Don't Need Nobody

Capítulo 9: Marking

Ushijima, al observar al omega que yacía en aquella habitación, se decidió en llevárselo con él y hablar seriamente con Oikawa, que lo esperaba después de la graduación. Le diría que había marcado a Satori y que rompería con él para tener una vida cómoda con su ahora compañero.

Sin embargo, los planes nunca salen como uno quisiera, al salir para agarrar sus pertenencias en su antigua habitación, Satori, que se estaba haciendo el dormido, se levantó adolorido de esa cama y rápidamente se vistió. Sabía que si salía por la puerta sería descubierto por el alfa, así que de tanto dar vueltas en la alcoba se percató de la ventana.

"No sería la primera vez que hago esto" Pensaba mientras que abría la ventana y lanzaba primero su maleta para posteriormente salir él.

Parecía haber salido de una loca fiesta por cómo estaban sus vestimentas, pero eso no necesitaba saber ahora, en estos momentos necesitaba la ayuda de alguien y ese alguien andaba en su trabajo. Sin voltear a ver atrás, corrió hacia las afueras de la escuela diciendo su último adiós a los tantos recuerdos que realizó en ella; dejando ver solamente su silueta corriendo hasta desaparecer.

— ¿Tendou? — Pregunto a la nada Ushijima viendo cómo aquella habitación fue abandonada por el que creía dormido

"Una vez el destino dijo...

Conocerás al amor de tu vida

Pero también dijo

Jamás estarán juntos"

El problema ahora era que ya estaban entrelazados por el destino...

Estaban perdidos entre ellos...

Le dolía todo el cuerpo, las piernas le temblaban mucho en cada paso que daba para llegar a su destino, pero aunque quisiera descansar su mente le gritaba peligro en cada lugar, su Omega interior le clamaba ir por el alfa que lo marcó. ¿Así se sentía ser marcado?, ¿Tener la necesidad de ir con el que mordió?, solo por el mero hecho de quererte, solo para él.

Su cabeza le andaba dando malas jugadas en estos momentos tan importantes para él, tenía una batalla con el mismo, se sentía como si estuviera en un espejo discutiendo él mismo. Perdido sin saber qué dirección agarrar. Una mano se acercaba a él y al agarrarlo con total calma le habló en el oído.

— El cielo tiene un plan para ti —

Al voltear a ver quien era se fijó que no había nadie, pero esa voz había tomado sin querer un nuevo rumbo para él.

— Que no te importe perder la cabeza —

— Ya estás marcado —

Siguiendo su camino alzó su cabeza dignamente, haciendo que se notara su marca de pertenencia con detalle, mientras que se dirigía con pasos ahora firmes hacia la alfa. Llegando con ella, López únicamente necesito oler las feromonas del pelirrojo para saber lo que pasaba.

— ¡Genial! — Resoplo — Ahora parecemos la copia barata del el amor es una ilusión — Exclamo mientras que revisaba su celular para llamar

El sonido que hacía el celular en altavoz le daban una leve sospecha de quien estaba intentando comunicar, pero todas sus sospechas fueron saciadas al oír lo que dijo.

— Ahora no hay vuelta atrás, tenemos que irnos antes de lo imprevisto —

— Estoy en cinco minutos ahí, no se muevan y menos tu Satori — Advirtió Hajime desde la otra línea

Hajime al llegar a la tienda olió el aroma mezclado de Satori con el alfa que desde el inicio había vigilado para que no pasara nada, pero vio que no pudo protegerlo como era debido. Para él, Satori era un simple cachorro perdido, sin saber a dónde ir y no quería que llegara como estaba ahora, perdido y confundido.

Teniendo que esperar hasta que cerrara la tienda para poder hablar bien y con más seguridad, ninguno de los tres dejó el local y cada cliente que entraba era vigilado por los dos alfa para que no se le acercaran a Satori que yacía durmiendo en unos sillones juntados por los alfas.

Ya al marcharse del local se apresuraron en llegar a la casa de la alfa y planear la huida sin ser vistos por Ushijima, lamentablemente no contaban que el otro Omega ya sabía lo ocurrido de aquella habitación y no se quedaría con las manos cruzadas viendo como se daba la fuga el pelirrojo.

Querían tomar un vuelo temprano, así que optaron en dejar todas sus pertenencias por mientras en Miyagi, Iwaizumi, que era el encargado de verlos partir, se dispuso a salir de su casa como si nada, pero no notaba que era visto por Oikawa.

Al llegar al aeropuerto visualizo a los otros dos, estaba ya llegando con ello cuando de repente un aroma bastante familiar impregnó todo su alrededor, volteo a ver al causante que andaba corriendo deprisa hacia el pelirrojo.

¿Por qué parecía que lo golpearía?, No será que...

"Está en cinta" Pensó al juntar todos los sucesos anteriores, no iba a alcanzarlo, lo iba a golpear

— ¡¡OUCH!! —

Se quejó alguien desde el piso...

— Conmigo te la pelas si te pasas de mamón — Una voz femenina habló 

— Si intentas tocar otra vez a Satori te irá peor — Agarro las maletas y con una suave mirada se despidió silenciosamente de Hajime — No es advertencia, es amenaza — Aclaro mientras que los dos se dirigen para abordar su avión