Toda una semana dedicada a mi bellísima OTP 🔥🎴.
La idea surgió en el bellísimo grupo KyoTan en Facebook y decidí hacer mi pequeño aporte con esta shipp que amo tanto.
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-Los personajes son propiedad de Koyoharu-sensei.
-Artista: @...
Los cazadores se encontraban en medio de una lucha contra un demonio que había aparecido en un pueblo cercano. Sus respectivos cuervos les enviaron la notificación sobre dicho demonio y salieron de inmediato para acabar con él, sin embargo, no pensaron que fuera tan resistente; les estaba costando trabajo lidiar con él, ya que era muy escurridizo. Los cazadores estaban cansados, pero aún podían pelear, no iban a desistir en su propósito.
—Es inútil, no podrán vencerme.—se burló el demonio, quien decidió que ya había tenido suficiente de esa lucha, así que en silencio, activó su arte demoniaco, sorprendiendo a los cazadores.
—¿Qué es eso?—preguntó Tanjiro.
—No lo sé.—le respondió Kyojuro con inseguridad.
El demonio había liberado una energía oscura que le rodeaba y le permitía escabullirse, los cazadores corrieron hacia él para evitar que huyera, pero no contaban con que dicha energía los absorbiera de a poco; sosteniéndoles con fuerza.
—Ahora será imposible escapar, cazadores.—soltó el demonio con mofa al ver a los cazadores en problemas. Su energía los envolvía cada vez más, por lo que creyó que era el fin para ellos al verles perder la consciencia lentamente. Mientras se daba la vuelta, se percató muy tarde que el mayor de ellos aún permanecía consciente y fue capaz de cortarle la cabeza, acabando con él.
A pesar de que Kyojuro logró matar al demonio, su arte demoníaco aún funcionaba en ellos. No entendía qué estaba ocurriendo, pero la preocupación lo embargaba al ver al pelirrojo inconsciente, siendo absorbido en su totalidad por la oscuridad.
—¡Tanjiro!—gritó el rubio en un intento por despertar a su tsuguko, pero la oscuridad lo envolvió con fuerza a él también.
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—¿Pero qué es esto?
Luego de ser absorbido, Kyojuro despertó por un fuerte golpe en su espalda. Abrió los ojos con pesadez, notando que el suelo bajo él estaba destruido, lo que significaba que había caído del cielo. Movió su cuerpo e intentó levantarse, estaba adolorido. Su mirada buscaba a Tanjiro, pero no se encontraba con él, de hecho, ahora que observaba bien ese lugar no lucía para nada como el pueblo al que habían llegado; podía ver un enorme edificio blanco con infinidad de ventanas, también había una buena cantidad de árboles. No entendía lo que ocurría. ¿Acaso tendría algo que ver con la técnica demoníaca? Pero él había acabado con el demonio antes de perder la consciencia.
Con temor por su tsuguko, decidió explorar ese extraño lugar, sentía que algo no estaba bien, pero esperaba que Tanjiro estuviese a salvo. Avanzó con lentitud, manteniéndose alerta en caso de que alguien apareciera para atacar. El lugar se econtraba vacío, no podía ver ni a un alma ahí. Llegó hasta una zona abierta en una especie de ¿patio? No lo sabía, pero siguió avanzando hasta que percibió una presencia extra en ese lugar, se preparó para atacar y visualizó por fin a otra persona pelirroja con aretes de hanafuda.
