Cinco excusas para tocarnos (RoixRiza)

5-Al final de todas las cosas

Riza abrió la puerta de la oficina con la rodilla mientras balanceaba las cajas de comida para llevar y una bandeja de dos cafés calientes. Roy mantuvo la cabeza baja cuando ella entró, pero le hizo un gesto para que la dejara en la mesa en el medio de la habitación antes de continuar con su trabajo. Después de dejar la comida, tomó su bebida y caminó detrás del escritorio de Roy para supervisar su lento intento de informes de gastos. Tenía el ceño fruncido por la concentración o la frustración. Un vistazo rápido a las páginas frente a él indicó que probablemente eran ambas.

"¿Cómo va, general?" preguntó antes de tomar un sorbo de café. La taza estaba débil, ya que les había pedido que la mezclaran con medio descafeinado, pero lo prefería así a esa hora tardía.

Hizo una pausa por un momento para rascarse la cabeza y suspirar irritado. "Acababa de acostumbrarme a los últimos formularios, y ahora todo ha cambiado de nuevo".

"Bueno, un nuevo gobierno necesita hacer mejoras a medida que perfeccionan su proceso". Hizo un gesto hacia el símbolo en la parte superior de la página: un dragón verde mirando hacia la derecha sobre un fondo blanco con NA encima. El símbolo de Nueva Amestris era inverso al anterior, un intento o promesa del Parlamento recién elegido de que las cosas serían diferentes. Incluidos los formularios de informe de gastos.

"Estoy consciente", respondió malhumorado. "¿Me traerías la comida?"

Ella negó con la cabeza, a pesar de que estaba parada detrás de él. "Estaban sirviendo sopa esta noche. Es mejor comerla en la mesa y no derramar nada en los formularios. ¿A menos que quieras que me haga cargo de ti?"

"No, usted sabe que prefiero hacer los gastos yo mismo. Necesitamos asegurarnos de que todo quede perfectamente resuelto este mes para sentar un precedente para el futuro de este departamento". Aunque Roy normalmente le entregaba todo a su hábil Capitán, había desarrollado el hábito de hacer presupuestos y gastos él mismo. Algunos de los otros habían bromeado diciendo que solo era un tacaño que quería privarlos de un gasto de café o dos, pero cuando Roy se enteró, su ceño fue lo suficientemente profundo como para terminar y confirmar la broma.

"Tiene razón, señor. Terminaré las revisiones de personal en un minuto."

Justo cuando Riza estaba tomando otro sorbo de su café, alguien llamó con fuerza a la puerta.

"¿Lo cerraste cuando volviste?" Roy preguntó sin mirar hacia arriba.

"No, señor, mis manos estaban ocupadas. Pero si eso es lo que usted predijo que sería, la cerradura no lo detendría de ninguna manera".

Suspiró y se puso de pie. "Muy bien, Capitán. Tal vez pueda terminar este informe mientras yo -"

La puerta se abrió de golpe y Edward Elric entró, su rostro contorsionado con más rabia de la habitual. "¿Qué diablos cree que está haciendo, general?" Tenía las manos apretadas en los puños y su pecho palpitaba, aunque eso podría haber sido por correr los tres tramos de escaleras.

Roy miró a Riza y asintió con la cabeza, "Termina el informe. Yo solo manejaré el -"

"¡Oye, te estoy hablando!" Ed gritó, señalando con un dedo en dirección a Roy. "¡Explicate tú mismo!"

Rodeando el escritorio para mirar a Ed, Roy frunció el ceño, "No tuve que explicarme cuando eras mi subordinado, y eso es aún más cierto ahora que no eres -"

"No se suponía que esto suceda hasta que estaban Führer! Se suponía que debía tener más tiempo! Winry se supone que tiene más tiempo! Quería decir adiós a usted y Capitán Hawkeye, pero ahora sólo hay quizá un par de semanas a la izquierda y ella no puede dejar a los niños. Así que es mejor que tengas una maldita buena razón para esta mierda que estás haciendo ".