prince

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“El principe de Corea de Sur, Lee Jeno ofreció disculpas por los disturbios causados tras una fiesta clandestina en tiempos de toque de queda”.

Jeno apaga la televisión a la par que suelta maldiciones al aire.

Por la culpa del estúpido de Na Jaemin y la pelea sin sentido que hizo por “haber besado a su novia” lo han llevado a la ruina justo cuando estaba en el auge de su adolescencia.

No más alcohol clandestino.

No más drogas ilegales.

No más ligues de una sola noche.

Con tan solo diecisiete años quiere desaparecer de la faz de la Tierra.

— Príncipe Jeno, lo están esperando afuera— informa la señorita de servicio, dándole una cálida sonrisa al chico que alguna vez fue un tierno niño que solía contarle todo lo que había aprendido de su hermano mayor.

Nadie lo iba a extrañar, entonces el tener que ir a un internado en China no sonaba tan descabellado ni tan terrible, después de todo, sus amigos y familiares prefieren a Lee Taeyong; el futuro heredero al trono de la familia Lee.

Cierra sus maletas con fuerza y de mala gana, poco después sale de su enorme habitación que extrañaría más que a nada.

Coloca sus AirPods en sus oídos, elige una canción cualquiera de The Neighbourhood y sale del palacio donde sus padres, personas de servicio y algunos políticos importantes lo observan con reproche y desaprobación.

“Lee Jeno es un mocoso mimado”.

“Ya hacía falta un correctivo”.

Toma un último suspiro y entra al automóvil deportivo que sus padres le han obsequiado en su último cumpleaños, no se atreve a ver a su familia y sale del complejo de contrucciones ridículamente caras.

Solo espera a que su compañero de habitación sea un niño rarito y sin vida social.

(…)

— ¡No quiero a ningún Lee cerca de mi!— grita el pequeño hijo del rector, haciendo que el director quiera decirle que todo ha sido una broma de mal gusto, pero realmente no es así.

Puede perder su empleo, pero él cree que Renjun ya es bastante mimado.

— No hay más habitaciones disponibles, y según registros eres el único que duerme solo.

No va a hacer una rabieta o se verá afrontando las consecuencias por desobedecer las instrucciones; eso solo mancharía su respetable apellido y su perfecto expediente desde guardería.

Sale de la dirección sin siquiera despedirse y toma camino a su habitación, lugar justo donde un bonito pelinegro se encuentra sacando algunas cosas de sus enormes maletas.

Renjun tiene que aceptarlo, el hijo de los Lee es jodidamente precioso y exactamente su tipo.

— ¡Oh! Lo siento, la subdirectora me comentó que podía guardar mis cosas aquí— el pelinegro hace una reverencia de casi 90 grados exactos ante la presencia del rubio.

Irónico, ¿no?

— Soy Lee Jeno.

— Su alteza— el chico pequeñito hace una reverencia en esa ocasión, haciendo reír al pelinegro de lindo eye smile.

— No es necesario, Renjun.

Mierda.

¿Cómo sabía su nombre?

Renjun solamente da la media vuelta y se deja caer sobre su cama, sin siquiera importarle que su pulcro uniforme pueda desacomodarse o arrugarse.

— Supongo que ya sabes que yo te daré el tour por la institución.

— Y yo supongo que no comes mucho, estás muy flaquito— burla “su alteza” acercándose al rubio para dejar un paquete de snacks sobre su plano estómago.

— Estoy a dieta.

— ¿Intentas impresionar a alguien?

— Tengo padres estrictos— señala antes de levantarse de la cama y dejar el paquete de lo que parecen ser palitos de ajo dentro de uno de sus tantos cajones llenos de comida que tiene por parte de “sus admiradores”—. Pero gracias por preocuparte— sonríe de manera suave y es entonces cuando Jeno jura haber visto un colmillo chueco.

Su compañero de habitación es simplemente precioso, y eso no lo puede negar.

— Tengo práctica de coro en una hora, ¿no te molesta si te doy un tour rápido? ¿o prefieres que te dé el tour a eso de las siete y media?

— ¿Tanto tiempo duras en el coro? ¿Que hacen? ¿Ópera?

Una palabra. Ignorante.

— La excelencia es fundamental para los directivos— el rubio vuelve a dejarse caer sobre el suave colchón y toma a su enorme peluche de Moomin desde una esquina de la pequeña cama individual—. ¿Puedes despertarme en veinte minutos?

Jeno asiente con una pequeña sonrisita en labios.

Definitivamente conquistaría a ese chico bonito.

∆∆∆
Esto tiene segunda parte
Ando re traumada con Young Royals y pensé en el Noren durante toda la serie 😔✊🏼

compass ; noren [pausa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora