Viste el reflejo en el espejo, en el se mostraban a todos tus amigos que hiciste en esa extraña aventura, y a tus profesores, todos te miraban en el reflejo, tenían una expresión de felicidad y tristeza en sus rostros, por fin regresarías a tu mundo, a tu hogar, y no regresarías a ese maravilloso lugar.
Te volteaste para verlos mejor —Gracias por todo, chicos. — dijiste con una gran sonrisa y atravesaste el espejo, no querías llorar en frente de ellos, los extrañarías bastante.
Al estar del otro lado notaste que estabas en un baño, el de tu casa, por la luz que se asomaba, sabías que era de día, miraste tu ropa, tenías puesta tu pijama en vez del uniforme y miraste el espejo, solo se veía tu reflejo, recordaste lo que habías vivido en esa escuela tan peculiar; los problemas que viviste con Ace, Deuce y Grimm, las clases de magia y las batallas para ayudar a los chicos que estuvieran poseídos por el overblot, solo viste 6 durante tu estadía en NRC, y esperabas que ya ningún estudiante cayera en eso.
Notaste que no había nadie más en tu casa y te cambiaste a algo más cómodo para salir.
Al abrir la puerta del exterior, viste a Malleus en la entrada —Hola. — te saludo con una sonrisa en tus labios.
—¿Pero que haces aquí, Malleus? — tu expresión era de sorpresa, pero también te encontrabas feliz de verlo. —Creí que nadie podía venir a mi mundo.
—Con magia nada es imposible.
—La magia es increíble. — mencionaste, siempre te maravillaste de las cosas que hacían en NRC, y eso que nunca conociste más de ese mundo. —¿Quieres conocer el mundo en el que vivo?
—Por supuesto. Y como agradecimiento, también haré que conozcas el mío. — mientras platicabas con él, nunca notaste lo vacías que estaban las calles o lugares a donde iban, simplemente te sumergiste en la charla como si estuvieras en un sueño, un sueño del cual no despertarías sin el consentimiento de Malleus, quien te miraba atentamente con sus ojos que brillaban bastante a causa de su overblot.
—Algún día gobernaras conmigo. — te digo a la vez que una de sus manos acariciaba tu rostro con delicadeza.
Malleus había enloquecido al saber que pronto te irías a tu mundo, y como consecuencia había desatado su overblot, todos intentaron detenerlo, pero aun con tu ayuda, fue imposible. acabo y mató a casi todos, menos a ti, solo te maldijo para que durmieras como Aurora, solo que tu no despertarías por un beso de amor verdadero, sino hasta que el hada dragón lo decidiera, mientras tanto vivirías un lindo sueño que te obligaba a aprender amar a Malleus.