Apertenencia

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La confusión me ha regalado,

una tras otra, sensación extraña,

sentir que he dejado un objeto por perdido

aun sabiendo en que habitación

lo he dejado.


Una afección que resguardo en los brazos

soltándola desde el corazón.


Es quererte prometer un abandono

que no deseo.


Pero que alternes un entrecortado canto,

pasmoso, que te quiebra la voz

con suspiros

que me iluminan el alma.


Admito mea culpa.

No poder tener certeza a través de la niebla

que me deja incapaz de observar

de buena manera

lo que de mí deseas.


Déjame ese último entrecortado canto

te lo cambio,

por aquello

que haga, disfrutes el habernos conocido.

Prunus SerrulataDonde viven las historias. Descúbrelo ahora