Capítulo 2:
La linda Hanna.
-Entonces, déjame ver si lo entiendo. ¿Perdiste el brazalete que te regalo tu madre, alguien llamado Derek rayo tu auto, y tu estas enamorada de el? –preguntó Ethan-
Estábamos en la clase de economía, pero nadie le prestaba atención al profesor. Además, era bastante complicado hacerlo, ya que los tontos que siempre están sentados al fondo, no paraban de gritar y reírpor más de que el profesor les llamara la atención miles de veces.
- ¿Qué? ¡No! Scarlett lo esta… bueno, en realidad no esta enamorada de el pero si encaprichada –suspire- según ella, el esta “muy fuerte”
-¿Y lo esta?
-Si…no… bueno, quizás –sonreí un poco y al darme cuenta de lo que estaba diciendo sacudí mi cabeza, tratando de que ese pensamiento se vaya- ¡Ese no es el punto Ethan! –reproché-
-Bien, lo siento. Dios, me desaparezco por unos minutos y ya pasaron un montón de cosas –suspiró-
-Si, eso te pasa por pasarte todo el día con “La linda Hanna” –dije haciendole burla-
-Joder, esos no se callan nunca –se quejó Ethan ignorando lo que yo dije, y dándose vuelta para mirar a los rebeldes que no paraban de molestar-
-¿Qué miras cara de mono? ¿Quieres un poco de esto? –gritó uno del fondo, mientras sacudía y tocaba su cuerpo con sus manos mientras que todos sus amigos reían a carcajadas como si fuese lo más gracioso del mundo-
-¿En serio tengo cara de mono? –me preguntó dándose vuelta, ignorando las risas y los gritos de los otros-
-Claro que no –reí, ya que Ethan era uno de los chicos mas hermosos que había conocido- solo lo hacen para molestarte.
El resto de la clase se pasó bastante aburrido, el profesor seguía hablando pero yo no le prestaba atención.
No podía sacarme de la cabeza a ese tal Derek. Quería saber más de el, quería saber qué clase de chico era.
Tenía pinta de que seríamás enemigo que amigo, aunque yo no lo quisiera.
Eltenía algo que me gustaba. A pesar de sus hermosos ojos negros, y su pelo castaño, que parecía tan sedoso, había otra cosa. Algo en su interior. Algo en su personalidad que me daban ganas de llegar a conocerlo a fondo, saber todo sobre el. Y algo me decía que tenia que averiguar sobre el. Saber todos sus secretos y miedos. Y lo lograría.
Siempre lograba lo que quería.
En la hora del almuerzo, empuje ambas puertas gigantes para entrar a la cafetería, e inmediatamente todos los ojos estaban clavados en mi. Pase caminando muy digna, mientras escuchaba algunos comentarios, tanto negativos como positivos y algunos silbidos. Pero no le di importancia.
La cafetería no era la gran cosa. Por la derecha, tenía las barras en donde podías pedir comida o recoger algunas de las envasadas. Y luego, por la derecha, habían puras mesas y una salida de emergencias. La sala estaba completa de ventanas, que daban al patio en donde algunos salían a almorzar o estudiar cuando el día estaba lindo. Aunque en este pueblo siempre llueve y casi nunca hay un día soleado sin nubes.
En la esquina derecha, cerca de las barras, habían dos mesas juntas, en donde estaban los nerds, comiendo mientras estudiaban,
En la esquina izquierda, habían 3 mesas juntas en donde estaban los deportistas y los rebeldes, riéndose mientras almorzaban.
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Mi Estupido Hermanastro.
UmorismoDicen que cuando dos adolescentes se enamoran, el chico salva a la chica, o viceversa. Pero, que pasa cuando ambos son exactamente iguales? ¿Se podrían salvar el uno al otro? ¿Estarán dispuestos a entregar todo, y dejar el orgullo a un lado solo par...