mariposas [soukoku]

nuevas mariposas

Obviamente era imposible para ambos jóvenes fingir que nada de lo anterior había pasado, era un corto que se reproducía una y otra vez tanto en sus memorias como en su carne, y ahora ambos debían responder la incógnita de que hacer.

Era verdad que aún existía la posibilidad de fingir que nada de eso sucedió, pero no deja de ser la opción menos fiable y la menos probable para ambos, ¿entonces que quedaba?

El único que se lo preguntaba era Chūya, tenía el pensamiento de que había arruinado todo y que el castaño no le volvería a hablar mientras que este estaba tratando de aclarar su mente y entenderse a si mismo, algo que nunca intento en sus largos años de vida y lo haría ahora por el pelirrojo

El camino a la secundaria fue tortuoso para ambos, Dazai ni siquiera pensaba en que sería de su relación ahora, de echo ni siquiera pensó en la opción de alejarse de Chūya, quizás estaba en una burbuja que le decía que todo estaba bien si era con el.

Así que cuando apenas piso el aula fue como de costumbre hacia el lugar del pelirrojo, como dije al principio, ninguno iba a fingir que nada paso pero para Dazai eso no sería molestia ya que estaba encantado con lo que pasó y no estaba tan metido en esos temas como para entender el porque debía tomar una decisión o fingir que nada paso.

─ Buenos días chibi. ─dijo como de costumbre cuando pasaba por allí, lo hizo con tanta normalidad que el pelirrojo no pudo contestar.

Es decir, estuvo pensando tanto para nada? el castaño le hablaba normal?

Aún así el pelirrojo había tomado una decisión y eso iba a hacer, se negaba a seguir como siempre.

Mientras Dazai estaba de lo más calmado a la hora de clases, posiblemente debido a que el pelirrojo no lo abandonó como el creyó el día anterior, Chūya estaba imaginando miles de escenarios posibles.

No era tan idiota como para no entender que Dazai simplemente no entendía.

Y ni siquiera el timbre que anunciaba el receso logró sacarlo de sus pensamientos, pero una mano revolviendo su cabeza si lo hizo.

─ Chibi estas bien? ─ porqué de la nada el castaño tenía tan buen humor?

Chūya no pudo hacer otra cosa que agarrarse de los cabellos frustrado por la mirada preocupada y curiosa de su amigo-no-tan-amigo.

─ Podemos ir al comedor? me muero de hambre. ─dijo el pelirrojo rompiendo el silencio y aliviando un poco al castaño que se había comenzado a preocupar.

─ Claro...

El de ojos celestes sonrió al ver que Dazai aceptaba la bandeja de comida, le alegraba saber que había logrado que mejorará aunque sea un poquito más el día de hoy.

El castaño comenzó a hablarle a Chūya acerca de un chisme escolar del cual el no tenía la menor intención de escuchar, aparentemente una tal morena se acostaba con un profesor de física, el pelirrojo lo miraba con el ceño fruncido, por tres cosas:

- Le costaba entender lo que el castaño decía ya que este comenzó a hablar muy rapido y seguido.

- No le interesaba en nada lo que estaba escuchando.

- Y terero, Dazai estaba hablando de acostarse sin saber siquiera que significaba.

El más bajo no pudo más y terminó por interrumpir al castaño.

─ Dazai porque actuas como si lo de ayer no sucedio? ─tan directo como siempre.

El nombrado se calló de inmediato y quedó anonadado con la pregunta pero sabía de lo que hablaba.