﹒⌗﹒𝗖𝗛𝗘𝗥𝗥𝗬𝗕𝗢𝗠𝗕 ﹒౨ৎ˚₊‧
── .✦ 𝐮𝐦𝐛𝐫𝐞𝐥𝐥𝐚 𝐚𝐜𝐚𝐝𝐞𝐦𝐲 𝐟𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜𝐭𝐢𝐨𝐧.ᐟ
༘⋆ He estado en una noche oscura eterna, y
ahora que te he vuelto a ver, he conocido el
brillo de la luz de las estrellas.ᝰ
☕︎| Volumen 1: ✓
☕︎| Volumen...
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05.━━━ fabrica umbrella
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Cuando pisó la entrada de aquel callejón, los recuerdos de la primera vez que cayó en el chocó contra su mente, ella recuerda cuando la primera semana, hasta final de mes venía a gritar el nombre de Cinco todos los días, esperando que el ojiverde aparecía mágicamente delante de ella. Las esperanzas de Juno no murieron, pero si la esperanza de encontrarlo ese año sí.
Hasta que finalmente apareció.
Ella aún podía sentir la sensación de tenerlo entre sus brazos, su rostro preocupado y sus verdes ojos pasar por su cuerpo aún seguía tatuado en su mente, Juno sabía que por más que desapareciera Número Cinco, ella aún siempre sentiría aquel afecto que causaba él en ella.
Ver a Cinco había desatado algo dentro de su interior, lo había extrañado tanto y a pesar de ello jamás admitiría en voz alta lo que él causaba en ella desde que eran pequeños, siempre se había tratado de Juno y Cinco, y aquello jamás se marcharía.
Siempre sería así.
Se adentró al callejón mientras su mano apretaba su holgada blusa, su mirada recorrió las paredes del lugar y la basura en una esquina, soltó el aire que tenía acumulado y sus pasos avanzaron con precisión hasta la puerta al final del callejón.
Cuando ingresó a la puerta, unos escalones le dieron la bienvenida, por lo que empezó a subir hasta que encontró una puerta a la izquierda, la mujer la abrió con lentitud, asomando la cabeza primero antes que el cuerpo, una cocina pequeña enfocó su vista, Juno hizo una mueca y entró, cerrando la puerta al instante detrás de ella.
Todo era silencio, sin embargo mientras más caminaba por la cocina, en lo que parecía ser la sala se escuchaban algunos quejidos. Cuando ingresó a ella, de espaldas pudo ver a un hombre amarrado a una silla, delante de él se encontraban Cinco y Diego, y al lado una mujer morena.
—¿Qué está pasando aquí?—preguntó con el ceño fruncido, enseguida las miradas de sus hermanos se posaron ella, Diego dio un paso adelante con una sonrisa.
—¡Juno, salí!—exclamó abrazándola, ella también lo abrazó.