Capítulo 14

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Federico era una persona encantadora, amable y muy correcto, que estaba enamorado profundamente de Virginia.

Llego de Argentina hace un par de años, buscando trabajo y lo encontró en una empresa de marketing, que es donde la feliz pareja se conocio.

Virginia estaba muy feliz, ya que por fin su hermano y su novio se estaban conociendo. Hablaban y se reían sin parar coincidiendo en muchas aficiones como el futbol, el cine antiguo de acción y por por supuesto su profesión.

Christopher estado a lado de su sobrino en la mesa mientras su cuñado hablaba de su próximo cliente, con total descaro lleva una mano al muslo de su sobrino. El corazón de Erick se acelera y su respiración también pero lo disimulaba "Hay dios mio" Christopher estaba tan tranquilo que asustaba, como si no estuviera haciendo nada. Iba subiendo la mano poco a poco por el muslo de su sobrino provocando en el sensaciones que le costaba controlar "como se le ocurre..." sentia calor, se estaba excitando y sus mejillas se lo estaban haciendo notar pero delante de su madre y su novio no quería sentirse así, sin embargo no podia negar que le gustaba ese descaro de su tío.

-¿Cariño te pasa algo?- pregunta Virgia al ver la cara de su hijo
-Si mama - responde como puede al notar que su tío no quitaba la mano de su casi entrepierna -solo un poco sofocado voy a refrescarme al baño- retira la mano de su tío con disimulo y se levanta sin dirigirle la mirada.
Entra al baño completamente sofocado y abrel grifo del agua fría mojando se las manos para luego mojarse el cuello y la nuca, estaba caliente sin embargo en el restaurante había aire acondicionado.

-Trendria que ir a haber como esta- dice Virginia intentándo levantarse de la mesa.
-No te preocupes hermanita, voy yo- dice Christopher levantándose
-¿Estás seguro?-
-Si, tranquila-

Virginia asiente convencida mientras que Christopher se dirije al baño con una sonrisa de oreja a oreja.

En cuando entra al baño se encuentra con su sobrino mojandose el cuello con agua.
-¿Tienes calor?- pregunta acercándose poco a poco a el. Erick lo mira atreves del espejo y sonrie de lado frotándose el cuello sensual para provocarlo
-Tu me acaloras- le responde sin girarse.
-¿Así? Le pregunta acercándose a el abrazandolo por la cintura -Y tu a mi- le responde con voz.
-¿Como se re ocurre hacer eso?-
-Precisamente para ponerte asi- Ambos se miran atraves del espejo y se sonrien con sinceridad, con complicidad.

No sentían solo atracción el uno por el otro, se adoraban y el sexo había incrementado ese sentimiento de cariño que se tenían.

-¿Como te cae Federico?- le pregunta Erick girando un poco la cabeza.
-Bien bebe- responde Christopher dandole un beso en la mejilla -De hecho muy bien. Se nota que esta muy enamorado de mi hermana y que la hace feliz- responde, otra vez mirándose por el espejo.
-Mucho... y mi mamá también lo ama mucho-
-Se le nota mucho, pero también me preocupas tu ¿te llevas bien con el? Te noté callado-
-Por que me estaban metiendo mano- ambos rien haciendo que Christopher empieza a darle besitos en el cuello provocando la risa de Erick -Para- dice riéndose -le tengo mucho cariño, seria muy egoísta por mi parte ponerle un pero despues de todo lo que sufrió cuando papa murio- concluye Erick girandose para mirar a su tío a los ojos.
-Seguro era un buen hombre- dice Christopher solemne acariendo el mentón de su sobrino.
-El mejor- responde Eeick sonriendo nostálgico. Recordar a su padre siempre le removia todo sin embargo sabía que Federico era la mejor opción para su madre.

Christopher sin soltarlo ni un segundo mira a su sobrino como si para el fuera lo más bello del mundo
-¿Por que me miras así?- pregunta Erick avergonzado.
-Solo te miro- simplemente responde. De hecho para el si que era lo más bello del mundo.

Después de varios besos y caricias por parte de ambos, salieron del baño para no llamar la atención poniendo de excusa que se quedaron hablando, llenando a Virginia de entusiasmo. Que su hermano y su hijo se lleven así de bien le encantaba, sin embargo no era consciente de lo bien que de llevaban en la intimidad.

Al llegar a casa Virginia y Federico se quedaron viendo un película en el salón buen abrazaditos mientras que tío y sobrino entraron cada uno en su habitación, o eso es lo que dijeron.

-Cosita hermosa- suspira Christopher cuando entra en la habitación de su sobrino. Se recuesta en la cama a su lado y empiezan a besarse. Christopher se coloca entre las piernas de su sobrino mientras que este acariciaba la espalda de su tío levantando la camiseta. Se estaban excitando, pero enseguida Erick sale de la calentura.
-Tio... es mejor que paremos. Esta mama en casa con Federico- dice Erick divertido.
-Si... mejor, si te hago gritar como anoche nos van a oir- le dice Christopher sonriendo coqueto. Erick se rie del comentario mientras que su tío se recoloca en la cama a su lado -pero podemos dormir juntitos ¿no?- Pregunta Christopher atrayendo a su sobrino a su cuerpo.
-Ya que insistes- se sonríen pícaros y se abrazan con total serenidad para besarse despacio, en completa paz.

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