HEDEF: Oneshots ~ ElMer ~ MavSan

Apetito (ElMer)

Nota: todos los relatos ElMer y MavSan tendrán una sola línea temporal. Los únicos relatos que pueden tener diferente línea temporal serán los EnTu. 

El aroma de los croissants horneándose, a mantequilla, azúcar y café inundaron sus fosas nasales causándole un vuelco en el estómago. 

- Masal, por favor, el aroma es delicioso, dime, ¿por qué te estás quejando de esta manera? - preguntó Elif mirando su vientre. Detestaba rechazar aquello que siempre le gustó, como el aroma a panadería y buen café. 

- Elif - dijo Ömer a sus espaldas, acercándose a ella, besando su sien - ¿tan segura estás de que es niña?, ¿Qué tal si no?

- Ah-ah - exclamó Elif batiendo la mermelada que preparaba para el relleno de los croissants - tengo una corazonada y sabes que nunca fallo cuando las tengo. 

- Lo sé - respondió Ömer sonriendo mientras la contemplaba. Se le veía tan radiante estando embarazada, no sabía cómo explicarlo, pero había cierto brillo en su aura que simplemente la hacía verse radiante - te ves preciosa. 

Elif se giró lanzándole una mirada un poco incrédula. Estaba en su cuarto mes de embarazo y los cambios comenzaban a ser notorios, no solo en cuestión físico sino también anímica y claro, hormonalmente. 

- Oh, vamos comisario - dijo Elif virando sus ojos en actitud halagada. 

- Vamos, ¿qué? - cuestiona Ömer acercándose más a ella con una juguetona sonrisa y rodeándola, besa su mejilla susurrando - sabes que eres preciosa, más que eso, eres perfecta. 

- Nadie es perfecto, Ömer - replicó Elif tratando de concentrarse en su mermelada, ignorando el sutil escalofrío que la recorrió al sentir el contacto de los labios de Ömer contra su cuello - Ömer...

- Dime - dijo con voz queda aún sumergido en su aroma. Él no era consciente de la revolución que estaba causando en Elif. 

Claro, como tú no estás embarazado, pensó Elif algo ofuscada por la situación. 

- ¿Hola? - dijo la voz de un cliente entrando a la librería. 

- En seguida te atiendo - dijo Ömer encaminándose a la barra de servicio y Elif dejó escapar un suspiro. 

El resto de la tarde transcurrió con tranquilidad, clientes iban y venían; Ömer le llegó a decir a Elif que acortaran horarios para que ella pudiera descansar pero ella estaba reacia ante la idea, le gustaba mantenerse ocupada.
Una vez estando en casa, Elif largó un suspiro acostándose en la cama de su habitación y con pesadez comenzó a quitarse los zapatos sintiendo sus pies hinchados y un ligero aporreamiento en la espalda. Se sentía cansada pero no quería darle a Ömer la satisfacción al hacerle saber que, en efecto, trabajar lo normal estando embarazada, no fue una buena idea. 

Pero Ömer la conocía muy bien y tan solo observar la manera en que se quitó los zapatos, supo lo que le ocurría así que sin decir nada, se encaminó a ella. Los ojos de Elif permanecían cerrados tratando de descansar por lo que no se percató de su cercanía y con delicadeza, Ömer comenzó a masajear suavemente sus pies haciendo que Elif suspire profundamente. 
Realmente lo necesitaba, pensó. 

- ¿Lo ves? - comenzó a decir Ömer no queriendo perder su oportunidad - te lo dije, al menos deberíamos acorar horarios así descansarías más, pero la signorina siempre quiere tener la razón, ¿no es así?

Ömer la miraba divertido mientras que Elif se limitó a lanzarle una mirada fulminante. 

- En tal caso, yo me quedo, tu vas y abres en horario - dictaminó Elif cruzándose de brazos mirando distraídamente sus uñas.