Querida Paris,
solo han pasado unas horas desde que te vi por última vez. Pero necesitaba escribirte. Creo que sin conocerte, eres la única en la que puedo confiar.
Siento que nadie me entiende. Que no hay nadie realmente para mi cuando lo necesito. Siento que tú que eres una desconocida y sin mirarme, que a ti, te caigo mejor.
¿Es eso, Paris?
No debí de hacerme ilusiones. Porque la gente me rodea, y los murmullos también. Pero necesito silencio. Necesito que alguien me diga que le importo algo.
O quizá, importarle a alguien.
Lo siento, Paris. Siento tener que escribirte esto en vez de recordarte lo increible que eres.
Siento que tengas que ver esta parte de mi. Siento tener que escribir estas lineas. Siento no ser como los demás, y ser genial. Siento todo esto.
Porque me siento culpable. El dolor que siento es por mi culpa. Me lo he ganado.
Pero no lo quiero.
No quiero nada de esto.
Ójala tu pensaras que soy una persona maravillosa.
Ójala pudiera mentirte y decirte, que sí lo soy.
