. ~ It was all for you ~.

Capítulo II

Desde que regresaste al instituto ya no mostraste rastro de "vida" alguna... estabas vacía y completamente rota.

No le tome importancia

Sin saber que pronto me arrepentiría

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Poco después del entierro de Inko. Izuku se dispuso a regresar al infierno disfrazado de instituto, con el único objetivo de lograr graduarse y de esta manera alejarse de todos.

Al llegar a su salón, se dio cuenta que nada había cambiado; todo seguía siendo la misma mierda de siempre; golpes, insultos y miradas ofensivas hacia su persona. Nadie en ese lugar sentía la más mínima culpa o pena sobre lo que le había ocurrido a la joven peliverde.

.- Mira quien regreso.- dijo con un tono burlesco Sero.- Escuche que te has quedado huérfana... Seguro que tu madre se dio cuenta del pedazo de basura que tenía como hija y decidió suicidarse.- concluyo con una inmensa sonrisa.

.- Con solo pensar que comparten lazos de sangre, cualquiera desearía quitarse la vida.- afirmo Toga.

.- JA JA JA JA...

Izuku solo quedo inmóvil ante sus palabras, "suicidarse" qué diablos estaban diciendo estas malditas personas. Su madre tuvo que sacrificar su propia vida para salvar la de su hija. Estas personas no sabían nada... solo soltaban porquería sobre la muerte de su madre.

De repente un líquido se escurrió desde de su cabeza. -Sabía quién era, pero no se inmuto en ningún momento.

.- Todo es tu culpa maldita escoria... si no hubieras nacido tu madre aun seguiría con vida.- le reprocho Katsuki.- Tu arruinaste su vida...

Todo volvió como era antes; los insultos y golpes se intensificaron a gran velocidad. Izuku ya no mostraba reacción alguna... No le importaba, ya estaba acostumbrada al trato violento que recibía, no se quejaba, porque sabía que no cambiaría nada con eso.

Después de unas cuantas semanas todo perdió diversión. Todos empezaron a aburrirse de Izuku Midoriya, puesto que aquella omega que lloraba y rogaba que se detuvieran debido a los dolorosos golpes que recibía, ahora solo parecía un muñeco sin vida.

El principal afectado era Katsuki Bakugo, ya que ahora había perdido su juguete preferido.

Pero ¿solo era eso?

Katsuki estaba cabreado hasta el núcleo, aquella omega que era divertido de romper diariamente, ahora solo era un pedazo de trapo que no reaccionaba a nada.... Ahora solo se parecía a un muerto viviente.

Aquellos ojos esmeraldas que mostraban brillo, ahora estaban totalmente opacos.

Era aburrido, pero no podía hacer nada.

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Era hora de la salida, y ya era muy tarde, Katsuki salió extremadamente enojado por quedarse horas extra estudiando, sin embargo, no muy lejos de donde se encontraba el joven alfa sintió un fuerte aroma de feromonas olor vainilla y gardenias, eran demasiado profundas y embriagantes.

Sabía a quién le pertenecían, porque en el pasado fue el aroma que más amaba.

Le pertenecían a su "omega".

Corrió... corrió y corrió a gran velocidad hacia el lugar donde emanaban aquellos exquisitos olores... al llegar a un pequeño callejón pudo divisar a Izuku, ella estaba retorciéndose buscando calmar el dolor que estaba sintiendo su cuerpo... el joven alfa no lo aguanto, y dejo que la lujuria se apoderara de su ser, con la única intención de apoderarse de aquel cuerpo tirado en el frio suelo.