Capítulo 11: Destierro.

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La abuela de Lucy tomó la mano de Lucy y dijo entre lágrimas: «Divórciate rápido. El joven maestro Robinson acaba de prometernos que cuidará bien de usted, y este matrimonio ayudará a nuestra Familia a subir de nivel».

Gerald Williams que acaba de entrar y noto la situación, le habló en un tono condescendiente: «Muchacho, por lo que veo, mi nieta te pago para usarte como escudo, dime ¿Cuánto dinero quieres para divorciarte de ella?»

Al escuchar las palabras de su abuelo, Lucy comenzó a preocuparse, ella creía que Alex había aceptado ayudarla, por el dinero que ella le dio, ahora que su abuelo le estaba ofreciendo dinero para que se divorciara, si él aceptaba, todo su plan se arruinaría.

«¿De verdad está dispuesto a pagarme para que me divorcie?» preguntó Alex con una sonrisa en su rostro.

Al ver esto Gerald se entusiasmó, siempre que el problema pueda arreglarse con dinero, entonces no es un problema.

«Solo dime un número, y está hecho.»

«No tienes capital con que pagar...»

Gerald estaba realmente enojado ahora.

«Insolente, solo dime un número, para mí el dinero no es problema».

Alex sonrió, «ya te lo dije, no tienes capital. ¡A menos que Lucy lo diga, no me divorciaré de ella!» Alex estaba decidido. Miró a Lucy y espero a que ella decidiera.

Sintiéndose impotente el patriarca Williams volvió a dirigirse a Lucy: «Nuestra familia te ha dado todo lo que tienes, si no estás dispuesta a obedecer, entonces ya no te damos la bienvenida, si quieres ser de nuevo parte de nuestra familia, debes divorciarte». Con esto Gerald quería ejercer presión sobre Lucy, él creía que mientras Lucy viera como perdía los beneficios de la familia, se arrepentiría y se divorciaría de inmediato.

Pero Lucy estaba realmente decidida.

Cuando todos esperaban que Lucy se arrodillara pidiendo perdón, Edward Robinson se río.

«¿De qué te ríes?», preguntó Lucy Williams, frunciendo el ceño.

«Lucy Williams, para no estar comprometida conmigo, ¡realmente hiciste todo lo posible!»

«¿Qué quieres decir?»

«Ja, ja, ja ... Por lo que sé de ti, eres una mujer orgullosa, ¿cómo puedes casarte? ¿Y menos con un desperdicio?»

«En realidad me he casado con él, ¿no?», Dijo Lucy Williams con indiferencia.

«Ja, ja, ja ... ¿No es solo en apariencia? Si supongo correctamente, a pesar de que estás realmente casada con él, él nunca será tu hombre. Tú nunca permitirás que él te toque. Por eso estoy dispuesto a esperar a que vuelvas pidiendo casarte conmigo».

«¿No somos marido y mujer ya? ¿Por qué no va a pasar lo que pasa entre un esposo y esposa?» Dijo Lucy Williams con frialdad, y luego le dijo a Alex King: «Esposo, vámonos».

Alex King estaba muy deprimido, porque Edward Robinson pudo ver esta anomalía entre él y Lucy Williams, ¿dónde puso su cara? Pero él estaba decidido a ayudar a Lucy, ese sería parte del precio.

«Espera ...» Al ver que los dos estaban a punto de irse, Edward Robinson los detuvo.

«Joven maestro Robinson, ¿hay algo más?», Lucy Williams se dio la vuelta y preguntó con frialdad.

«Lucy Williams, incluso si estás realmente casada con este chico tonto, no me importa. Puedo esperarte durante un año. Sucede que voy a administrar el negocio de mi familia Robinson en América del Norte en el siguiente año».

«¿Un año?» Lucy Williams frunció los labios y dijo: «Aunque digas diez años. Incluso si esperas toda la vida, no puedo aceptarte. No pierdas el tiempo».

«Lucy Williams, espero que entiendas, nadie en este mundo puede rechazarme».

«Me negué, ¿qué puedes hacer?»

«Un año después, cuando regrese a Rever City, es mejor no dejarme ver que esta basura todavía está contigo, si no, correrá por su propio riesgo».

«¿Cuál es la consecuencia?» Preguntó con desdén Lucy Williams.

«Dejaré que desaparezca de este mundo para siempre».

«¿Me estás amenazando?»

«Puedes entenderlo».

«Me atrevo a amenazar a la esposa de Lao Tse, y me atrevo a hacer que Lao Tse desaparezca de este mundo sin ninguna vergüenza. ¿De verdad me tratas como a un gato enfermo?»

Las palabras de Edward Robinson enojaron a Alex King, y cuando apretó el puño, quiso correr hacia adelante desesperadamente y darle una lección.

Pero aún no había tenido tiempo de apresurarse, dejó que Lucy Williams se retirara de la villa, Lucy Williams nunca miró hacia atrás, dijo: «si quieres que mi esposo desaparezca, es mejor que también me desaparezcas».

Ver marcharse a Lucy tomada de la mano con Alex provocó la ira en los ojos del patriarca Robinson.

El patriarca Williams, que estaba de pie, estaba muy ansioso y tartamudeó: «Eso, Patriarca Robinson, haré todo lo posible para persuadir a mi nieta y dejar que se divorcie de esta basura tan pronto como sea posible. Lucy, ella ...»

La ira en los ojos del patriarca Robinson se disipó, porque se le ocurrió una idea, y dijo con una sonrisa en su rostro. «Está bien, creo que Lucy Williams cambiará de opinión, solo hay que cortar su suministro de dinero, cuando ella se quede sin dinero, volverá de rodillas».

«Entonces no hay problemas, está hecho»

«No hay problema, debería ser así».

El patriarca Williams se dio la vuelta y le dijo a su familia: «Desde hoy, el que se atreva a ayudar a Lucy de alguna forma, será desterrado de la familia».

Todos entendieron que esta orden estaba dirigida a los padres de Lucy.

A su vez, el patriarca Robinson se dirigió a los invitados presentes, «Espero que ustedes sean portavoces de lo que acá ocurrió, y sepan hacer lo propio».

Conesto dejo claro que el que se atreviera a ayudar a la pareja, sería enemigo dela familia Robinson, ¿Quién se atrevería?

King Prodigio InmortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora