Peligro

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  -tu papá no se molestará si me ve aquí?- el se paro frente a mi sin apartar ni un segundo su mirada, mi pobre cuerpo no iba a soporta tanto... podía hasta sentir esas estupidas maripositas de las que todo el mundo habla

  -tranquilo- ambos pasamos -te gusta juego de tronos?- y allí va una sonrisita estupida de mi parte, YAAAA!! Me doy por vencida! No hay remedios con esto

  -eres otra viciosa de GOT??- el me miro con curiosidad

  -depende- me quede con una cara bien graciosa

  -mi hermano es vicioso a eso- me sonrió, ambos nos sentamos en el sofá

  -y tu a que eres vicioso?- un rubor se esparció por sus mejillas, me derritoooo

  -no lo sé- mentiraaaa! Miro a otro lado.. y por que se habrá enrojecido? -vas a estar hablando durante el programa? O me dejarás verlo en paz?- una sonrisa traviesa se asomo por sus comisuras y me derretí en mi puesto

  El programa estaba bien Bueno y por lo que veía a Cameron le estaba gustando, solo espero que tampoco se enamore de Khaleesi.

  Me era imposible concentrarme en una sola cosa, o miraba el programa o miraba a Cameron, él lo había notado un par de veces pero yo disimulaba y volteaba rápido al televisor, ahorita me encontraba embocada mirando su cuello, la forma en que sus brazos reposaban en sus piernas o simplemente su cabello; de pronto él volteó y me pilló

  -oye, no puedo concentrarme en el programa contigo mirándome así- sentí que me puse colorada, en que forma se supone que lo estoy mirando?

  -disculpa- Volví a mirar la tv como perrito regañado

  -ven aquí- de un ágil movimiento el me tomo del brazo y me haló hacia el, terminamos acomodados en forma de cucharita, el detrás de mí abrazándome por mis caderas; ahora si ya no podía verlo, a juro tenía que ver la tv pero era agradable estar así

   Seguimos viendo otra serie cuando esa termino pero debo confesarles que no estaba nada pendiente en ella, mi papá como que se había equivocado en lo de la lluvia y la señal, ya hace rato había terminado GOT y aún no se caía la señal... cómo les contaba no estaba nada pendiente de dichoso programa; Cameron había estado todo ese rato pasado haciéndome caricias en mi estómago, pasaba sus dedos casi rozando el máximo de suavidad y cada vez que lo hacía mi piel ardía mas

  Yo aún llevaba la misma ropa de temprano, unos leggins estampados y una blusa holgada que era la traicionera en dejar pasar la mano de Cameron, una mano la tenía yo como almohada pero con la que me abrazaba era con la misma que me torturaba

   Estuvimos así un buen rato, pero sentía que no podía más; Cameron acaso no notas que estás calentando a un demonio sediento? Unos cuantos meses sin nada de nada y cualquier caricia podría encender a este fosfórito. Trataba de quedarme lo más quieta posible y no pensar mucho en sus manos en mi piel

   -te quedaste dormida?- cómo me voy a quedar dormida con lo que estás haciendo?

  -no- mi respuesta solo fue un susurro muy ronco, ya estaba frita

  Casi me dio un infarto cuando los dedos de Cameron empezaron a subir su recorrido, unos milímetros más y daba con mis senos pero así como subió bajo a donde estaba antes

  -quería hablarte de algo- si ya estaba nerviosa ahora estoy alcanzando otros límites de nervios

  -sobre que- serenos muchachos, serenos...

  -es que es un poco vergonzoso, no estoy acostumbrado a estas cosas pero ya no puedo aguantarme un minuto más- será!!!??? SERAAAA!??? Será que ya por fin escucharía que le gustooooo?

Si el Amor no fuera cierto- Cameron HerrinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora