Capítulo 23 - Bienvenido De Nuevo.

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La fuerte tormenta pasó pero la mañana llegó gris y amenazante; sin olvidar que gracias a toda el agua que cayó, hizo que el clima fuera mucho más frío.

Matsumoto dormía en el sofá, muy bien abrigada. No teniendo que preocuparse por Gin pues temprano una enfermera pasó a cubrirlo con una frazada.
Ella estaba agotada, a pesar que no hacía nada en el hospital, más que aguardar a que Gin despertara... Normalmente aquel nuevo día, sería uno más del montón, sin cambios significativos hasta que una fuerte corazonada hizo que Matsumoto despertara.
Ella se levantó, tomó un baño y fue sólo entonces que notó que Gin estaba cambiado de ropa, la camisa que llevaba el día anterior no era la misma de ese día.

Sin salir de su sorpresa, se acercó a Gin y pasó una mano por sus blancos cabellos, notando que estaba ligeramente húmedo además de tener un sutil aroma a menta fresca.
¿Alguien le bañó mientras ella dormía? Se preguntaba una y otra vez dentro de su cabeza.
Sorprendiéndose aún más cuando escuchó la voz de Gin, decir: ─Ran... giku... Rangiku...

Su esposa, tomó rápidamente una de sus manos, sintiendo cómo él correspondía con debilidad a ese toque.

─Cielos santos, Gin... Finalmente has despertado... ─besó la mano que sostenía entre las suyas mientras lloraba de alegría ─Gin...
Ichimaru abrió lentamente los ojos, encontrándose con la mirada de su sufrida esposa.

"Estoy... bien... ya... estoy... bien..." fue lo que le dijo con obvia debilidad, pero en un idioma que ella no comprendió y ni sabía que Gin hablara.
Matsumoto usó su mano libre para presionar el botón que estaba en la cabecera de la cama, llamando así a la enfermera en turno.

Ésta llegó casi que volando, pues el botón era exclusivo para emergencias. Sin embargo, en cuanto vio al paciente despierto, corrió a avisar al Doctor. Llegando éste aprisa.

Matsumoto se quitó del medio para dejar que los profesionales asistieran a Gin, quien de a poco fue recobrando el habla. Sorprendiendo tanto al doctor como a la enfermera por lo que veían y escuchaban.

─Enfermera, busqué a alguien que pueda hablar coreano, necesito comunicarme con el paciente.

─Enseguida, señor.

Matsumoto estaba confundida, aunque alegre.
─Doctor él...

─Está bien, pero le haré unas revisiones para asegurarme. En cuanto al porqué de su habla, es algo que suele suceder en personas que tuvieron un traumatismo fuerte. No es común, pero sucede; no obstante, no tiene que alarmarse por ello, es mejor esto a que tenga amnesia.

Por otro lado, he de decir que muchas personas también cambian de personalidad después de estar en coma, como también pueden recordar sucesos del pasado que les traumaron, pero debido al trauma mismo el cerebro olvida por "completo" dicho suceso. Todo ello lo descubrirá cuando puedan ir a casa.

La enfermera llegó, no dándole oportunidad a Matsumoto de preguntar nada más.

Ryuuken miró al paciente de origen coreano y le dijo:

─Pregúntele por favor, si siente algún dolor en algún sitio, y más importante, si recuerda a sus allegados.
El hombre asintió e hizo lo que le pidieron, escuchando Rangiku a Gin, hablar con mucha fluidez un idioma que jamás él había hablado antes del accidente.
Comprendiendo únicamente su nombre, el del doctor que le veía y el de Aizen.

─Dice que sabe bien quién es usted, reconoce a su señora esposa y recuerda a su amigo el Pdte. Del banco, Aizen-san; asi como al resto de sus compañeros de trabajo.

Ryuuken asintió ─ ¿Y los dolores?

─Dijo de momento no percibe dolor de ningún tipo, que sólo se siente muy débil.

Bleach - Detrás Del Escenario.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora