Junghope_¡Joder, es mi novio!🔮

🔮다섯🔮

Hoseok sólo duro cuatro minutos sentado en la cama antes de aburrirse y comenzar a bajarse. Había estado observando al gran sujeto que estaba con él, Jungkook, como lo había llamado varias veces el señor genial de cabello castaño.

Cuando llega al piso, no parece que el tal Jungkook se haya dado cuenta, lo cual es genial porque no quiere regresar a la cama a hacer nada. Ahora, con todo a su alcance (bueno, lo que estaba a un nivel del piso que alcanzaba) Hoseok emprende un viaje (algo lento ya que gatear era algo nuevo) para explorar su nueva y auto proclamada área de juego.

Hoseok gateó de un lado a otro sin cansarse ni un poco, tener energía casi ilimitada era algo genial que sólo los bebés como el poseían. Intentó evitar pasar cerca del gran Hoseok por miedo a que detuviera su exploración de la zona, pero al parecer estaba muy distraído con algo en la mesa donde estaba, así que seguía siendo genial que no lo notara. Hoseok ya empezaba a aburrirse cuando llegó a ver una caja con algunas cosas brillantes y de colores sobresaliendo de ella. El lugar no tenía muchas cosas con las que él pudiera jugar o que le llamaran la atención, pues en su mayoría estaba con poca luz y las cosas no se veían llamativas, pero esa caja parecía ser una clase de tesoro en esa gran isla oscura y desierta.

Gateando y tropezando una que otras veces con sus propias manos, Hoseok logró llegar hasta su objetivo; La caja de juguetes que su compañero de casa le había dado a Jungkook, junto la ropa.

Desde donde estaba, era algo difícil alcanzar las cosas aun cuando se sentaba en el suelo, así que Hoseok intentó levantarse con el apoyo de la caja, pero su falta de fuerza en las piernas y equilibrio sólo le hicieron caer y llevar consigo la caja. Muchos de los juguetes rodaron por el piso del Gryffindor, causando algo de pavor en Hoseok.

¿Jungkook lo iba a regañar?

Cuando se enojaba le había dado tanto miedo, aunque cuando intentaba sonreír era chistoso.

—Hoseok, no hagas tanto desastre bebé, sigues siendo el mismo torpe de siempre — Hablo Jungkook sin siquiera girarse a ver en la dirección que estaba el pequeño Hufflepuff.

Tenía oídos bien desarrollados, aunque estaba concentrado en leer el libro que su novio le había regalado -Esta vez sin usar ningún hecho de lectura- parte de su concentración estaba siendo usada para monitorear a su pequeño y travieso novio, lo había visto de reojo gatear por toda el área de su habitación, le parecía tan tierno que no hizo amago de regañarlo o treparlo nuevamente en su cama. Jungkook agradecía haber recogido todas las pociones y los objetos mágicos que tenía, su barita también estaba a salvo. Jungkook ahora sólo había encontrado la caja de juguetes del mundo mágico que había dejado por allí y seguro la había dejado caer.

Eso estaba bien, perfecto, mientras Hoseok se mantenga entretenido.

¿Qué tantos cachivaches podrían haber tenido en esa caja?