🌑 A-Bai escrito por Aqin Aqin (阿秦阿秦)
⭐ Capítulo 1
Me estaba muriendo en una esquina, mi respiración era débil y la sangre fluía lentamente de mi horrible herida, arrebatándome la vida sin piedad.
Rodeado de fábricas abandonadas, los edificios derrumbados cubiertos de maleza y el aire lleno de polvo fino en descomposición. Era mediodía, y el sol luchaba por brillar a través de los huecos en los edificios que son muy sombríos.
El lugar está deshabitado, desierto y silencioso.
Duele.
¿Voy a morir?
La conciencia se iba desvaneciendo poco a poco.
Una vida corta pero emocionante, como una nube pasajera, pasó lentamente ante mis ojos.
Algo frío goteo de mis ojos.
No quiero morir...
— ...también derramar lágrimas?
En el último momento antes de caer en la oscuridad, le pareció escuchar la voz de un joven dubitativo.
En medio del caos, parecía haber luz.
Agité las pestañas y abrí los ojos.
Lo primero que vi fue un par de manos, dedos delgados y largos, tratando mi herida.
¿Quién? Me quedé ligeramente aturdido mientras miraba hacia abajo de mis brazos y hombros.
Un joven muy amable y desconocido, de unos dieciocho o diecinueve años, con las cejas claras y suaves, y una sonrisa en los labios.
Tenía la cabeza agachada mientras me vendaba, las pestañas bajadas y los nudillos agitados, con movimientos como una pintura.
Cuando se dio cuenta de que estaba despierto, curvó los labios y me sonrió.
Me quedé sorprendido.
Fue hermoso.
Era como si las flores estuvieran floreciendo.
Exhausto por los días de huida y la pérdida excesiva de sangre, que me dejaron aturdido, olvidé las precauciones que no me atrevía a dejar en el pasado.
— Recupérate pronto
El joven terminó el vendaje y me acarició suavemente la espalda.
Me estremecí ligeramente.
Era más cálido y confortable que cualquier otro lugar en el que hubiera estado antes, mi mente estaba demasiado confusa para pensar en otra cosa, así que me quedé dormido, rodeado por el olor fresco de la medicina y el calor de la casa.
Ten cuidado.
Cuando me desperté de nuevo, estas dos palabras pasaron por mi mente.
Sin poder mover mi cuerpo herido, giré la cabeza para mirar a mi alrededor y observar lo que me rodeaba.
Era una cabaña bien conservada, sencilla, seca, cálida y resguardada del viento y la lluvia.
Estaba acostado en el suelo en el lado izquierdo de la cabaña.
Nunca he vivido en un lugar tan bueno.
Parecía que el chico lo estaba haciendo bien.
En este miserable mundo postapocalíptico, hay muchos muros rotos por todas partes, y una casa bien conservada es el hogar de los fuertes.
ESTÁS LEYENDO
A-Bai
Fantasy"Parece que hay que vigilarte con firmeza." La voz de Mu Wen era baja y apagada, revelando un fuerte deseo de monopolización y control. Mi corazón se enfrió. "No dejes que nadie te vuelva a ver"