Capítulo 14: Sabía que tenia que volver

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"Sabía que tenía que volver"

Mundo anticuado.

—Tuuu— Louis achina los ojos y señala a Niall.

—¿Yo?— Niall se acerca a donde se encontraban los demás —Un placer alíen, yo soy Niall— estrechó la mano de Shawn.

—No lo toques— Louis le pega en la mano a Niall.

—¡Auch! ¿Qué te pasa?

—¿Por qué sabe tú nombre si es MI nuevo tutor?— Louis dice enfatizando el "mi"

El profesor de deportes Mathew Anderson entra en el aula, con algo de preocupación en su rostro, se rasca la nuca y mira la escena frente a él —Temía que esto pasará—

Todos voltearon a verlo —Explíquese— dijeron Niall y Louis al unísono.

—Hubo una confusión. Al haber una persona del mundo moderno que quisiera dar tutoría, avisamos a ambos.

Louis pestañea rápido y se acerca al profesor —No entiendo, ¿Por qué avisarían a Niall de eso?.

—Niall pidió la oportunidad de poder inscribirse en "el otro mundo"— El profesor hace comillas con sus dedos.

Louis ve a Niall y luego vuelve a ver al profesor —¿Estamos hablando del mismo Niall?

Niall se acerca a ellos —Ya, ya no llores pequeño, es que yo también tengo mis secretos— le guiño un ojo a Louis.

Louis estaba atónito. Sabia que a Niall le causaba curiosidad, pero en el fondo es una persona que todo le da igual, probablemente cuando crucen la muralla Louis pensará que es el mejor día de su vida, mientras que Niall se saca los mocos.

Niall se acerca a Shawn y lo toma del brazo     —Vamos a estudiar alíen.

Louis llega hasta ellos tomando el otro brazo de Shawn —¡No! Yo me inscribí primero, no me puedo quedar sin tutor.

Ambos empezaron a forcejear los brazos de Shawn y este mantenía una sonrisa —Si me hubieran dicho que dos chicos tan lindos pelearían por mi, hubiera venido antes— Shawn soltó unas carcajadas, por el intento que ambos tenían de llevarlo con ellos.

—¡Tomlinson!— el profesor Mathew gritó, llamando la atención de todos —Deja la inmadurez, eres de los mejores estudiantes de la escuela.

—Pero yo...

—No te quedarás sin tutor, Harry vendrá mañana— tanto el profesor Mathew como Franklin se retiraron del aula, no sin antes darle una mirada de advertencia a Niall y Shawn.

Niall arrastro a Shawn para salir del aula y se volteó a sacarle la lengua a Louis.

Esto no podía estarle pasando. De verdad era una pesadilla.

¿Lidiar con ese chico de nuevo? Era obvio que tenía sus problemas personales y que no podía saber de ellos. Pero eso no quita el hecho de que sea un irresponsable, burlón y muy malo explicando. Louis no sabía cómo iba a continuar con eso, pero tenía que explicarle a Harry como serían las cosas de mañana en adelante.

- -

Mundo moderno.

Lunes. Mira el reloj en la mesa de noche 11:30 am, Observa el ventanal con las cortinas a medio abrir y los rayos de sol entrando por esta. Achina sus ojos por la luz, pero de igual forma puede divisar los edificios con sus respectivos penthouse, iguales al que el vivía.

Suspiro. Sabía que tenía que volver. Que no podía desilusionar a Simon. Que mientras más fingía estar bien, más rápido las cosas pasarían.

Se puso de pie de pronto, arrepintiéndose al instante por que su cabeza empezó a dar vueltas. Pero lo ignoro.

Fue a su lujoso baño, llevando su celular para conectarlo por Bluetooth con las bocinas del techo. Dándole al botón de aleatorio, la playlist empezó a sonar.

Entro a la ducha, dejando que el agua caliente cayera sobre su cabeza, respirando profundo una y otra vez, deleitándose con el aroma de los productos de aseo personal.

Puede que aprovechara su tranquilidad para practicar que le diría a Louis cuando lo viera. A Harry le daba lo mismo, tener o no una relación amistosa con Louis, pero estaría con él la mayoría de tiempo por los siguientes nueve meses, no le sonaba mal empezar de cero y tratar de hacer un amigo, a demás cuando pasara ese tiempo, no lo volvería a ver jamás.

Eso sonaba perfecto.

- -

—Yo... lo siento no pensé las cosas que te dije, sé que tienes una vida personal, que no tengo que saber todo acerca de ti. Pero debes de entender que mis notas de este año definirán mi futuro, y solo te pido un poco de responsabilidad, ¿Empezamos de cero?— Louis estrechó su mano esperando la respuesta de Harry.

Este quedó anonadado ¿Para que practicó en el baño entonces? Louis lo había dicho todo desde que lo vio.

Harry tomo la mano de Louis —Estoy de acuerdo— mantuvieron el agarre unos segundos. Louis sonrío. —Bien. ¿Ahora que?— Harry le devolvió la sonrisa mostrando sus hoyuelos.

Louis soltó el agarre —¿Tienes hambre?— Louis dijo subiendo las escaleras dejando a Harry atrás.

—De hecho, muchísima— Louis se detuvo y dio un giro, ahora bajando las escaleras.

—Eso es nuevo nunca tienes hambre— Harry soltó una carcajada —Ven a la cocina— Louis lo invito a sentarse en el desayunador —¿Quieres algo en específico?— dijo mientras abría la nevera.

—¿Puedes pedir delivery? Yo pago. Puede ser pizza— Harry estaba usando su celular. Y luego dirigió su vista hacia Louis quien estaba negando con el ceño fruncido. —Cierto. Lo siento.

Louis cerró la nevera —No pasa nada. pero podemos intentar hacerlo, lo que sea que sea lo que dijiste— Louis dijo mientras se acercaba a Harry.

—No soy bueno en la cocina.

—Me puedes decir cómo hacerlo, y yo lo hago— Louis subió las cejas.

Harry suspiro —Intentaré hacer memoria, la última vez que hice pizza fue con mamá y Gemma, tenía como 14 años— Harry sonrío recordando.

—¿Gemma es tu hermana?— Louis pregunto.

Harry abrió los ojos como platos dándose cuenta que soltaba cosas sin pensar. Ahora Louis ya sabía de su familia, Genial.

—¿Sabes que? Tomaré un pan de estos, no puede estar tan mal— Harry se puso de pie tomando un pan que estaba en una bolsa y dándole un bocado. Para ser sinceros el esperaba que estuviera malo, desabrido y duro pero, wow, todo lo contrario. —¡Diablos! ¿Me puedo casar con un pan?

Louis estallo en risas y luego Harry empezó a reír también.

No eran amigos, pero no estaban cerrados a la idea de serlo. Los días no iban nada mal, Harry llegaba temprano a casa de Louis y respondía de forma coherente las preguntas de este. Louis había comprado una pizarra así Harry podía explicarle, o más bien dibujarle lo que eran algunas cosas que se le hacia difícil explicar con palabras. Al llegar al motel Harry se sentaba a establecer conversaciones sobre su día con Raúl y otros días se ponía a escribir letras de canciones. Los fines de semana seguía yendo a su mundo. No había tomado la decisión de ver a su madre y hermana, pero sabía que tenía que hacerlo pronto.

Dedicado a: @claudia_stylinson @_Perfect_eyes_

Both worlds Donde viven las historias. Descúbrelo ahora