"04"

5 2 0
                                    

—Necesito pensar con claridad, concentrate April.

Seguí dando vueltas a la habitación ¡y es que resulta realmente frustrante que en dos días tu padre cumpla años y no sepas que mierda obsequiarle!

—¡Claudia! Ella sabrá ayudarme — agarré con frenesí el teléfono celular de encima del closet donde había estado cargando y marqué aceleradamente su número de teléfono.

Funeraria "El pétalo" ¿en que puedo servirle?

—¡Funeraria mis tetas Claudia! ¡Si no me ayudas me terminaré ahorcando con un cinto de la lámpara del techo!

—Tus tetas son tan inexistentes como el muerto que tengo delante.

—¡Claudia deja de joder!

—Ya ya, carajo ¿que coño quieres?

Eh tú — miro a la ventana continua a mi habitación y allí lo vi, sin camisa y fumándose un porro de marihuana, y lo supe por la forma de sujetarlo.

—¡April llamaste con urgencia y ahora te quedas callada!

—Calla coño, que el espectáculo visual que ando teniendo es mejor que lo que te iba a decir imbécil susurré a la bocina del teléfono.

—Habla bajo niñata, me has despertado. — sentí mi cara enrojecer de la furia.

—¡Niñata el coño d.... — la ventana se cerró de golpe dejándome otra vez con la palabra en la boca.

Eso fue....

—No te atrevas a decirlo.

Te dejó con l....

—Que te calles zorra, te llamo más tarde, Jesse el culisucio me va a escuchar.

Calcé las pantuflas en la puerta de mi habitación y salí a toda marcha hacia su casa, su mamá, como toda representante de relaciones públicas exteriores del país, estaría viajando como la mayoría del tiempo y su padre está en la estación, así que debe de estar el solo en su humilde casa.

Llegué al portón de entrada y claro, estaba cerrado, así que como tantas veces hice con Matthew, me volé de un salto y algunos rasguños la valla.

—Me cago en su.... — puso un dedo sobre su frente y cerró los ojos, iba a matarlo, o si que lo haría.

Él estaba en un short corto, de esos que utilizan ellos para bañarse en la playa, de pie junto a la puerta, tenía unas gafas RayBan negras en su frente y me miraba, divertido, soltó una especie de silbido de repente y dos perros RotWailers salieron de la nada y comenzaron a correr hacia mi, me quedo estática un momento y luego hice lo que mejor sabía hacer; grité tan fuerte como mi garganta me lo permitió.

—¡Ahhhhhhh! — corrí hacia él, y entre más rápido corría, más se acercaban — Diles que se detengan por favor.

—Están entrenados para matar a cualquier intruso que ose entrar a nuestro patio, tu eres una, así que... — dejó la frase en el aire y entró a la casa dejando la puerta abierta, era ahora o nunca.

Las dos cabezas de unicornios que adornaban las pantuflas saltaban cada vez que impulsaba mis piernas para correr, llegué al porche de la casa y en un santiamén, había llegado al interior cerrando detrás de ella la puerta con bastante fuerza.

—¡Eres un imbécil, ibas a dejar que me comieran vi...

Mi frase quedó en el limbo al ser empujado hacia atrás con tanto impulso que sentí cuando mi cuerpo estalló contra la pared de la sala.

—¿Que diablos haces aquí desquiciada? — su brazo me estaba presionando la garganta mientras el otro sujetaba con fuerzas por encima de mi cabeza mis dos escuálidos brazitos.

—Vengo a matarte por dejar...

—Ya ya, vienes supuestamente a cometer homicidio con ese pijama de unicornios, es en serio? ¿Vienes a causar miedo o lástima? — me levantó la cara con un dedo y cuando me miró de cerca, mis mejillas se ruborizaron al instante. —Por que con ese cuerpecito flacucho, dudo que siquiera puedas con la correa de tu mascota. — comenzó a reír y le aparté de una bofetada la mano que sujetaba mi brarbilla.

—Sueltame idiota, así te enseño la lástima que te puedo llegar a causar.

Se quedó sujetándome, con un poco más de fuerza, contra la pared y mirándome como un depredador a su presa.

—Tu padre es policía Jones, así que debes de saber, que por allanamiento de morada son al menos 18 meses en prisión.

Mis ojos debían estar inyectados en sangre, como estaba entretenido, ni siquiera notó que metí una pierna por detrás de la suya y lo tiré al suelo en una limpia maniobra de defensa, me agaché junto a él y puse mi codo en su garganta, sus orbes parecían dos platos, esa no se la esperaba.

—No creas que por ser hombre, tener un poquito de músculos y estar lleno de tatuajes, a mi me vas a intimidar. — ejercí más presión en su garganta — me importa bastante poco que tengas más fuerza que yo, papá me enseñó a defenderme de cabrones como tu.

Me levanté del suelo sacudiendo mis manos, el me miraba estupefacto desde el suelo.

—Tendré el cuerpo flacucho pero al menos, mi madre si me quiso y no me puso nombre de varón siendo hembra, imbécil — agarré el picaporte y giré mi cuerpo hacia atrás — esta sólo fue una pequeña advertencia, la próxima vez podemos irnos a los golpes en el cuarto de entrenamiento de papá.

Abandoné su casa y fui a la mía, me sentía eufórica, así que cuando cerré la puerta detrás de mi, comencé a reírme a todo pulmón.


Nota:
Hola preciosas, me disculpo de antemano por no actualizar,  pero estos meses de Agosto y Septiembre fueron fatales para mi familia entera. Es algo corto,  lo se, pero les prometo traer algo mejor en estos días. Gracias a las que fueron pacientes hasta ahora y a las que me abandonaron gracias tambien por dejarme ser parte de su vida un día. Lxs quiero 💜❤

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 29, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Smoking Kiss Donde viven las historias. Descúbrelo ahora