Bleach - Detrás Del Escenario.

Capitulo 40 - El Día Esperado.

Jugram que también había sido invitado a la fiesta, decidió ir a hacerle compañía al joven de ojos azules.

—Sírveme un whiskey en las rocas, Uryuu —pidió el rubio con una pequeña sonrisa.

Ishida le sonrió con naturalidad, sirviéndole al instante la bebida.
—Aquí tienes... ¿Tienes planes para después de la fiesta? Haschwalth.

—No realmente, ¿Por qué? —interrogó curioso antes de darle un sorbo a su bebida.

— ¿Podríamos salir...? —invitó discretamente.

Jugram se sonrió con serenidad, asintiendo y respondiendo: —Claro que sí. ¿A dónde quieres ir?

—Donde no haya personas...

El rubio le miró un poco confundido, sugiriendo a manera de interrogante:
— ¿Está bien un hotel?

Ahí había personas, pero si pagaban una habitación estarían aislados del "mundo".
—Claro, me parece bien —aceptó el ojiazul con cierta incertidumbre.

—Te noto un poco decaído, ¿Estás bien? —cuestionó preocupado.

—Sí, claro... Es sólo que, por alguna razón, me siento triste... Y sólo quisiera platicar con alguien... Por eso quiero ir contigo a algún sitio sin personas...

Jugram se quedó analizándolo en silencio, creyendo que podría tener depresión además de estrés.

—Déjame hacer una reservación para media noche. Tu amigo Kurosaki se quedará con tu otro amigo Abarai a limpiar el sitio. Asi que podremos irnos tan pronto acabe la fiesta —decía el ojiverde mientras hacía la reservación en línea desde su teléfono.

—Te lo agradezco —le sonrió cuando el rubio le miró con una sonrisa dibujada en su rostro.

La fiesta continuó luego de la cena, presentándose un mago para alegrar y sorprender a todos con sus actos ilusorios.

Algunas presentaciones habían sido pagadas por los amigos de la pareja que celebraba su aniversario.

Pocos minutos después, todos hicieron un momento especial para tomarse fotos, en grupos, solos o en pareja.
Posando los "chicos buenos" en grupo y los "villanos", en otro grupo.

Hasta que se llegó la media noche y todos empezaron a levantar platos y vasos, así como la basura, metiéndola en bolsas grandes.

—Ichimaru-san, Matsumoto-san —se acercó Uryuu a la pareja, diciéndoles con una sonrisa —Sólo deseo decir: Feliz Aniversario... Espero que lo hayan disfrutado mucho y que tengan una muy bonita noche, a ustedes, a su familia.

Gin le dio la mano al ojiazul, diciendo: —Muchas gracias por todo, Uryuu —luego tiró de él para brindarle un fuerte abrazo —En verdad te agradezco por todo, sin ti, mi esposa no estaría aquí.

Ishida sintió que iba a llorar, no sintiendo diferente Matsumoto, pues ambos sabían que esa podría ser la última vez que se vieran...

Uryuu correspondió al abrazo, sintiendo como el albino le daba unas palmadas en la espalda antes de tomar distancia de él.

—No tienes que agradecer, lo hice desinteresadamente. Odio las injusticias y a los aprovechados... Si pudiera repetir la acción, lo haría con gusto.

—Lo sé, eres un hombre muy valiente —le sonrió, notando que Jugram aguardaba por el ojiazul —Que pasen una feliz noche.

Ishida asintió antes de retirarse con el rubio, quien anticipadamente había felicitado a la pareja.

Matsumoto los vio marcharse, suspirando levemente antes de ver a su esposo, con una sonrisa triste.

—...Gin... ¿Podrías hacerme una promesa? —le preguntó con cierta seriedad y melancolía mezcladas.