❌¹𝗖𝗛𝗘𝗥𝗥𝗬𝗕𝗢𝗠𝗕 ✶ cinco hargreeves

12.━━━ me gustas

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15 AÑOS ATRÁS

Había pasado un año de la desaparición de Número Cinco.

Aquella desaparición había dejado corazones rotos y desilusiones, Reginald Hargreeves se había vuelto más duro ya que había perdido a su hijo estrella, Cinco Hargreeves. Las cosas seguían igual, salvo que cada día los entrenamientos eran más duros, pero Juno Hargreeves no se sentía bien desde aquel día.

Se había vuelto más sarcástica y contestona, sus hermanos podían ver que perfectamente había adaptado la actitud de Número Cinco, y es que no hacia falta ser adivino para saber que Número Ocho, la última hija de Sir Reginald Hargreeves, era la más afectada por la misteriosa desaparición de Número Cinco.

Los primer días ella estaba emocionada porque él apareciera y le contara todo lo que vio y vivió, pero conforme pasaban los meses el ánimo empezaba a caer y empezaba a hacer reemplazado por tristeza. Todos sus hermanos incluido su padre y Pogo empezaron a notar los cambios de humor de la niña, y es que antes de que desapareciera Cinco, Juno Hargreeves era caracterizada por ser una niña normal, callada pero burlona, siempre aprovecha los momentos para burlarse de sus hermanos pero para apoyarlos y ser cariñosa con estos.

Aquello cambió, y dio paso a una Juno burlona, sarcástica y contestona, la dulzura se había marchado de su cuerpo, pero a pesar de eso—aunque no pareciera—, ella se seguía preocupando por sus hermanos, aunque estos pensaran que no.

Solo seguía afectada, y lo seguiría estando.

La niña se sentó en aquel gigante patio, mirando a los pájaros volar de un lado a otro, ella solo les miraba en silencio y sin hacer algún movimiento. Ella podía sentir como si no estuviera en aquel lugar, se sentía perdida y de alguna forma u otra mareada, ella al igual que todos los Hargreeves podían saber exactamente que día era hoy.

Un año de la misteriosa desaparición de Número Cinco. 

La niña al principio estaba tratando de tomárselo normal, no quería llorar ni demostrar ninguna emoción. Pero cuando su padre colocó aquel cuadro gigante con la cara de Cinco, solo pudo levantarse del sofá y correr hacia el patio.

La primera lágrima cayó, y la castaña ni siquiera hizo ademán de retirarla. 

"Vuelve pronto"—recordó, y entonces bajó la mirada.

—Jun.—la castaña alzó la vista para encontrarse con Vanya, que la mirada con sus grandes ojos expectantes, Juno corrió la mirada y la dirigió a sus manos.—Yo también me siento triste por él.—murmuró, Número Ocho ni siquiera hizo ademán de mirarla, solo estaba con sus pensamientos en blanco mientras la escuchaba.—Pero...hay algo que quiero decirte..

Juno volvió a mirarla cuando notó la insistente mirada de Vanya sobre ella, Vanya tragó saliva y entonces se acercó lo suficiente a ella para poder besarla. Pero Juno alejó la cabeza y frunció el ceño.

—¿Qué haces?—espetó con molestia, Vanya agarró con fuerza las manos de Juno para evitar que se fuera.

—Yo...me gustas desde hace tiempo, Jun.—Número Ocho solo la pudo mirar en silencio, tratando de procesar aquellas palabras. Entonces fue cuando Vanya volvió aprovechar y se acercó para plantar sus labios sobre los de ella, Juno no volvió a hacer movimiento de alejarse, solo se quedó de piedra sin saber que hacer o decir.

Unos cortos segundos después, Vanya se alejó con las mejillas rojas y una leve sonrisa.

—Yo...

—No vuelvas hacer eso, Siete.—interrumpió Juno para luego levantarse y marcharse de allí.

Vanya se quedó de piedra al escuchar aquello, la del flequillo bajó la mirada con dolor, sintiendo sus ojos cristalizarse.

finalmente, este es el pasado de vanya y juno.