Aún faltan 11 minutos de viaje aproximadamente, pasamos por una plaza y desde aquí puedo ver como los faroles de luz iluminan a lo lejos a un grupo de chicos andando en skate, se ven tan libres.─ Liam ─le susurro a mi mejor amigo que tengo al lado, solo para que él pueda oírme.
─ Qué sucede? ─me responde, mientras pasa su brazo detrás de mi y me casi abraza.
─ Que te parece si este viernes, vamos a la fiesta de Megan? ─le propongo haciendo un puchero, se que siempre funcionan.
Él no estaba del todo convencido de ir, porque Megan está un poco obsesionada con el, cada mes elije a un chico para molestar de nuestro instituto, y con molestar me refiero a llevarlos a la cama, pero no lo conseguirá con mi amigo.
─ No lo sé Ali, no me dejará en paz, es como un chicle a veces ─me responde divertido.
─ Oh vamos, no creo que te secuestre. Además.... Lizzy también irá ─digo riendo por lo bajo, y susurro lo último.
Se ríe, mientras que con la otra mano se acomoda el pelo─ Se me tirará encima como las otras veces, pero está bien, lo soportaré ─me dice con gracia, e ignora lo que había dicho de Lizzy pero igual sonríe.
─ Perfecto, cómo haremos? ─le pregunto, girándome un poco hacía él.
─ Dile a tus padres que iras a estudiar a la casa de una amiga ─contesta, pensando en cómo seguir.
─ Y que me quedo a dormir es su casa. Pero en realidad, estaremos en la fiesta ─ continúo por él ─ Me parece bien
Hablamos susurrando para que mis padres no nos escuchen, de todos modos ellos están en su mundo. Nunca me prestan atención del todo y justo ahora es algo que agradezco.
─ Exacto, después de la fiesta venimos a mi casa ─me dice convencido.
Chocamos los puños por la increíble sincronía que tenemos.
Le sonrío y miro por la ventana, me doy cuenta de que ya estamos llegando cuando damos vuelta a la calle, y nos detenemos unos segundos después delante de dos puertas grandes y lujosas, alguien me abre la puerta del auto desde afuera, mientras bajo, le agradezco con una sonrisa y él me la devuelve, avanzo un poco siguiendo a mis padres mientras Liam se acerca a mi lado.
Me giro un poco para mirar hacia atrás y veo que está bajando del otro auto el Señor Dylan, padre de mi amigo, y también su hermano Jason y la novia de éste.
Hay una barrera y guardias para los paparazzi que están intentando acercarse, así es, mis padres tienen una gran empresa, y el padre de mi mejor amigo es uno de sus mayores socios.
Lo malo es que a veces se malinterpretan las cosas, la semana pasada había salido una revista donde Liam y yo estábamos en un parque tomando un helado, y justo la foto había salido de una forma en la que nosotros quedamos muy cerca, en la parte de abajo de la revista decía algo como; "Están juntos?", "Serán novios?", "Que nos están ocultando?" Mi amigo y yo siempre nos reímos de lo que dicen, los paparazzi siempre se inventan sus propios cuentos.
Mi abuela es una muy buena diseñadora de modas y bastante conocida, tando Liam como yo somos sus modelos, mi abuela me agradeció demasiadas veces por aver convencido a mi amigo de que hiciera parte de esto, pero como ya había dicho, mi mejor amigo esta buenísimo.
A lo que voy es que, al ser hijos de padres con una de las mejores empresas del mundo, y además modelos, no es nada fácil salir sin que no haya alguien con cámaras encima tuyo.
Mientras entramos observo el lugar, están casi todos los lugares ocupados por personas que fueron invitadas por mis padres. Es bastante amplio, columnas de mármol blanco, sillas doradas, luces adecuadamente puestas, mesas bien adornadas con manteles color crema, creo que es uno de los restaurantes más lindos a los que eh asistido.
Veo a mis padres juntos en la recepción, supongo que ya habían reservado una mesa. Mi madre se gira y me hace un movimiento con la mano para que nos acerquemos, y el camarero con el que estaban hablando nos guía a todos hacia el lugar reservado.
─ Es muy, wow ─me dice mí amigo, impresionado por el lugar mirando hacia todos lados, yo solo me río por lo bajo.
Nos sentamos en la mesa que nos indican, mis padres juntos y a su lado el Señor Dylan, al lado de su padre, Jason y su novia, y como tengo tanta mala suerte Madison se sienta al lado mío, por lo menos está Liam del otro lado.
Pero algo no me termina de cerrar cuando veo que hay un lugar libre entre mi madre y Liam, se supone que tenían que reservar solo siete asientos.
Algo interrumpe mis pensamientos cuando justo en ese momento alguien ocupa ese lugar, y no hablo de cualquier alguien, hablo justo de ése "alguien".
Giramos la cabeza al mismo tiempo para mirar a la persona que acaba de ocupar dicho asiendo, y confirmamos, era él.
Mi mejor amigo me mira y yo lo miro a él buscando cualquier gesto que me diga que sabía que Scott iba a estar aquí con nosotros el día de hoy, él no lo sabía, okey no todo está perdido. Digamos que a él tampoco le cae bien Scott.
─ Buenas noches, disculpen mi impuntualidad ─dice fingiendo estar apenado, cosa que creo solo notamos Liam y yo.
─ No te preocupes, nosotros acabamos de llegar ─responde mi madre con educación.
─ Hagamos un combo, que te parece? ─me pregunta mi amigo.
Yo lo miro intentando descifrar de lo que me está hablando, pero cuando agrega una sonrisita malvada entiendo a lo que se refiere, y sonrío de igual forma.
─ Si, si y si ─le digo mientras chocamos puños, pensando con maldad en como terminará la noche.
Mientras nosotros hablabamos, los demás ya habían entablado una conversación, por lo tanto a nosotros no nos prestan atención así que no es necesario susurrar de lo que hablamos.
Scott tiene 22 años, hijo de padres emprendedores que viajan por el mundo haciendo negocios. Mis padres piensan que es un buen socio para la compañía, pero no estoy de acuerdo, es un pervertido. Me molesta que lo inviten a comer en la misma mesa que nosotros, o si quiera a nuestra propia casa en algunas ocasiones.
ESTÁS LEYENDO
Siempre Fue Él. No?
عاطفيةAcuérdense, nunca juzguen a un libro por su portada, ni a nadie. A veces es difícil elegir entre una cosa u otra, pero cuando se trata de personas, las cuales afectarán a lo largo de tu vida o la mayoría de ellas, hay que tener en cuenta que algunas...