Nota 36

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Estaba en mi habitación escuchando aquellas canciones que te hacen sentir en las nubes y te hacer volcar tu corazón, mire la estantería que estaba a lado mío ahí se encontraba los regalos que tú me habías dado, la flor azul de metal dentro de una taza y el muñeco de mi personaje favorito a lado de unos libros.

Sabes, por un minuto creí que tú podrías ser el indicado, creí que por fin alguien podía ver mis defectos como algo hermoso al punto de poder amarlos pero me equivoque. 

Te felicito, lograste que bajara un poco la guardia y estuve a punto de creerte cada una de las palabras que salían de tú boca pero nunca llegamos a esa parte.

Tú último mensaje me hizo pensar tantas cosas que puede que seas ciertas y puede que no, si la idea de que encontraste a otra chica es cierta espero que ella sea la correcta y que no este tan lejos de ti. En tú mensaje decías que no eras lo suficientemente fuerte para seguir teniendo una relación conmigo por la distancia que había entre nosotros dos pero te pregunto ¿alguna vez pensaste en como me sentía yo? nunca paso por tú cabeza que yo me podía sentir igual o peor que tú, al parecer no.

Nunca creí que pudieras decir esas cosas a mis espaldas cuando yo trataba de dar lo mejor de mi, me doy cuenta que no eres la persona que yo pensaba que eras, me equivoque; sabes me lastimaste de una forma que no puedo explicar.

No sé que es lo que querías lograr pero solo quiero decirte que deseo que seas feliz y que estaré orando por ti.

Notas de un adolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora