Epílogo: consecuencias y redención

73 5 11
                                    

El sol de la tarde se cernía sobre una tumba. La lápida como cualquier otra, pues lo único que tienen en común todos los seres humanos es la muerte. En la inscripción se podía leer el apellido Thaed junto a un epitafio que decía "Madre de 4 hijo que amo con todo su ser" y enfrente a la tumba estaba el hijo menor, aquel con el cual tuvo que tomar la decisión más difícil para que él no tuviera el destino que se le predijo.

Victor: - Hola madre - Una expresión de tristeza se formó en su rostro - No sé muy bien por qué decidiste hacer eso conmigo, pero quiero que sepas yo no quería esto para ti. Sí siento mucho rencor hacia a ti pero jamás imaginé verte muerta - El chico cerró sus ojos - Espero que tu alma encuentre el descanso

Mientras el chico se hundía un momento en sus pensamientos para despedirse de su madre y volver a su casa. Un hombre se paró de atrás de él haciéndolo reaccionar y sorprendiéndolo

Joseph: Lo siento... no quería asustarte

Victor: -Joseph eres tu - Sintió un escalofrío recorrer su espalda

Joseph: No te preocupes... solo vine a ver a mamá - Una mirada de tristeza se posó en su rostro al ver la tumba - He hecho todo mal este tiempo, y eso me duele tanto. Si tan solo...

Victor: - No sé por lo que hayas pasado, pero no quiero que pienses que esto es tu culpa. Ay mira yo no creo ser el más correcto para hablar de esto... pero conozco a alguien que tal vez sí -

Joseph: - ¿Qué harás ahora?

Victor: - Tu tranquilo (Hey William podrías ayudarme un poco) - Hubo uno momento de silencio hasta que el chico de lentes volvió a hablar

William: - Hola olvidadizo -

Joseph: - Esto sigue siendo muy raro ¿Quién eres?-

William: - Bueno todos me dicen hippie, aunque no es como sea mentira jajajaja es solo que ellos no pueden ver lo que veo o tú también ves - Una sonrisa se posó en su rostro

Joseph: - ¿Entonces tú también puedes verla? -

William: - Por supuesto pero ssshhhh - Una risilla salió de su boca, lo que hizo fruncir el ceño a Joseph - Pero estoy aquí porque tu hermano me pidió ayuda para encontrar tu camino

Joseph: - ¿Y tú me ayudarás? -

William: - Claro, que mi actitud no te deje engañar. Sé lo que hago -

De forma casi instintiva ambos comenzaron a caminar por aquel cementerio

William: Mira las cosas no siempre tienen sentido, la vida fluye en un mar tormentoso lleno de olas de posibilidades y rayos de desgracias. Lo importante es saber que todo lo que hacemos va marcando el flujo hacia donde queremos seguir navegando - Joseph simplemente lo miraba un tanto confundido pero interesado - Es verdad tu madre murió, pero fue lo que ella decidió hace mucho. Aunque tuvo la voluntad de remediar sus acciones con un último acto no solo por Victor sino por ti también Joseph - Casi como por inercia ambos pararon quedándose uno enfrente del otro

Joseph: Espera ¿A que te refieres con...? - Sin poder seguir con su pregunta su mirada fue hacia hacia cierta tumba, cuya inscripción llenó los ojos de Joseph pues el nombre que se deletreaba un nombre - Eres... eres tu - Lentamente se acercó mientras lágrimas corrían por sus mejillas y dentro de tu corazón un vacío aumentaban

Historias de los roleplaysDonde viven las historias. Descúbrelo ahora