ABO / Love Quirk / Monster.
Nacer y abrir los ojos; sentía que se había equivocado en algo, pero era difícil saber en que. Su mundo era extraño, tal vez normal para otros, pero extraño para él.— Izu, ¿Alimentaste a Serpent? — Pregunto Inko mientras una sombra negra la seguía.
— Lo hice, esta mañana, me despertó y le di de comer. — Contesto mientras su madre sonreía y la sombra se mantenía cerca de ella.
— Muy bien amor, anda, es tarde y tienes que ir a la escuela.
— Sí, me voy.
Abrir la puerta y ver todo un día común, donde mil seres peculiares acompañaban a los demás.
Los monstruos siempre existieron, desde siempre estos acompañan a los seres vivos; vas a la escuela no solo para aprender lo elementalmente educativo, también vas a aprender a controlar a tu monstruo.
Vive en una sociedad donde el tipo de monstruo es la categoría que obtienes en la vida, su mamá es alfa y él un omega. Todo se decide si tu monstruo es similar a algún animal, en caso de no ser así eres un alfa y en el peor de los casos el nacer solamente con una peculiaridad te vuelve beta, es mil veces mejor ser Alfa y Omega a ser un Beta, te condenan a servir a la sociedad eternamente y sin opciones como su amigo que esta en su camino.
— Hola Kacchan. — Saluda y sonríe, lo que para los demás es normal y podría pasar hasta un gesto lindo para un beta es horrible, los monstruos suelen manifestarse físicamente en sus dueños y es por eso que a Katsuki le da nauseas mirar a los ojos de Deku, esa piel cubierta de escamas, esos cuernos en la cabeza, las largas uñas y los filosos colmillos que sobresalen de los labios, la gota final es esa mirada de depredador con la cual le mira.
— Aleja tu fea cara de mi Deku. — Pide con bastante asco.
— Lo siento. — Murmura con un puchero.
— ¿Algún rastro de tu monstruo? — Izuku sabia que era imposible que este se manifestará a esta edad, pero ser cortés nada le quitaba. Katsuki negó con la cabeza.
— Dentro de poco iré a mi evaluación beta.
— ¿Vas a ir a una de las escuelas de ENB?
— Es la única opción para los betas como yo, es un alivió,ya no veré sus horribles caras. — Izuku prefirió ver a su alrededor a contestar algo a su amigo, no quería admitirlo, pero lo iba a extrañar, aunque la escuela normal de betas era la mejor opción, no tendría que ver monstruos desagradables, nadie intentaría intimidarlo por solo poseer una peculiaridad.
— ¿Tú mamá cómo esta?
— Ella bien, mi padre es el que llora todos los días desde que mandaron la solicitud para mi ingreso.
— ¿Y de qué manera crees que puedan ocupar tu peculiaridad?-
— No tengo idea, tampoco me interesa mucho, digo, una peculiaridad que hace que se enamoren las personas es un tanto extraña. — Izuku asintió con la cabeza dándole la razón, aunque el tema quedó de lado cuando vieron que los preparativos para el evento de hoy habían terminado, Izuku sonreía con ilusión mientras Katsuki veía con desagrado a las personas y su apariencia.
— Hoy vienen las preparatorias.
— Ugh. — Se quejó Katsuki, iba a ser un día largó para él.
[...]
— Muy bien, saben que hoy tenemos el evento de las preparatorias. Saben el protocolo, terminando de hablar van a pasar un grupo de representantes y hablarán con ustedes. Mucho éxito chicos. — Izuku asintió con la cabeza y buscó la mirada de su compañero, pero Katsuki simplemente veía por la ventana para evitar cualquier disgusto, quería tener la calma de por unas horas no tener que ver un desfile de monstruos.