *indignado* No nos iremos sin ustedes...

M: Nosotros ya vivimos hijo, tuvimos la oportunidad de tenerte y verte crecer... ustedes aun son jóvenes... además... Menma los necesita...

S: Iremos todos... y no esta a discusión (apunta a la familia con un arma que traía escondida en su espalda)

Ku: Sasuke...

N: (mira a sus padres) Tiene razón... debemos ir todos... además... si no van... quien va a malcriar a Menma...

Ku: *ríe*

M: *sonríe*

S: *suspira* Es por aquí... (camina hacia un armario, quita un libro y este revela que detrás hay un ascensor de cristal)
Suban... no hay tiempo

Naruto y sus padres suben al ascensor con cierto temor pues pueden ver que debajo hay un gran túnel oscuro, Sasuke toma un maletín que había alistado con antelación, se lo entrega a Minato y dice tras dar un paso hacia atrás: Aquí hay linternas agua y comida para una semana, usen las con cautela, el túnel es algo largo y hay que cruzarlo caminando -- el rubio de patillas largas al entender las intenciones del joven Uchiha intentó oponerse, pero antes de que pudiera hacer algo Sasuke cerró la puerta del ascensor, Naruto al por fin ver las intenciones del omega se acercó a la puerta y preguntó con angustia: No vendrás con nosotros ¿verdad? -- el Uchiha negó con la cabeza mientras soltaba lágrimas de dolor, respiro hondo recuperando la compostura y dijo antes de poner a andar el ascensor: Gracias por todo... mi alfa -- lo último que Naruto vio de Sasuke fue su rostro sonriente empapado en lágrimas alejándose en la oscuridad.