BAILEY
[meses atrás]
—¡Para por favor, para!—ruego, mientras el sigue arremetiendo contra mi.
Los dolores en mi vientre no cesan, por el contrario, cada punzada es peor que la anterior, cada estocada duele. Él esta furioso por que perdí a nuestro bebé, bebé que ambos esperábamos con ansias, y a mi me duele todo, me duele el alma porque perdí una pequeña parte de mi porque esa personita me iba a querer sin importar que, estaría conmigo. En lo emocional estoy hecha mierda y en lo físico también, mi cara tiene rasguños, uno de mis ojos se encuentra morado y se que con maquillaje no lo podre cubrir, las costillas me duelen por las patadas que me dio. Incluso hay pequeños mechones de mi cabello por el suelo.
Lo peor de todo esto es que no tengo en quien acudir por ayuda, se que me la van a negar. Siempre fui una carga para toda mi familia, y a mis padres...
—Una cosa tenias que hacer, una sola maldita cosa. Mantener a nuestro bebé a salvo hasta el dia del parto.—me dice haciendo presión sobre mis mejillas con sus dedos—ni para mantener un bebé en el vientre sirves.
Quiero gritar pero, ¿de que sirve? No voy a solucionar nada gritando. Lo único que me apetece en este momento es dormir y despertar en un lugar mejor, con una vida mejor. No en esta vida de mierda. Aunque ahora creo que perder al bebé fue lo mejor, ¿que íbamos a ofrecerle? Inestabilidad emocional, teníamos que sanar nosotros mentalmente para que nuestro hijo no lo hiciera en un futuro por tenernos como padres, porque aunque iba a tener estabilidad económica —ya que el padre de Martin es famoso por representar a gente del medio artístico— nada me garantiza que Martin de verdad iba a cambiar. Y yo no quiero eso para mis hijos, quiero que crezcan en un ambiente lleno de amor, de seguridad, de estabilidad mental y definitivamente Martin no ayudaría mucho en eso.
Después de un rato me deja en paz y se larga a no se donde pero agradezco que me deje sola aunque sea solo por un rato. Aprovecho para bañarme y tratarme las heridas que me ocasiono. Ojala supiera como curarme las heridas del alma o ser un vampiro para apagar mis emociones y no sentir nada.
Bien Bailey, incluso hecha mierda no dejas tus chistes.
No era un chiste.
Bien, perdón.
Una vez ya bañada me voy a la cama, los golpes que dejo por todo mi cuerpo duelen con solo el roce de las sabanas y contengo las ganas de llorar porque ya lo hice bastante este dia.
No se en que momento logre quedarme dormida pero para cuando despierto ya es medio día, mi almohada se encuentra húmeda, genial, ¿llore dormida o llore antes de quedarme dormida?. El otro lado de la cama se encuentra igual que la noche anterior, lo cual es bueno porque por el momento no oiré gritos ni obtendré golpes.
Bajo a la cocina a prepararme algo para desayunar, aunque a decir verdad, no tengo hambre, pero si no me alimento seria peor. Necesito fuerzas para lo que se viene. Saco lo que necesito de la alacena y las pongo sobre la mesita que se encuentra en el centro de la cocina.
los golpes aún duelen y solo de recordar lo de el día anterior se me forma un nudo en la garganta.
Cuando termino el desayuno pongo los trastes sucios en el fregadero, mas tarde los lavaré . Subo a la habitación para recostarme.
Solo necesito olvidar todo por un momento.***
Un mes ha pasado desde la pérdida y la paliza brutal de Martín. Por increíble que parezca no he vuelto a saber de él en este tiempo, lo cual es bueno y malo a la vez. Se que en cuanto regrese el ciclo se repetirá.
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TAL VEZ EN OTRA VIDA
Teen FictionBailey Angel tuvo una infancia complicada y un matrimonio fallido desde los diecisiete años. Mattias Beckett creía que siendo famoso toda su vida estaría resuelta, sin embargo en el momento en que firmo un contrato que lo llevo directo a la fama se...