Capítulo 18

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Me escondí en mi tienda. No quería ver a nadie y mucho menos a Addison. No estaba enojada con Addison, no después de lo que me contó sobre su pasado, pero solo necesitaba un poco de tiempo a solas para lidiar con el dolor que estaba sintiendo.

Lo que hizo Derek fue inexcusable, pero había sido muy importante en mi vida. Crecí con Derek, él era mi mejor amigo. Era prácticamente mi familia. Él me defendió cuando me intimidaban, me llevó a la escuela. Fue una constante después de que mi padre muriera. Y, de repente, estaba muerto.

Me acurruqué en mi saco de dormir, mis lágrimas manchaban la almohada y abracé a Darius cerca de mi pecho, preguntándome por qué Addison había mantenido el oso si su infancia había sido tan horrible. Pero tan pronto como comencé a pensar en el pasado de Addison, pensé en lo que le sucedió, y luego lo que le hizo a Derek. Volví a llorar.

Entonces, traté de distraerme, pensando en cosas bonitas. Pensé en algo simple, como mi comida favorita. Mi comida favorita es la pasta. Así que pensé en la pasta, que me llevó al día en que le hice pasta a Addison, pensar en Addison me llevó de nuevo a lo que le hizo a Derek y por qué. Era un círculo vicioso.

A medida que la noche se acercaba, me empecé a sentir incómoda. La luna llena se estaba levantando. Tragué el nudo que estaba en mi garganta, por el llanto y el miedo. Me levanté, y salí de la tienda.

Addison me estaba esperando afuera. Había estado afuera de la tienda alrededor de una hora. Supuse que quería estar cerca de mí, pero no conmigo. Sentí lo mismo que ella.

-Lo siento-, susurró Addison, mientras se acercaba.

Sonreí con tristeza, y retrocedí un paso.

-No tienes nada por qué lamentarte, Addison. Hiciste lo que todos los demás hubieran hecho en esa situación. No te culpo, ni te quiero menos por lo que pasó o por lo que me dijiste. Sin embargo, necesito algo de tiempo para llorar al amigo que una vez conocí. Solo dame tiempo, por favor.

La mandíbula de Addison se apretó, y me dio un pequeño asentimiento. Su cara era ilegible, como siempre, me gustaría saber lo que está sintiendo. Pero Addison es un libro cerrado, con páginas privadas. Quería que supiera que no la culpaba, culpé a Derek, no a ella. Así que me puse de puntillas y le di un suave beso en los labios. Solo un pequeño beso, para hacerle saber que me importa.

-No quiero que estés sola durante el cambio-, dijo Addison, mordiéndose el interior de su mejilla, en lo que interprete como preocupación.

-Me quedaré con ella- dijo una voz detrás de nosotras. Ambas giramos para ver a Beta Callie de pie. Sus brazos estaban cruzados sobre sus pechos. Y su mirada era de aburrimiento. No parecía que se preocupara por mí, así que no estaba segura de por qué estaba ofreciendo su ayuda voluntariamente. Addison tampoco entendió.

-Has expresado tu disgusto por mi compañera en varias ocasiones, y ahora, ¿quieres ayudarla?- gruñó Addison -Sin mencionar que estará desnuda. ¿Por qué debería permitirte estar con ella?

Beta Callie puso los ojos en blanco, siendo extremadamente irrespetuosa. Sin embargo, Addison no dijo nada sobre su comportamiento.

-No me tiene que gustar para vigilar que no se enfade y mate a alguien-, se burló Beta Callie. -Todo lo que digo es que haré el mismo recorrido que ella, para asegurarme de que no se vuelva loca.

-No lo haré- respondí, suplicandole a Addison. No me gustaba Beta Callie, y obviamente ella no me quería, así que no quería cambiar a su alrededor.

-Bien - dijo Beta Callie con sus manos en el aire. -Solo déjala ir desnuda alrededor de todos los machos sin aparear que no conoces.

-Quédate con ella - espetó Addison, sin dudar en la decisión. Fruncí el ceño, no me gustaba el hecho de no tener otra opción. Pero luego, después de lo que sucedió con Derek, no me emocionaba estar sola en un estado vulnerable.

Con sangre de Alfa - Meddison G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora