Entre Nosotros | Bucky Barnes & Morgan Stark | Fanfic | MARVEL

38.

-¿Cómo me veo? – dije mirando a James a través del espejo, el se encontraba reclinado contra el marco de la puerta con sus brazos cruzados.

-Hermosa – me sonrió – Con lo que te pongas, con o sin maquillaje, desnuda o con mil prendas encima – se frunció de hombros, una sonrisa se formó en mis labios y mis mejillas comenzaban a calentarse.

El se acercó a mi por la espalda y poniendo sus manos en mi cadera me pegó a el para luego comenzar a dar húmedos besos en mi cuello, haciéndome jadear. Cuando me di la vuelta para quedar frente a el, se inclinó y levantándome por mis muslos me dejó sobre donde estaba el lavabo.

Se puso entre mis piernas y atacó mis labios ferozmente, para después presionar sus manos contra mi trasero pegándome mas a el mientras enrollaba mis piernas alrededor de su cadera y subía una de mis manos hasta su cabeza para comenzar a enrollar mis dedos en su cabello.

El sonido de un mensaje llegando a mi teléfono hizo que James despegara sus labios de los míos y volvió a atacar mi cuello con sus húmedos besos, el mensaje era de mi madre diciéndome que si no salía ahora a el aeropuerto llegaría tarde para recoger a mi hermana.

-James – dije en un gemido mientras intentaba separarlo de mi – En serio, debemos irnos; prometimos recoger a Emma y llevarla a comer – bufó y se separó de mi a regañadientes

-Bien – me tomó de la mano y comenzamos a caminar juntos hacia el estacionamiento para irnos hacia el aeropuerto; esta vez James iba conduciendo para que cuando estuviésemos con Emma yo pudiese hablar con ella.

Nos bajamos y una azafata se acercó a nosotros con una pequeña muy tierna de cabello oscuro. La señorita le entregó las maletas a James y yo me agaché para quedar a la misma altura de mi hermana.

-Hola Emma – le sonreí y ella me devolvió el gesto – Soy tu hermana Morgan – extendí mis brazos y ella se lanzó hacia a mi dándome un abrazo, yo la levanté del suelo en mis brazos. – El es James – mi novio le sonrió amablemente y le acarició la mejilla haciendo que la niña girara su rostro apenada

-Es muy lindo – susurró en mi oído

-Ya lo sé – le susurré de vuelta

-¿Es tu novio? – continuó en mi oído

-Así es – sonreí y ella sonrió de vuelta

-¿Me puede cargar? – me miró con un puchero

-James, ¿la cargas? – el asintió y la tomó en sus brazos, yo iba caminando detrás de ella y cuando Emma me miró una amplia sonrisa se dibujó en su rostro haciendo que yo le sonriera de vuelta.

-¿Qué quieres comer? – me di la vuelta para mirarla, ella estaba cantando la canción que estaba sonando en la radio

-Jmmm... - hizo una mueca que mi padre también hacía, haciéndome sonreír - ¿Cheese Burger?

-¡Claro! – asentí - ¡Son mis favoritas!

-¡Las mías igual! – dijo ella emocionada, luego chocamos los cinco.

Cuando llegamos al restaurante comenzamos a preguntarle a Emma acerca de como la había pasado en estos años que estuvo en el internado, nos habló acerca de sus poderes y de como le estaban enseñando a manejarlos y pude conocerla mucho.

-¿Vamos a casa? – dije inclinándome a su altura de nuevo cuando ella bajó por el tobogán, ella hizo un puchero; luego James se inclinó junto a mi

-Prometo traerte de nuevo – le guiñó un ojo y en ese momento Emma asintió, James la tomó de la mano y la llevo al auto de nuevo. Las Stark tenemos muy buen gusto, hay que admitirlo.