One Shot's ~GiyuuShino~

Jamás te rindas Pt. 1

Por fin todo había terminado.

Quizá costó muchísimas vidas, pero al fin y al cabo aquellos quienes ofrecieron su último aliento sabían que su sacrificio no iba a ser en vano.

La batalla contra Muzan no solo nos quitó pilares, mizunotos, etc. También nos quitó a nuestro líder, Oyakata-sama quién siempre nos mostró el verdadero camino para el cual estábamos hechos. Murió de una manera trágica pero valiente en su totalidad.

Recuerdo que las últimas palabras que me dijo fueron "jamás te rindas" y por supuesto que no las entendí al instante y ni siquiera me imaginé en que momento de mi vida tenía que recordarlas.

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En la batalla de mi vida, cuando sentí toda la sangre chorreando por mi pecho y vi a la segunda luna superior caminando lentamente hacia mi, me dí cuenta que era el fin para mí. Por fin iba a completar mi venganza y al saber que al ser devorada iba a enevenarlo hasta los huesos me dio quizá el valor que siempre necesité.

Era el momento de entregarme a la muerte y por fin encontrarme con mis padres y mi amada hermana.

Pero de pronto recordé aquellas palabras de Oyakata-sama "jamás te rindas" y inconscientemente me levanté y con el pecho casi abierto dí un salto que evito que me atrapara y sea devorada.

En ese instante pensé que quizá solo fue un reflejo, reflejo absurdo ya que sabía que no iba a poder ponerme de pie de nuevo.

Así que solo caí a mi muerte.

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Cuando desperté traté desesperadamente de buscar a mi hermana y a mis padres, pero eso no se pudo.

Desperté en una cama casi inmovilizada por todos los vendajes y a mi costado yacían algunos de mis compañeros pilares que lucharon juntos. Vi a Rengoku y los Kamado en una de las camas del cuarto en donde estaba y supe al instante que la muerte que tanto había planeado había sido estropeada.

Grité como si me mataran y al instante todos se despertaron. Vi a mi hermana menor Aoi y mis 3 niñas corriendo hacía mi con lágrimas en los ojos.

-Shinobu-nee-san - dijeron casi al unisonido las tres

Recordar todo esto me da verguenza, pero hice mi rabieta tal cual niña pequeña.

-PORQUE DEMONIOS ESTOY VIVA!! - grité

-Cálmate Shinobu- nee-san - dijeron mis niñas las cuales lloraban

-RENGOKU, RENGOKU ! - llame al Pilar de la Flama

Jamás recibí respuesta a pesar que tenía los ojos bien abiertos mirándome.

-RENGOKU PORQUE DIABLOS ESTOY VIVA, YO DEBÍA MORIR !!! - seguí gritando como una loca

-Shinobu-san... - dijo el chico Kamado que tenía solo un brazo

-KAMADO-KUN, PORQUE DIABLOS ESTOY VIVA, DIME! - le grité directamente

-...

-RESPÓNDEME NO SEAS COBARDE!

-Tomioka-san fué quien la salvó... - dijo con mucho miedo

Y de pronto se me cayó el mundo.

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Tuvieron que amarrarme a la fuerza a la cama, puesto que a pesar que ni siquiera había comenzando a sanar las heridas que tenía, quería pararme y asesinar a Tomioka.

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-Suéltenme, yo soy la dueña de esta finca, déjenme en paz ! - gritaba mientras todos me veían de una manera desagradable

-Tomioka!, Tomioka!

A pesar que él no se encontraba en la habitación yo seguía gritando.

~

Jamás había sentido tanto odio por alguien. Saber que mi propósito de vida se había echado a perder desató todo ese enojo que siempre oculté tras la típica sonrisa que siempre mostraba.

Fingí calmarme para que pudieran desatarme ya que en una ocación mientras dormía vi a Tomioka revisar mi frente quizá pensando que tenía fiebre.

Así que fingí que ya me sentía mejor y que estaba mas calmada para que cuando lo vea pueda despedazarlo con mis propias manos.

~

Pasaron al rededor de 3 semanas en las que ya estaba mejorando gracias a los cuidados de Aoi, pero para mi mala suerte Tomioka partió junto a Inosuke en busca de arroz y algunas medicinas para los heridos de la batalla.

Espere con calma a que regresara, porque si algo era claro era que jamás lo iba a perdonar.

~

Tomioka llegó por la noche, cerca de las 11 pm y tras anunciarse en mi finca, Aoi corrio hacía mi cuarto y  comenzó a amarrarme de nuevo. Ella no era tonta y sabía casi a la perfección lo que iba a hacer. Así que un descuido por parte de ella la noquee de un golpe en el cuello.

Lo vi sentado frente al jardín de mi finca y en una calma que él solo conocía veía a las mariposas aletear libres.

Me acerqué sigilosamente sin hacer el mas mínimo ruido, tenía mi katana lista y la decisión de matarlo tambien.

Cuando estaba por saltar escuché como trató de moverse.

-Aunque no lo creas no puedo moverme, me duele aún el cuerpo, si quieres asesinarme hazlo, las cosas ya están echas, así me mates, tu no morirás ni vengaraz a tu famia. Así que hazlo de una vez - dijo sin siquiera voltear

Lo subestimé, él era un pilar después de todo y lo odié aún mas por eso.

-¿Porqué me salvaste? - dije con mi katana en su cuello

-Cuando era niño, mi hermana se sacrificó por mi ofreciendo su vida defendiendo la mía y cuando estaba en la selección final mi mejor amigo se sacrificó por mi y por los demás espadachines.

-Eso no me interesa - dije tratando de no romper en llanto

-Cuando yo llegué a la habitación vi claramente como  tú en un acto de cobardía o quizá de esperanza diste un salto evitando tu muerte. Pensé en ese instante que quizá no querías morir, que tenías miedo y me vi a mi mismo en la selección final.

Realmente lo odiaba. Pero sobre todo lo odiaba porque tenía razón.

-Te odio Tomioka, yo debí morir, ese era mi deber, me arrebataste mi venganza, te odio! - dije ahogando un grito y sujetandolo del cuello ya que me había abalanzado sobre él

Pensé que en cualquier momento él se iba a defender pero no fué así. Me di cuenta instanteneamente que le faltaba un brazo igual que al chico Kamado.

-Yo no quería que mueras!- dijo mirándome fijamente con aquellos ojos tan azules como el mismo mar

-¿Eh?

-Yo no quería que mas personas preciadas para mí me abandonen... yo ya no podría soportar algo así - dijo con algunas lágrimas que se le desbordaban

Y de repente todo el ambiente cambió...

Continuará...

Mañana haré la continuación de este fic, la verdad siento que me está saliendo bien.
Para mis seguidores que esperaban una actualización de este fic, en serio lo lamento.
Pero descuiden, el próximo capítulo hará que valga la pena toda la espera.