Brahms Heelshire One Shots

¿Por qué estás aquí?

Créditos: Slasherbastard

Idioma Original: Inglés

La melodía de la canción de cuna de Brahms llenó la habitación mientras tocabas el piano, con el muñeco de porcelana sentado a tu lado, lo miraste por una fracción de segundo en busca de aprobación antes de volver tu atención a la música. Te estabas acercando al final de la canción cuando una puerta se cerró de golpe en la planta baja, lo que te hizo perder el enfoque y presionar la tecla incorrecta. Miraste a la muñeca. Un día lo haras bien.

Te acomodaste en tu asiento y estiraste los dedos antes de comenzar la canción nuevamente, solo para darte cuenta de que habías estado esperando que Malcolm te llamara para que lo ayudaras con su entrega, hasta que recordaste que Malcolm hizo su entrega semanal ayer, rápidamente te pusiste de pie, agarrando al muñeco. Saliste lentamente de la habitación y subiste las escaleras mientras tratabas de atrapar a quien acababa de entrar en la mansión, y cuando viste su rostro, deseaste que fuera un ladrón de verdad.

"T/N. Te ves bien."

"¿Qué estás haciendo aquí?" Te mantuviste firme a mitad de camino en las escaleras mientras tu ex trataba de dar unos pasos hacia adelante. "¡Dije qué estás haciendo aquí!" levantaste la voz mientras levantaba sus propias manos para rendirse.

"Cariño, está bien. Estoy aquí para llevarte a casa. " Soltó una carcajada en su propio intento de aligerar el estado de ánimo, pero tu rostro permaneció frío como una piedra.

Poniendo los ojos en blanco, terminaste de bajar las escaleras, dejaste al muñeco en una silla cercana y te volviste hacia tu ex. "Elijah, no puedes estar aquí. ¿Quién te dijo que estaba aquí? ¿Eh?" Volviste a levantar la voz y él te miró fijamente.

"Tu hermana. Está muy preocupada por ti y esas cosas y puedo ver por qué." Apuntó al muñeco y rápidamente te paraste frente a él. "Vamos. ¿Realmente estás cuidando un puto juguete? Sé que siempre has estado un poco fuera de lugar, pero este es un nuevo nivel de ..."

Las lágrimas brotaron de tus ojos mientras hablaba. "Me fuí para alejarme de ti. Esto es lo más feliz que me he sentido en meses, ¿quién dice que es fácil? ¿Sólo me apegué a mis caprichos y me escapé? Además, ¡yo también he estado escribiendo!"

"¿Así que realmente no me necesitas?" esperó tu respuesta, pero en lugar de eso, agarraste al muñeco y te abriste paso a la fuerza, te dirigiste a la cocina y dejaste la muñeca en la mesa. Caminaste alrededor del mostrador y Elijah te siguió, todavía tratando de sacarte esa respuesta. "No me iré hasta que me digas..."

"No te necesito." Rápidamente te limpiaste las lágrimas mientras observabas como cambiaba su expresión y sus ojos se posaban en el bloque de cuchillos. "Elijah." Le advertiste pero él no escuchó mientras prácticamente se deslizaba por la cocina y agarraba un cuchillo del bloque, tus ojos se abrieron cuando comenzó a acercarse a ti y tus pasos hacia atrás no ayudaron cuando tu espalda golpeó una pared. A pesar del hecho de que tu ex te sostenía a punta de cuchillo y arrastraba la hoja por tu cuello desnudo, no podías evitar sentir como si alguien más estuviera cerca, viendo pasar esto.

"Intentemos esto de nuevo. Vas a volver conmigo. Vas a dejar este muñeco, vas a salir de esta casa, vas a volver conmigo y verás a tus amigos y tu familia, vas a vivir conmigo y lo vas a disfrutar. Todo volverá a ser como era antes." Continuó como si estuviera tratando de hipnotizarte, te sorprendió que su aliento no apestara a alcohol.

Continuó arrastrando el cuchillo perezosamente, casi cortándote un par de veces mientras presionaba un poco demasiado fuerte y lo deslizaba por tu piel en un intento de obtener algún tipo de reacción en ti. Elijah sabía que te asustaba hasta cierto punto, sin importar si nunca lo admitías, era su especialidad, la manipulación.

Te pasaste los dientes por el labio inferior y lo mordiste mientras él se acercaba y estaba inclinando el cuchillo en un nuevo ángulo, sabías que si no hacías algo tarde o temprano sería cuestión de tiempo antes de que te desangraras en el piso. "Ok."

Se detuvo y te miró. "¿Ok?"

"Iré. Déjame empacar mis cosas." Dio un paso atrás y tiró el cuchillo sobre la encimera y trataste de pasar a su lado, pero él te agarró por encima del codo y te golpeó contra la pared de nuevo.

"¿Prometes que no intentarás nada? Porque si lo haces..." Fingió sostener el cuchillo e hizo un gesto de apuñalar. Asentiste con la cabeza y él te soltó de nuevo y vio como ibas a agarrar al muñeco. "Uh-Uh, esa cosa se queda aquí." Lo miraste y se rió entre dientes. "Vamos, lo cuidaré, aunque sus padres también tendrán que pagarme a mí."

Vacilaste, pero te diste la vuelta y te dirigiste hacia las escaleras mientras tratabas de secarte las lágrimas. 'En realidad no me iré, ¿verdad? No quiero irme', pensaste hasta que sentiste que no podías controlar tus piernas mientras subías las escaleras y entrabas en tu habitación.

Te detuviste y te sentaste en la cama, con la cabeza entre las manos mientras más lágrimas comenzaban a caer, te quedaste así por lo que pareció una eternidad, aunque pueden haber sido unos buenos 30 segundos en tiempo real. No fue hasta que escuchaste un grito en el piso de abajo que te sacó de tu trance. Te levantaste y empezaste a bajar rápidamente las escaleras antes de correr a la cocina para ver a Elijah en el suelo con un hombre grande encima de él que lo ahorcaba.

Antes de que te dieras cuenta, Elijah estaba inconsciente y fue entonces cuando notaste que el cuchillo de antes se clavó en su costado y sangraba. El hombre encima de él se puso de pie y se volvió hacia ti, instantáneamente ataste cabos sueltos y te diste cuenta de que era Brahms. Sin pensarlo bien, corriste hacia él y envolviste tus brazos alrededor de su cuerpo y seguiste llorando. Estaba desconcertado por el movimiento y estaba listo para pelear contigo, pero no lo hizo, en cambio envolvió sus brazos alrededor de tu cuerpo más pequeño y escuchó tus gritos y un "gracias" que le dijiste.