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—Espero que esto sea suficiente—habló YoonGi en cuanto entró, dejando la leña en el suelo para poder ponerse de cuclillas frente a la pequeña chimenea.

—Esto es muy acogedor—habló JiMin, sentado en la pequeña cama. YoonGi volteó a mirarle brevemente, dándole una sonrisa.

—Esta cabaña la encontré en una temporada de caza hace unos años—explicó el pálido mientras continuaba colocando la leña dentro de la chimenea—Esta zona nadie la conoce, por lo que aquel día me perdí y encontré este lugar.

—Ya veo—murmuró JiMin mientras miraba alrededor con curiosidad.

—Listó—dijo YoonGi cuando la madera comenzó a arder y el fuego comenzó a crecer. De pronto, el sonido de un golpeteo constante en el techo, llamó la atención de ambos—Parece que recolecte la madera a tiempo, podría haberme mojado y estaríamos pasando frío.

—No esperaba que lloviera, el cielo se veía hermoso con tantas estrellas—habló JiMin mientras comenzaba a juguetear con su manos, algo nervioso aunque no sabía el porque—¿Tienes hambre? Podemos comer si quieres.

—Claro, desde hace un rato eso huele delicioso—dijo el pálido a lo que JiMin río tiernamente. YoonGi le miró con los ojos iluminados. Era increíble como el pequeño hacia latir desenfrenadamente su corazón con solo escuchar su risa.

JiMin se levantó de la cama y se dirigió a la mesita en donde había dejado la canasta cuando entró. Se sentó en el suelo sobre la alfombra de piel, justo frente al pálido. Depósito la canasta en el centro y comenzó a sacar la comida.

—Espero que te guste, me dí cuenta que te gusta la ternera con cebollines, así que me tomé la libertad de prepararlo para ti—comentó el joven con un ligero sonrojo sobre sus mejillas. YoonGi le miró y le sonrió ante el gesto.

—Siendo así, lo probaré—mencionó el pálido para después tomar un bocado, sintiendo una explosión dentro de su boca—JiMin...esto es exquisito—Y juró que lo escucho suspirar aliviado.

Entre ambos, terminaron de comer, dejando un poco para la mañana siguiente. Así que permanecieron sentados sobre la alfombra, frente al fuego.

—¿Puedo preguntar sobre tu familia?—El pálido habló con algo de curiosidad, pero pidió permiso para no incomodarlo.

—Bueno, es algo difícil hablar de ello—JiMin hizo una mueca.

—Esta bien, no tienes que decirme, solo tenía la curiosidad, pero no es necesario—YoonGi se asustó un poco por invadir su vida personal.

—Nosotros éramos del Sur antes de instalarnos aquí...—JiMin comenzó a contarle, dándole a entender que estaba bien compartiendolo.—Mi padre fue reclutado para el ejército cuando yo era solo un niño, por lo que mi hermano mayor ayudaba a mi madre, mientras él no estaba. La guerra aún seguía, y mi padre se mantuvo en ella durante su periodo de batalla. Fue entonces cuando las cosas se calmaron y el regresó, pero pronto fue acusado de traición y lo condenaron, dijeron que había robado provisiones y que se había revelado ante el general, pero siempre nos juró que eso era una completa mentira.

—Se pudo haber hecho algo, estoy seguro de que pudo haber alguna solución—YoonGi habló con un tono comprensivo, mientras que el menor jugueteaba con los dedos de sus manos para evitar derramar lagrimas frente a él.

—La única solución era entregarme. El general me quería a cambio de la vida de mi padre, a lo que mi madre se negó aún que eso significará sacrificarlo—Sus ojos comenzaron a humedecerse.

—Las cosas suceden por algo, y tal vez está no es la excepción—El pálido trató de animarlo.

—Bueno, supongo que sí—JiMin se encogió de hombros—Después de lo que sucedió, logramos irnos y nos instalamos aquí, así conocimos a la abuela Wang.

King | YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora