Después del espectáculo de ayer, Hwasa estaba contenta, tanto que los invitó a comer a todos al otro día. Por supuesto, fueron y disfrutaron. En especial Wonwoo, él pudo aprovechar ese tiempo con sus colegas para conocerlos mejor. Resultó que en realidad le caía muy bien Boo, aquel rubio platinado que hablaba, vestía y actuaba como una diva. No le quedó duda alguna de que aquel pequeño chico tenía una personalidad bastante singular.
Le sorprendió un poco que fuera de Jeju, sus padres siempre le habían dicho que la gente allí era muy conservadora y estructurada. Wonwoo pensó que eso podría haber quedado un poco atrás, aunque no tanto, debido a que Boo estaba aquí, sentado a su lado, y no en Jeju.Después alejó esos pensamientos, seguramente Boo tenía una buena razón por la cual estaba trabajando en el purgatorio, no era deber ni mucho menos su asunto intentar saber de su vida. O juzgarla.
Era grato y cómodo estar en ese momento compartiendo algo tan trivial como una comida, él realmente estaba disfrutando de la pelea pequeña entre Solar y Bambam, de vez en cuando podía escuchar a Elena y Wheein hablar sobre maquillaje. Tampoco se perdía las miradas que Loco le lanzaba a Hwasa mientras ella reía hablando con Boo sobre las ideas locas que éste ultimo tenía para mejorar la vestimenta de todos.
Entre medio de toda esa buena vibra, y risas, su celular sonó haciendolo saltar un poco de su asiento. Al ver el identificador de llamadas, el nombre de su amigo "Jeonghan-hyung" brilló en letras rosadas.
Se disculpó con sus colegas antes de levantarse para atender su llamada en el baño del lugar.- ¿Hyung?
Escuchó del otro lado a su amigo sorber su nariz y automáticamente supo que algo andaba mal, Jeonghan no lloraba fácilmente.
- Wonwoo, está pasando otra vez.
Su voz sonaba ahogada y seguía escuchandolo sorberse la nariz.
- ¿Donde estás, hyung? -se encaminó hacia la mesa para tomar su mochila y despedirse de sus amigos.
En el trayecto, Jeonghan contestó: - En ese lugar, la maldita cafetería. Wonwoo, por favor, ven.
A través de la línea, Wonwoo escuchaba a su amigo hipar por el llanto, se apresuró al despedirse sin explicar porqué se iba. Al salir, corrió hasta el autobús que de casualidad pasaba justo.
- Estoy yendo, solo quédate ahí. Espérame.
Jeonghan había dicho que sí, y ambos finalizaron la llamada. Wonwoo pensó que hacía ya largo rato que no veía a su amigo de esta manera. Pensó que era una historia pasaba, él deseaba que su hyung por fin pudiera seguir adelante. Claramente es algo que no pasó.
Las manos de Wonwoo se hicieron puños. No soportaba la idea de que alguno de sus amigos pudiera estar sufriendo por otra persona, sabía que era imposible que no pasara, aún así eso no hacía menos a su indignación.
Se alegró de que no hubiera mucho tránsito, puesto que en veinte minutos pudo bajarse y llegar más rápido. Se apresuró al lugar, era bueno que fuera alto, eso le permitía dar zancadas más grandes cuando corría.
Se detuvo, agitado. Miró hacia el frente del local, dónde su amigo estaba sentado en una banca, con la cara entre las manos. Respirando varias veces para calmarse a sí mismo, caminó hasta allí, y se sentó.
- Hyung. -colocó su mano en la espalda del mayor.
Jeonghan elevó su cabeza para mirarlo, tenía su maquillaje corrido, entonces Wonwoo sacó una toallita para arreglarlo. Estuvieron en silencio hasta que terminó de limpiar el desastre que había en su cara. Al tirarla en el cesto, Jeonghan se apresuró hacia delante y lo abrazó con fuerza. Gesto al cual Wonwoo, con gran pesar por el sentir de su amigo, le devolvió el abrazo fuertemente.
- Gracias, Won. Por venir siempre.
Él solo asintió, sus manos frotaban suavemente la espalda del mayor, buscando reconfortarlo.
- ¿Qué lo detonó esta vez?
Le sorprendía que su amigo haya logrado calmarse antes de que él llegara, supo entonces que los ejercicios que habían estado haciendo dieron sus frutos.
Wonwoo sintió el suspiro de su amigo contra su cuello, y después ambos se separaron. El mayor tomó su brazo izquierdo, entrelanzandolo con el suyo y apoyó su sien contra el hombro del menor.
Wonwoo miró hacia el suelo, como si hubiera algo increíblemente interesante en el cemento, mientras esperaba a que su amigo hablara.- Estaba con Seungcheol. -Vio la mano de Jeonghan subir hasta sus ojos y limpiarlos-. Él... Simplemente no merece un lío de persona, ¿sabes? Lo dejé, y él lo sabe... Tengo más de diez llamadas perdidas en mi teléfono. -La voz acongojada de su amigo le dijo que todavía estaba llorando, a pesar de no poder verlo-. Lo dejé porque va a volver, me avisó que estaba por casarse, y quiere que asista a su boda. ¡Ja! ¿En serio? ¿Su boda? -La indignación de ambos era más que palpable, en Jeonghan se expresaba fácilmente por su voz, y en Wonwoo... Bastaba con mirar sus puños cerrados y sus nudillos blancos-. Soy un estúpido, lo odio. Y... Odio quererlo. ¿Estoy enfermo, Won?
El menor solo se quedó callado por un momento, tratando de acomodar su mente, pensando qué decir. Se acomodó para poder verlo a los ojos, tomó ambos lados de su cara, acción que tomó por sorpresa a Jeonghan. Lo sostuvo firmemente antes de hablar.
- No. No sos un estúpido por sentir, por querer de la manera en la que lo hacés. ¿Acaso no lo estás intentando aún? -Lo miraba a los ojos directamente, y con sus pulgares secaba sus lágrimas-. Conseguiremos ayuda, hyung. No estás solo, si ahora no sirve la ayuda que estás teniendo, vamos a buscar otra. No quiero que te rebajes al nivel de esa persona, ¿Ok?
Jeonghan tardó un momento en reaccionar, cuando lo hizo solo pudo sonreír con diversión y revolver los cabellos del menor.
- En otra vida podría salir contigo, Won.
El menor se rió. - El otra vida yo también saldría contigo, hyung. -Wonwoo miró hacia la cafetería, y decidido se levantó, tendiendole la mano al contrario-. Vamos, entremos a tomar un café y generemos nuevos recuerdos aquí. -Le dió una sonrisa más amplia-. Vamos a hacer tantos como podamos, así el inservible queda en el pasado.
«Lugar del que no debe salir jamás.» Pensó Wonwoo.
Jeonghan soltó una pequeña risa, antes de tomar su mano y seguirlo. Le rodeó los hombros con su brazo, y mirando al menor de reojo con un cariño especial, del tipo que uno tiene cuando se vuelve el hermano mayor de alguien, entran al local.
El mayor no pudo evitar reír de nuevo cuando el chico que tomaba los pedidos, claramente le coqueteaba al menor y éste se hacía olímpicamente el desentendido.
* * *
Es bastante corto este cap. Estoy trabajando para darles mejores capítulos.
Espero estén bien y se estén cuidado,
Los tkm.
PD: ¿No les parece adorable esta amistad?
Los leo. ☄️💜

ESTÁS LEYENDO
We Can't Be Friends [Hermanos Kim #2]
RandomDespués de un terrible accidente, Wonwoo tendrá que reconstruir las partes dañadas de su mente, corazón y espíritu. El camino de la resiliencia nunca es fácil, y de Wonwoo dependerá el que tan dispuesto esté a sanar, a aprender y a seguir adelante. ...