Capítulo 2

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Manuel le extiende la mano con educación a su sobrino a lo que este le responde cinco segundos después. Enzo e había quedado embobado mirandolo hasta que por fin pudo reaccionar y responderle con la misma educación que su tío le había otorgado.
-Si soy Manu... digo Enzo, soy Enzo encantado... - dice nervioso muerto de la vergüenza "pensara que soy tonto" pensó Enzo sintiéndose la persona más torpe del mundo, estrechando la mano de su tío con la mano temblando "tan adorable..." pensó Manuel mirándolo  con cierta ternura. Se había quedado sorprendido de la belleza de su sobrino pero nada fuera de lo normal, era su sobrino. Había visto a un niño tierno y adorable del que deseaba conocer a fondo. Su hermana le había enviado fotos de su sobrino desde que era un bebe y deseaba tener una relación con el de complicidad y amistad, y Enzo pretendía lo mismo pero no con las mismas intenciones inocentes.

Ha Enzo le gustaba su tío.

-Tenia muchas ganas de conocerte sobrino y... creo que este saludo es demasiado formal, tengo muchas ganas de darte un abrazo- dice Manuel con entusiasmo y abraza a Enzo con fuerza. El joven de ojos verdes empieza a temblarle el cuerpo entero y le corresponde al abrazo oliendo el perfume abrumador de su tío -me alegra mucho conocerte- me dice separándose de el acunando sus mejillas. Enzo respira hondo intalentando disimular todo lo que causaba Manuel en el.
-y yo a ti tio- consigue responder
-¿donde está mi hermana?- pregunta Manuel agarrando sus maletas para entrar en el apartamento.
-Dentro... con muchas ganas de verte- responde Enzo apartandose para que su tío entre, y con educación agarra una sus maletas para ayudar a su tío.

Cuando Christopher entre se encuentra con los ojos cristalizados de su hermana mayor. Ambos se miran por unos segundos y emocionados corren abrazarse con lagrimas en los ojos.
Virginia levanta la mirada y acuna las mejillas de su hermano con dulzura, con nostalgia.
-Que guapo estas... y que alto- dice Virginia divertida entre lagrimas . Manuel se rie y acaricia las mejillas de su hermana.
-Tu estás preciosa...-
-Que ganas tenia de verte- dice Virginia mientras su hermano le seca las lagrimas con cariño
-y yo a ti hermanita- le responde volviendo abrazar a su hermana con fuerza. Enzo observaba atentamente la escena de ambos hermanos emocionado. Veía a su madre feliz y eso le hacía feliz a el.

-Mira lo guapo que esta tu tío cielo...- dice Virginia mientras que es rodeada por el brazo de su hermano "Esta muy guapo..." piensa Enzo, cuando por un segundo su mirada se conecta con la de su tío, dando su corazón un vuelco que retumba por todo su pecho -siempre le cuento anécdotas tuyas-
-Se habrá creído que su tío es un desastre, no te creas nada- dice Manuel divertido, mirando a su sobrino como si de un niño se tratara.
-No hombre- responde riéndose con nerviosismo.
-Venga, que te parece si te instalas en tu habitación y descansas un poco. Que habrás tenido un viaje movido-
-Hermanita, yo he venido para estar con ustedes- le dice a su hermana acunando sus mejillas con cariño -no estoy cansado, estoy hambriento, así que os parece ir a comer fuera- dice Manuel entusiasmado. Estaba deseando pasar tiempo con su familia.
-¿seguro que estas bien?- pregunta Virginia preocupada.
-Seguro hermanita... Enzo ¿por que no decides tu?- dice Manuel acercandose a su sobrino con una sonrisa de oreja a oreja. Enzo sin poder evitarlo por un segundo baja la mirada a los labios rellenos y sonrosadas de su tío y aparta la mirada para responder intentando no tartamudear.
-Si claro, hay una hamburguesería que conozco en el centro, esta muy buena la comida- Manuel le guiña un ojo apoyando sus manos en los hombros de Enzo.
-Muy bien, pues vamos a comer- dice Manuel con alegría.

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