Tsukkiyama week 2021

5. Fashion/model

16 de julio del 2021, día cinco.
•Pasarela•

Yamaguchi amaba al mundo de la moda, desde que era niño le encantaba idear, diseñar y coser su propia ropa. Hacía bocetos en servilletas cuando se aburría y ni mencionar lo mucho que amaba las pasarelas de moda. El sentimiento de estar ahí, las personas tomando fotografías y más importante: los modelos haciendo uso de las prendas que alguien más había confeccionado.

Era increíble.

Pero claro, había un problema: el mundo de la moda no lo amaba de vuelta.

Desde sus años estudiando en la universidad, sus profesores siempre le dijeron que sus diseños eran demasiado extraños, fuera de lugar. Que iban contra lo considerado normal. Sin embargo con el paso de los años más diseñadores que pensaban como él y con un estilo parecido comenzaron a tomar fama, marcas reconocidas cambiaron su aburrido patrón de moda y empezaban a optar por diseños más atrevidos.

Fue cuando Yamaguchi vio su oportunidad y la tomó. Hizo amistad con una chica, Hitoka Yachi que también estaba comenzando en el diseño profesional y que además para suerte de Yamaguchi resultó ser la novia de Kiyoko Shimizu, la hija de un reconocido diseñador que estaba a punto de presentar su nueva colección de ropa.
En resumen: su elección en amistades por fin le traía privilegios.

De alguna forma, Kiyoko había logrado que ambos tuvieran una pequeña participación en esa nueva colección. Los había presentado a su padre y como le cayeron bien este decidió darles la oportunidad de ayudar.

No aportaron mucho en los diseños, solo dieron ideas e hicieron algunas correcciones a las prendas finales. Aunque sí que estuvieron presentes en el estrés comunitario de todos los participantes, ayudaron a verificar que no faltara nada y estuvieron ahí durante los ensayos.

En el último ensayo, con todo y vestuario Yamaguchi estuvo a nada de desmayar varias veces.

Casi al final cuando un chico rubio caminó por la pasarela comenzó su nerviosismo.
—Mínimo parpadea cuando lo ves— murmuró Hitoka.

—No puedo ¡Es Tsukishima Kei!— susurró —Estamos compartiendo espacio con Tsukishima Kei.

—¡Pero no me lo recuerdes!— le reprochó ella— Ahora estoy más nerviosa.

Las luces se encendieron anunciando el final del último ensayo, lo que significaba que faltaban tan solo 5 horas para la pasarela oficial.

Ambos empezaron a caminar por el estudio para juntarse con Kiyoko e irse.
—Daría un pulmón y medio riñón para colaborar con Tsukishima Kei, o tan siquiera para hablarle y que se tomara una foto con algún diseño mío con eso tendría suficiente— dijo Tadashi mientras tomaba sus cosas de un casillero.

—¡Entonces háblale! Tu eres genial seguro y se vuelven amigos, no perderías nada.

—¿Estas loca? ¿Cómo podría yo un simple mortal hablarle a Tsukishima Kei y no morir de nervios? Háblale tú si es tan fácil, Hitoka-chan

—Gracias, pero no. Es Tsukishima Kei, me da pánico.

—Pero en serio en serio me gustaría hablarle a Tsukishima, sería genial. —pues claro que lo sería, debido al reciente amor platónico que Tadashi había desarrollado por el modelo. Aunque bueno, era Tsukishima Kei ¿quien no se enamoraría?

—Si dicen tanto mi nombre se lo van a gastar— les habló una voz detrás de ambos que los paralizó.

—¡Tsukishima-san!—dijeron al unísono inclinándose en respeto.

El rubio le echó una ojeada de arriba a abajo a Yamaguchi que hizo que al pecoso se le bajara la presión.
—¿Diseñador?

Él asintió ofreciéndole su mano.
—Yamaguchi Tadashi.