Si en todo el mundo el 80% de la población tiene un poder único de nacimiento llamado quirk, ¿Qué habrá del otro 20%?, ¿como viven a los ojos de los demás sin un quirk?.
Durante el ultimo tiempo Izuku noto que la actitud de su hermano había cambiado un poco siendo mas serio de lo normal. En un principio pensó que era por el hecho de ahora tener que usar mascara cuando salía.
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Resulta que ese no era el problema, mas bien su problema era el hecho de odiar el saber la verdad de sus padres, aquellos de los que había tratado descubrir junto a Izuku antes de saber que era adoptado.
El simple hecho de pensar que comparte alguna similitud con sus "padres" síes que se les puede llamar así. Le parecía un motivo mas que suficiente para odiarse hasta la sangre, deseando no tenerla.
...
Actualmente Izuku se encontraba junto a su hermano, ambos sentados en la baca de la escuela en la que afortunadamente tenían sombra. Izuku iba anotando los quirks de los compañeros de salón, mientras Zack se encontraba leyendo como siempre.
Como no tenían a sus amigos en la escuela, no había mucho que hacer y nadie se les acercaba por miedo de quedar inconsciente, pero aun así, alguien se había sentado cerca de ellos ese alguien era un niño pelinegro pálido con ojos negros.
No le dieron mucha importancia, sin embargo, su abuela les había dicho que de tener una oportunidad para hacer amigos, debían de aprovecharla, por lo cual Izuku se armo de valor para iniciar una conversación.
Izuku: Ey, eh...¿por qué no juegas a la pelota?. En el examen de educación física tuviste una excelente calificación—Hablo tratando de no tartamudear.
???: Me aburre—Respondió de forma inexpresiva.
Izuku: Ah, a mí también...¿Y hay alguna otra cosa que te guste? ¿al que quieras ser?—Pregunto intentando lograr tener mas conversación.
???: ¿Algo que quiera ser?, nunca lo había pensado...—Se quedo pensando por un momento—Meh...¿Y tu? ¿qué quieres ser?.
Izuku: ¿Yo? eh...quiero ser un héroe—Respondió agachando la cabeza con la mano sobre ella—¡Ah! por cierto, soy Nakamura Izu...
Inesperadamente el balón de futbol con el que estaban jugando unos niños de otra clase fue directo hacia Izuku, pero de un rapido movimiento, el desconocido niño con el que tenia una conversación, detuvo fácilmente la pelota con su mano derecha.
Izuku no se había dado cuenta del movimiento de su brazo hasta que el sonido del impacto del balón lo sorprendió junto a Zack y otros niños curiosos por saber de donde provenía el sonido.
Zack: *Lo salvo de un pelotazo a la cara, ¿pero quien fue el que pateo?*—Miro de donde provenía el tiro logrando observar a un niño peliblanco puntiagudo con un tono de piel blanco y ojos rojos—*Debió ser el, seguramente viene a disculparse*.
Creyendo que todo estaba resuelto volvió a leer, pero la realidad era que el peliblanco cacheteo al desconocido niño y luego lo agarro del pelo para mirarlo fijamente mientras el no cambiaba su expresión manteniéndose serio como si no le importara.
