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POV Sasuke

Me levanté a las 6:30, ahora que terminaría mi estancia de preparatoria en un nuevo instituto, debía dar una buena impresión, aunque realmente no me interesaba, mi familia me lo había planteado mucho.

Me lavé un poco la cara y salí de mi habitación aún en pijama para ir a desayunar, era una mañana tranquila, o eso pensé, hasta que unos gritos se escucharon tras una de las puertas de invitados. Recordé que ahora había un par de personas más viviendo en la casa.

—Mierda! Dónde está?! Demonios...

Fruncí el ceño, y me llevé la mano a la sien, el omega que conocí ayer parecía ser alguien problemático, y qué con esa presentación? "Odio a los alfas"

Me acerqué a su puerta, golpeé dos veces, y después de unos segundos el rubio se dejó ver.

Me miró de arriba abajo con un gesto extraño.

—Te dije que no me hablarás —dijo casi inmediatamente

Suspiré y lo miré fijamente.

—Te pido que dejes de gritar a estas horas de la mañana, aunque ahora vivas aquí, debes respetar a los otros —levanté una ceja —Si es que las demás personas existen para ti

El omega volteó la vista y giró la cabeza.

—Tch... como sea

Aún así pude notar que estaba avergonzado, el leve aroma a vainilla que desprendía se amargaba ligeramente. Y en sus mejillas posaba un leve rosa carmesí.

—Buenos días, jóvenes, el desayuno está servido —anunció una joven sirvienta desde el inicio de las escaleras

No dije nada más, y comencé a bajar a la planta baja.

Me dirigí a mi asiento y proseguí a degustar de la comida.
Unos momentos después, el omega también se dirigió al comedor, se sentó en el otro extremo de la larga mesa, y antes de escoger algún alimento en la variedad, me divisó con una mirada perversa, luego se llevó una mano a la nariz y la apretó con un par de dedos.

Levanté mi ceja de nuevo, pues el comportamiento de ese rubio no podía confundirme más.

—Odio tu aroma... —dijo en voz baja

Ignoré su infantil comentario y seguí con lo mío.
Aunque de reojo pude notar cómo fruncía el ceño, al parecer para no querer que le dirija la palabra, la llamaba mucho la atención tratar de fastidiarme.

—Buenos días —dijo mi padre entrando a la sala para saludar y recoger su café mañanero —Debo salir temprano, hoy hay mucho trabajo, así que llegaremos tarde, nos vemos luego hijo —me miró, yo solo asentí y salió del lugar

Atrás suyo el padre de Naruto lo seguía, y ahora que lo notaba, Naruto tenía un gran parecido a su padre.

—Buenos días —me sonrió amablemente, y se acercó a su hijo —Lo tomó disimuladamente de la oreja y se acercó a esta —Esta mañana te escuche gritar, más vale que te comportes Naruto, o no saldrás con tus amigos por un mes —soltó su oreja y lo miró con una sonrisa fingida —Tengo que irme hijo, que te vaya bien

Me regaló otra sonrisa y salió del comedor.

El rubio se frotaba la oreja enrojecida con una expresión de disgusto.
No pude evitar soltar una risa burlona, a lo que el contrario, me miró ferozmente.

Vainilla y Menta~ Omegaverse /sasunaru/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora