Arcanum *TRADUCCIÓN*

Omake: Uchiha

Itachi no sabía cómo sentirse. Se encontraba en ese estado a menudo cuando se trataba de Saku. La mujer lo desconcertó hasta la médula. Por el movimiento que conocieron, no supo si ella hablaba en serio o simplemente estaba loca.

Pensar que Orochimaru... de todas las personas ahí afuera... la serpiente fue quien domó a esta bestia rosa. Él creyó parcialmente su excusa sobre ver al sannin. Pero había un sentimiento en sus entrañas que le decía que mirara más de cerca. Debajo de abajo.

La primera ola de conmoción se desvaneció cuando fue bañado por el disgusto. ¿Pensar que llegaría tan lejos solo por alguna técnica? No, no puede ser eso.

Itachi se calmó después de un tiempo y decidió no preguntarse. Enfrentarse a Saku funcionó en el pasado, así que eso es lo que decidió hacer. Levantó la mano, pero antes de que pudiera tocar, la puerta de la habitación de Saku se abrió. Sin embargo, no era a ella a quien se enfrentaba.

"Hidan," dijo Itachi tranquilamente bajando su mano.

"Uchiha. Vete a la mierda, ¿sí? Saku no está aquí, "el inmortal lo despidió mientras se hacía a un lado y lo pasaba.

"Entonces, ¿qué estás haciendo en su habitación?"

"Ella estaba aquí", la sonrisa en los labios de Hidan era astuta. No tuvo que entrar en detalles. Itachi podía oler su esencia en él.

"Mantente alejado de ella."

"¡OhoOHOHO! ¿Y qué vas a hacer si no lo hago, ojos rojos? Hidan se rió cruzando los brazos sobre su pecho expuesto.

Itachi lo miró con los ojos entrecerrados ligeramente.

"Escucha, Uchiha, amigo mío, la pequeña dama tiene necesidades, ¿clave? Y yo solo la ayudo a ella ", se encogió de hombros. El comportamiento del hombre fue relajado, pero Itachi pudo ver que había un toque de seriedad en esas palabras. Se preguntó qué estaba pasando exactamente entre los dos además de lo obvio.

"Hn," murmuró Itachi y desapareció.

Fue solo una semana después cuando finalmente atrapó a Saku solo en el campo de entrenamiento. En realidad, ella misma acudió a él.

"Saku," la saludó con calma mientras se paraba en medio de los campos de entrenamiento llenos de shuriken y otras armas.

"¿Quieres entrenar, Itachi-kun?" chilló con una sonrisa que parecía obviamente falsa.

El Sharingan se activó instantáneamente. Como de costumbre, no evitó su mirada, lo que le facilitó atraparla en su dimensión.

"Oh, estás de ese humor", se rió entre dientes, pero Itachi no se estaba riendo. Estaba muy serio cuando la miró a los ojos verdes.

"¿Quieres morir tanto?" preguntó directamente. Parpadeó por un momento y luego inclinó la cabeza hacia un lado.

"¿No?"

"Orochimaru te matará."

"Podría ser", se encogió de hombros con indiferencia. No podía entender cómo la mujer tenía una autoconservación absolutamente nula.

"No entiendo", dijo con sinceridad.

"Oye, no tienes que entender. ¡PERO, creo que te alegrará saber que tu hermano pequeño ya no está en la fila para ser el nuevo recipiente de Orochimaru!

Los ojos de Itachi se agrandaron mientras inhalaba bruscamente. ¿Podría ser... esta era su razón para entrometerse con la serpiente? ¿Para... salvar a su hermano? Se quedó en silencio procesando sus palabras y sus implicaciones con cuidado.