Harry Potter ~ One Shots-Preferences-Types-Zodiac ~ [ Terminada ]

jealousy,jealousy ~ Hermione Granger

Estaba preparándome para el baile de invierno del torneo de los tres magos. Llevaba un vestido negro sencillo y el pelo suelto y alisado. Igual no había mucho que pudiera para verme siquiera decente.

- ¿Estas lista? - Luke, mi cita, estaba en la puerta con su traje de gala.

- Si, supongo - Salí de mi cuarto, y nos dirigimos hacia el salón.

Entramos al salón, estaban por entrar los campeones, así que todos nos juntamos para ver. Y ahí estaba ella, la chica maravilla, a la que todos elogiaban por ser parte del trío de oro.

Hermione Granger...

Entor junto con Viktor Krum, solté una risa disimulada, era claro que iba a invitarla a ella. Con su cuerpo perfecto y sus dientes blancos como papel, se que su belleza no es mi falta, pero ella es tan perfecta. Y todos los chicos quieren chicas perfectas.

La continua comparación que hago de mi con ella me esta matando lentamente, he estado pensando demasiado, siento que todos me observan, si hago algo mal me criticaran enseguida.

Los campeones empezaron el baile de entrada, y poco a poco se les fueron uniendo más personas. Luke me llevó a la pista y empezamos a bailar, era terrible en esto y con los cinco minutos que llevábamos bailando, ya lo había pisado cuatro veces. Gire mi cabeza, y Hermione estaba tan radiante como siempre, bailaba perfectamente al ritmo de la música, su cabello no se movía ni un milímetro, y se veía tan perfecta.

Juro que voy a enloquecer...

Estoy tan cansada de mi misma, ser tan estupida e inutil. Desearía tanto ser ella, y aquí vienen como siempre los celos, malditos celos.

Terminó el primer baile y Luke me dijo que iría a buscar una bebida, en realidad no me importa mucho a donde valla. Digamos que ni siquiera me gusta, solo salí con él porque fue el único disponible. Lo esperé unos diez minutos y aun no llegaba, asi que lo fui a buscar. Y adivinen como lo encontré, bailando con otra chica de Hufflepuff, y si soy de esa casa. Todos creen que los de mi casa son los más inservibles que hay, pero en realidad hay muchas buenas personas, aunque abundan más las malas.

Mientras pensaba, alguien me empujó y casi caí al suelo, cuando levanté la vista, damas y caballeros nuestra protagonista de la noche Hermione Granger.

Siempre la veo consiguiendo y logrando las cosas que yo quiero, en el momento me alegro por ella, pero despues me sale un odio que no sabría describir. Con su ropa maravillosa, e increíbles amigos, dios estoy apunto de perder la cordura.

Su victoria no es tu derrota ______

Mi conciencia habla, se que es verdad pero no puedo evitar sentirme una fracasada.

Saben que, ya no aguanto mas, le hablaré, le diré que por su maldita culpa soy como soy, una estupida e idiota chica que no puede evitar tratar de ser como ella. Me dirijo hacia ella, las manos me sudan y siento mi garganta seca, pero necesito soltar esto que e guardado tantos años.

- Hey!, Granger - Ella se voltea lentamente, con su estupida cara perfecta y me sonríe.

- Hola, ¿_____ cierto? -

- Si, hola, que linda estás - Use el tono más sarcástico que pude.

- Eh, gracias supongo - Se iba a ir, pero la agarré del brazo antes de que lo hiciera.

- Te crees la gran cosa ¿no? - Ella solo me miraba con una cara de "que carajos le pasa"- Te paseas por los pasillos como si fueras una reina.

- Oye, nose que te pasa, pero no me hables así.

- ¿Sabes que me pasa?, lo que me pasa es que todos tus amigos, sales todas las noches, salvas a hogwarts, estás viviendo tu vida- Me detuve a tomar aire, y me di cuenta de que todos nos estaban mirando, a mi no me importo asi que segui con mi pelea- Tienes una hermosa cara y un hermoso novio, desearía tanto ser tú y ni siquiera te conozco. Todo lo que eres es lo que yo debería ser, más feliz, más bonita, estoy tan malditamente celosa de ti que voy a enloquecer.

Y si, ahí estaba yo y ella, en el centro, mientras todos nos miraban. Algunos boquiabiertos, otros me miraban con desagrado y otros simplemente no nos prestaban atención. Lo único que hice fue darme media vuelta e irme, en ese momento fue el único en el que me sentí como una puta diosa, y si lo era.

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