Capítulo 5

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Tras la muerte

Estaba en la playa rodeado de mis amigos. La luna asomaba en el cielo oscuro compañera de las estrellas. Estas se reflejaban en el mar como puntos de luz incoherentes. El paisaje era precioso. Nos metimos en el agua y nos pusimos a jugar hasta que nos alejamos unos pocos metros de la orilla, se creó un remolino que revolvió toda la manta de océano. Nos tragó y luego nos escupió como si fuésemos un mal sabor de boca a otra superficie de agua. Al caer rompimos la tranquilidad del lago al salpicar y hacer desplazar con ondas todo lo que había bajo nosotros. De techo había roca gris lisa y no había rastro del agua del remolino, ni goteaba como cuando cierras un grifo, ni siquiera parecía húmedo o mojado. Ahora estábamos en una barca y nos acompañaba una persona cubierta por una capa de oscuridad que solo permitía ver las esqueléticas manos de un hombre con poca carne y largos dedos que sujetaban una guadaña. De la parte delantera del bote colgaba un farolillo que iluminaba el camino. Al moverse aquel extraño hombre para remar hacia la nada pude ver que de la misma mano con la que cogía la guadaña salió un pequeño destello provocado por el farolillo. De la muñeca le colgaba lo que parecía ser un reloj de bolsillo dorado con tapa. No entendía para qué lo podía necesitar, no parecía tener que contar el tiempo. El silencio nos hacía compañía a los pasajeros sentados tranquilamente en la estrecha pero larga mecedora. Cuando alcanzamos a ver una zona sólida entre tanto líquido el lago se separó en dos y caimos entre los muros de agua fría y refrescante que nos salpicaba. La rapidez con la que descendimos nos obligó a cerrar los ojos y ahogar gritos.

Al abrir los ojos vimos el infierno. Decidimos seguir uno de los muchos caminos que se formaban entre los árboles. No sabíamos hacia donde iban pero tampoco importaba, todos los caminos llevaban a Roma. Llegamos a una calzada con más calles. Conforme íbamos andando las callejuelas se iban unificando y la tierra que rodeaba la calzada se iba convirtiendo en agua. El suelo por donde pisábamos se transformó en un puente que cruzaba un océano. Llegó el atardecer que tintaba el cielo y el agua del color de la sangre. Se oía un dulce sonido que provenía del horizonte y surgieron miles de barquitas surcando el agua con las almas de los muertos para mostrarles su nuevo hogar. Las barquitas no paraban de aparecer. El atardecer pareció durar mucho aunque en realidad solo fueran unos pocos minutos. Entonces se fue la luz. Las estrellas aparecieron como diamantes que daban la impresión de haber absorbido toda la luz y haber creado así una manta de oscuridad. Al irse el atardecer no se llevó a los botes consigo.

-Corre- susurró mi mejor amiga. Los muertos venían hacia nosotros lentamente, sin prisa.

-¿Por qué corremos si no nos pueden coger?

-Porque, sino, aunque no lo parezca, nos rodearan al final del puente.

Cuando por fin vimos escaleras para bajar yo ya estaba exhausto y cansado. El sudor bajaba por mi cuerpo, en cambio, al resto parecía no haberles afectado la carrera. Me obligaron a bajar las escaleras tras un segundo de descanso. Al principio empecé lentamente pero los otros tiraban de mí y bajamos a trompicones. Al llegar a tierra las almas ya no nos alcanzaron. Seguimos andando. El viento frío transportaba arena que se metía en los ojos, lo que hacía que los tuviéramos cerrados. Cuando el viento cesó el lugar era totalmente diferente: la noche se había convertido en día. El sol era una bola de oro que contrastaba con el calmado azul del cielo. La hierba eran suaves hilos de jade. Los troncos de los árboles eran dorados al estar hechos de pirita. Sus flores eran de cuarzo de todos los colores y sus hojas esmeraldas. ¿Eso era el infierno? Me acerqué a una de las flores, la toqué y... todo se volvió negro. Y entonces desperté.



Todo el mundo tiene una visión diferente de la muerte: algunos creen que hay otra vida, otros creen en el infierno y el cielo, otros no creen en nada... Eso se lo dejamos a la imaginación.

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Espero que os guste.

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⏰ Última actualización: Apr 24, 2016 ⏰

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