Amada amante \\ Adrienette ♡

Una confesión de amor

Marinette había llegado más temprano a la empresa, estaba con bastante frío por la lluvia. Tenía el vestido que le había dado Agreste en una bolsa de papel más una caja de chocolates.

-Señorita Dupain...¿Qué hace aquí tan temprano?- la voz de Adrien la toma de sorpresa.

-Vine para dejar esto, Adrien - sonrió y le dió la pequeña bolsa.

-Es un regalo para tí, no me lo dés, Macarrón. Fue de mi madre, ella deseaba que lo use la chica que iba a ser mi futura esposa...-

-¿Fu...tura es..posa?- las pupilas de la menor parecen brillar más.

-Y quien sabe, podrías ser tú...- Adrien iba a abrazarla pero una llamada interrumpió el momento.

-¿Qué quieres Chloé?-  preguntó el rubio molesto. Luego de varios segundos respondió -Olvídalo, no iré a tu desfile- y colgó.

-¿Qué pasa?- preguntó la menor.

-Chloé quería que vaya a un desfile de modas en el hotel, no pienso asistir después de lo que te hizo, Marinette- Agreste miró con ternura a la contraria -¿Chocolates?-

-Son para tí, los hice yo en la panadería. Pensé que te gustarían- se los alcanzó.

-Gracias, Marinette-

(...)

- ¿Cuando podré firmar el contrato, señor Agreste? - una chica de cabello chocolate mira los documentos de traslado a la nueva empresa.

-Mi hijo es el director, sólo él puede autorizar, señorita Rossi-

-Vamos, él no me querría aceptar. Puede firmar los papeles por él. Es bastante sencillo y legal-

Pero Gabriel permanecía serio y dispuesto a no dejar a la italiana ingresar como modelo a su prestigiosa empresa.

-Piénselo bien, o de lo contrario ¿Qué pensaría la prensa? Soy una modelo reconocida, podría publicar en mis redes sociales que los Agreste de Vanily no toleran a los extranjeros, o tal vez que no apoyan a las mujeres...- Lila saca el celular con una falsa expresión de angustia.

-No lo haga, usted va a tarabajar con nosotros- Gabriel saca el contrato -Será la nueva modelo de la compañía, pero no debe mencionarle ésto a Adrien, éste permiso especial sólo será entre usted y yo-

Se dirigió a la puerta y giró un poco.

-De paso usted me va a retribuirlo, contándome algunas cosas de cierta persona...-

-Si es Marinette, pondré todo mi empeño en quitarla de mi camino- Lila mueve su cabello -Ella se irá en menos de 3 meses, señor.-

(...)

-Hoy pueden salir temprano- anunció el joven Adrien a los empleados -Hicieron un buen trabajo hoy-

-Nos vemos mañana señor- se despedían todos.

-Señor Agreste, yo me quedaré un poco más- la dulce azabache le miró a los ojos como diciéndole "quédate", gesto que fue captado por el rubio.

-Bueno, yo debo hacer algo pendiente, creo que me quedaré un poquito más-

La franco-china sonrió. Luego de varios minutos se habían quedado solos en aquella sala de reuniones. El reloj marcaba las 9 de la noche y la tensión no tardó en romperse.

-¿Puedo?- preguntó el rubio.

-Claro que sí-

El rubio procedió a besar los labios de su princesa, la cargó y la sentó sobre sus rodillas a pesar de los reclamos de la azabache.

-¡No me cargues! Yo peso mucho- gritaba la menor entre risas

-Eres muy liviana, princesa- el rubio reía ante las pataletas de la menor y moría de ternura ante su carita.

-Marinette debo decirte algo-

Ella lo miró atenta.

-Te amo, princesa. Desde que nos conocimos siempre estuvimos destinados a estar juntos- tomó sus manitos -Perdóname por hacerte sufrir tanto tiempo, yo ...-

La menor pone un dedo en sus labios.

-Yo he estado enamorada de tí desde siempre, pense que te olvidaría con Luka, pero mis sentimientos han crecido cada vez más... tanto que ya no siento nada por Couffaine-

-Me hace feliz oir eso- Adrien procedió a sacar algo de su bolsillo y lo puso en la mano de la menor.

-Oh Adrien, es hermoso- era un bello collar con las iniciales de ambos.

-Son 2, una para ti y otra para mí. Las hice yo mismo... espero que te guste, princesa.-

Ella le dió un beso.

-Me encanta-

-Marinette, te adoro. Pero ahora debo esperar a que estés bien y tu corazón olvide a Luka por completo. Y sabes que la empresa es una gran responsabilidad-

Ella lo miró algo triste pero le entendía.

-Papá me presiona mucho para que dirija bien todo, ya que me dejará todo cuando muera- suspiró Adrien -pero te juro que cumpliré todos tus sueños, princesa... nos comprometeremos, luego tendremos nuestra boda y nuestros hijos... ah y podemos adoptar un hámster- sonríe

-¿Cómo sabías que yo quería...?

-Sé muchas cosas de mi princesa- Adrien besa su mano.

-Yo también quiero estar contigo, te amo-

Ambos se besaron.