Hola, señor mayor general

Capítulo 81: La intuición de Gu Nianzhi (1)

"¿Configurar una posición de francotirador, aquí?" Se despertó el interés de Gu Nianzhi; volvió sus grandes y animados ojos hacia Little Mirror Lake y miró a Mingyue Court, de pie en la orilla lejana. Cerró los ojos y susurró: "¡Dios mío! Vas a usar un rifle de francotirador anti-material, ¿no es así? "

Solo una bala de un rifle de francotirador anti-material podría llegar a Mingyue Court desde aquí, a través de la vasta extensión del lago.

El oficial militar se sorprendió. "Eh, ¿sabes acerca de los rifles de francotirador anti-material?"

No todo el mundo en el ejército conocía estos rifles de francotirador. Era extremadamente inusual que el lego promedio supiera sobre ellos.

Gu Nianzhi sonrió. "Lo leí en Internet. Soy una especie de fanático de los militares ".

"Debería dedicar su tiempo a estudiar en lugar de desperdiciarlo en Internet", amonestó el oficial militar con total seriedad. "Entra. Tengo que cerrar la puerta ahora".

Gu Nianzhi asintió. Estaba a punto de volverse cuando vio, por el rabillo del ojo, dos hombres altos y fornidos salir del Humvee, uno tras otro.

Podía sentir una corriente de conmoción recorriendo su cuerpo. Su mente se había quedado en blanco y había un zumbido constante en sus oídos. Rápidamente volvió los ojos hacia ellos y bebió con avidez la vista de la figura alta que caminaba al frente.

Una columna de luz brilló desde los cielos; había un helicóptero dando vueltas sobre ellos con el reflector encendido.

En este mismo momento, el sonido de la lluvia ya no la alcanzaba. Observó cómo la oscuridad de la noche retrocedía lentamente ante sus propios ojos. El mundo que la rodeaba se había convertido en nada más que un escenario de fondo, superficial y sin sentido. Todo su universo ahora estaba compuesto por una sola entidad: el hombre alto y bien formado vestido con el uniforme de la Fuerza de Tarea Especial del ejército.

Aunque era imposible ver el rostro del hombre, oscurecido como estaba por un casco negro y gafas de visión nocturna, estaba familiarizada con la figura alta y robusta, los hombros anchos y el aura imponente que lo envolvía: era su tío Huo, ¡Ella estaba segura de eso!

No había forma de que confundiera a otra persona con él: ¡después de todo, lo había seguido como un accesorio atado a su pierna durante sus primeros cuatro años viviendo con él!

Pero esos días fueron un recuerdo lejano. Ella no lo había visto durante más de dos meses y había hablado con él por teléfono solo dos veces ...

Gu Nianzhi se aferró al marco de la puerta de la cabaña de paja. Su cuerpo se había encerrado. Ella no podía moverse.

El oficial militar que estaba frente a la puerta le dio un empujón impaciente. "Entra. Necesitamos despejar el área, solo personal autorizado". Con eso, le cerró la puerta en la cara, en voz alta.

Gu Nianzhi se tambaleó hacia atrás y casi cayó al suelo.

Mei Xiawen se apresuró a rodear con un brazo a Gu Nianzhi para estabilizarla. Preguntó, su voz llena de preocupación, "¿Estás bien?"

Gu Nianzhi negó con la cabeza lentamente.

Su respiración parecía haberse quedado atascada en su garganta; no sabía si se suponía que debía inhalar o exhalar.

Apretó una mano contra su pecho, apoyó la espalda contra la puerta de la choza de paja y se deslizó hasta el suelo.

La choza de paja no tenía ventanas. La oscuridad los envolvió tan pronto como se cerró la única puerta.