Desde Nuestras Perspectivas

Capitulo 17

Amanecí con un poco de sueño, tome una ducha, me cambié y tocaron mi puerta.

-Pase

Hola, bajamos a desayunar- me invitó Cinco-

-Claro Cinco bajemos

Desayunamos y decidimos andar por la toda la academia hasta la comida, después de un rato caminando y recordando le agarre la mano a Cinco el se puso nervioso y se tenso un poco.

Lo siento- dije separando nuestras manos-

Esta bien, solo que no recuerdo que alguien me tomara de la mano y entrelazara nuestros dedos- dijo para luego juntar de nuevo nuestras manos-

-Seguro si te incomoda no hay problema las separamos

-Estoy seguro de que quiero mantener nuestras manos juntas

Sonreí.

-Disfrutaste tu cumpleaños

-Si, y gracias por el panque

-No sabía que regalarte pero tampoco quería dejarte sin regalo

-El panque y el café fue una buena opción

Sonó la campana y bajamos para comer, hoy Reginald se veía más serio, todos comíamos pero Cinco casi no tocó su comida.

-Numero Cinco, come

Cinco se metió muy poca comida a la boca.
Cuando ya casi todos estábamos por terminar el plato de Cinco seguí casi intacto.

Numero Cinco, come- ordenó Reginald-

Cinco no hizo caso.

Numero Cinco te ordene que comieras- dijo con la voz demasiado demandante y fuerte-

Reginald se levantó de la mesa furioso.

-Numero Cinco, levantate y sígueme

Cinco le hizo caso, cabizbajo lo siguió.

Yo me levanté y lleve mi plato a la cocina y luego me dirigí a la oficina de Reginald.

-Numero Cinco, no permitiré este comportamiento.

Lo siento padre -hablo Cinco con la cabeza en alto y firme pero si conocías a Cinco se oía como ocultaba su voz triste-

-Fuera y quiero que en la cena te comas todo

Me fui a mi cuarto, y Cinco entro.

-¿Quieres hablar?

-No, solo quiero un abrazo tuyo porfa...

No termino porque lo abracé con delicadeza, pero se sentía fuerte; recorfontante.

Nos separamos pero antes de que Cinco se fuera.

-Cinco en la cena, como en la cena nos contamos juntos pásame tu plato

-No Ocho no te quiero involucrar

-Yo si quiero, yo quiero ayudarte y haré lo posible para que comas sano peor tampoco te voy a forzar

Lo abrecé y se fue. Sonó la campana y los dos bajamos a cenar.
Llegó Reginald y nos sentamos, empezamos a comer y por debajo de la mesa le agarre la mano a Cinco.

Estoy contigo- le susurré-

Pasaba el tiempo y cuando padre lo venimos distraído Cinco me daba su comida, paso la cena y Cinco ya no tenía nada en su plato.

-Pueden retirarse

Nos fuimos y le leí a Cinco uno de sus libros favoritos está vez tuve que leer dos libros, le di un beso en la frente y me fui.

...

Toda la mañana me la pasé leyendo, Cinco casi no había desayunado nada dejo casi toda la comida por suerte Reginald no desayuno con nosotros, Cinco y yo nos vimos para quedar de acuerdo con respecto a la comida.

Sonó la campana y bajamos a comer. Hoy Reginald nos estaba viendo a todos no se distrajo ni un instante.
-Número Cinco, come

Cinco se metió un pedazo de fruta a la boca. Paso la cena y ya faltaba muy poco para que terminaramos y otra vez el plato de Cinco seguía casi intacto.

-Numero Cinco, levantate

Cinco hizo caso y Reginald se paró.

-¿Qué te cuesta tanto meterte comida a la boca? Mm, ¿No tienes dientes para masticar?

Padre- intervino Luther-

Callate número uno, no sirves para nada- siguió hablando con Cinco- ¿No te gusta la comida que se prepara?¿No es la comida que quieres? Contesta- ordenó-

No es nada de eso Sr. Reginald- hablo firme y con la cara en alto-

Pues entonces traga- agarro un cacho de wafle y se lo hiba a meter en la boca-

-me pare de la silla- Sr. Reginald, paré- hable igual de fuerte que él-

-Reginald dejó el pedazo de wafle en el plato y me señaló- no te metas número Ocho, mucho menos me hables así

No le hable así a Ocho Sr. Reginald- hablo Cinco con voz demandante-

Reginald se giro con Cinco y alzó la mano, la movió hacia atrás y con fuerza la hiba a regresar alfrente- No se atreva Sr. Reginald- le detuve la mano con demasiada fuerza-

A su cuarto los dos y mañana no bajen hasta la cena- ordenó Reginald- y dos horas más de entrenamiento, nadie puede ir a sus verlos

Cinco y yo nos subimos a nuestros cuartos y antes de entrar Cinco hablo.

-Gracias Ocho, por defenderme

-Te dije que te apoyaría y lo haré

Le di un beso de buenas noches en la mejilla.

Era media noche ya todos estaban dormidos, pero escuchaba ruidos en el cuarto de Cinco.
Fui a ver y hay estaba Cinco en un rincón.

Lo abrecé con cuidado, separé sus manos; puse su cabeza en mi pecho; y empecé a cantar.

If you ever go
All the songs that we like
Will sound like bittersweet lullabies
Lost in the blue
They don't love me like you do
Those chills that I knew
They were nothing without you
And everyone else
They don't matter now
You're the one I can't lose
No one loves me like you do
Since I met you
All the gloomy days just seem to shine a little more brightly
Consider what we've got 'cause I can never take you for granted
Is there another us on this whole planet?
Planet?
If you ever go
All the songs that we like
Will sound like bittersweet lullabies
Lost in the blue
They don't love me like you do
Those chills that I knew
They were nothing without you
And everyone else
They don't matter now
You're the one I can't lose
No one loves me like you do
No one loves me like you do
I don't wanna seem foolish
When I'm jumping into this
You're all that I see

Después de eso Cinco se relajo lo lleve a la cama baje por un té a la cocina y con cuidado lo prepare, se lo di se quedó dormido y me fui.
Después de un rato ddcuche como Cinco estaba llorando, golpeando a todo, se intentó cortar y lo detuve.

-Tranquilo Cinco, estoy contigo

Se relajo un poco le quite la navaja y nos sentamos en el piso lo abrecé, le hable y se logró tranquilizar. Le volví a preparar té y se durmió yo me quedé con el, me dormí junto a él ya que si me hiba se despertaba.