Extrañar
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Los días en la escuela ahora eran aburridos, los entrenamientos en la mañana eran agotadores y los de la tarde tediosos, los almuerzos comenzaban a ser solamente almuerzos y las vueltas a casa ahora eran silenciosas.
Todo era muy distinto sin él, era entre aburrido y normal, ya no había sorpresas ni emociones, ahora todo era tranquilo como siempre lo quise... solamente que no me gustaba.
Vi a través de la ventana el día nublado y suspiré, el entrenamiento de la tarde se había suspendido por qué estaban reparando las canchas, por lo que ahora solo debía volver a casa en silencio y pasar una tarde aburrida, sin llamadas inesperadas o juntadas sorpresa.
Lo extrañaba tanto...
Salí del salón apenas oí el timbre de fin de clases y caminé lentamente hacia la salida, cambié mis zapatos y tomé mi paraguas.
El día claramente anunciaba que en cualquier momento comenzaría a llover, pero se ve que aunque él ahora sea un universitario que juega voleibol profesional, sigue siendo el mismo chico de preparatoria que olvidaba su sombrilla.
-Hola, Akaashi -me quedé estático unos segundos con una boca abierta, ¿Era realmente Bokuto? ¿O ya había comenzado a alucinar?
-¿B-bokuto-san? -pregunté sorprendido.
-Él mismo y en persona, ¿No vas a abrazarme? ¿O es que no me extrañaste? -él puso su típica cara depresiva mientras extendía los brazos.
Sonreí con emoción y me tiré a sus brazos, rodeando su torso y apretándole con fuerza. No quería separarme de él.
Desde que se había graduado de la preparatoria y había comenzado la universidad, Bokuto se había mudado a un pequeño apartamento cerca del gran equipo de voleibol en donde ahora jugaba como profesional y cerca de su facultad. Su carrera estaba recién despegando y estaba sumamente orgulloso de él, pero odiaba las siete horas de viaje que nos separaban, las odiaba profundamente por separarme de mi hiperactivo novio.
-¿Qué haces aquí? -le pregunté separándome de su cuerpo al caer en cuenta de que debía estar en otra prefectura entrenando con su equipo.
-Es obvio, ¡Vine a verte! -fruncí mi ceño al pensar que había viajado solo por un ataque de locura- Es que... te extrañaba más que a nadie.
Y todo el enojo que sentía, se esfumó al ver cómo rascaba su nuca avergonzado con los ojos cerrados. Sabía que estaba mal, sobre todo teniendo en cuenta que ahora él ya había pasado a ser un adulto y jugar voleibol era su trabajo, pero simplemente no podía enfadarme con él luego de echarlo tanto de menos.
-B-bokuto-san, yo-
-Keiji, te dije que ya no me llamaras así -sentí mis mejillas enrojecer, aparté la vista un momento y luego volví a ver su gran sonrisa.
-Koutaro, yo también te he echado mucho de menos... mucho.
-¡Aah, Keiji! -lo vi preocupado cuando tapó su rostro con ambas manos- ¡¿Cómo puedes lucir tan lindo al decir esas palabras?!
Sentí el calor crecer en mi rostro y aparte mi mirada.
-¿Pero qué dices, Kou? -Bokuto me vio con una sonrisa muy particular y pasó uno de sus brazos por mi cintura.
Aunque llevábamos casi dos años saliendo, aún no podía acostumbrarme a eso, podía sentir cierta inquietud y sensación extraña en mi pecho.
-Keiji... enserio extraño tus besos -me sonroje aún más por lo directo de sus palabras y tragué saliva- ¿Crees que puedes darme uno?
Asentí viéndolo directamente y me acerqué a su rostro lentamente, cuando junté nuestros labios, sentí nuevamente esas mil sensaciones en mi pecho que me ponían la piel de gallina. Él comenzó a mover sus labios y yo lo seguí disfrutando aquella acción, disfrutando el tenerlo cerca.
-Sé que es muy romántico besarnos bajo la lluvia, pero no quiero que te resfríes, Kashi -fruncí mi ceño cuando lo oí y subí la vista. Ni siquiera había notado cuando comenzó a llover pero ambos ya teníamos el cabello casi húmedo.
Abrí rápidamente mi sombrilla y nos tapé avergonzado. Perder completamente la capacidad de razonar y prestarle atención a mi alrededor era algo que solo Bokuto podía lograr, tal vez por qué sabía cómo llamar mi atención o por qué con él siempre sentía que éramos únicos en el mundo.
Demasiado cliché para mí, jamás creí que podría sucederme hasta que nuestra pequeña gran historia comenzó.
-¿Vamos a casa? ¡Podemos comprar palomitas en el camino y ver películas juntos toda la tarde! -sonreí por la idea pero rápidamente la borre viéndolo seriamente.
-Bokuto, ¿No deberías estar en un entrenamiento con tu equipo? Sé que extrañas a todos aquí pero no puedes volver así como así.
-Corrección, te extrañaba a tí. Y no te preocupes, el entrenador dijo que el descanso es tan importante como el entrenamiento. ¡Nos dió la semana libre! ¿Sabes lo que significa? -sentí como sus manos apretaron mi cintura y me sonroje enormemente al imaginar lo que quería decir- ¡Oe! ¡No me refería a eso! -tapé mi rostro con una mano al pensar que quedé como un malpensado y él soltó una carcajada algo nerviosa- iba a decir que podríamos pasar mucho tiempo juntos, pero supongo que también implica eso, ¿Verdad, Keiji?
-Por favor, no lo digas así -le pedí muy avergonzado.
-Pero ya lo hemos hecho antes, ¿Por qué estás tan sonrojado? -intenté taparme aún más por lo directo que estaba siendo y él intentó apartar mi mano- ¡No te cubras, eres muy lindo sonrojado!
Si, en serio extrañaba las tarde extrañas que solo Bokuto Koutaro podía darme.
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Pregunta random, de quién son kinnies?
Yo soy Kuroo kinnie, Atsumu kinnie y bueno, después tengo algunas actitudes similares a las de Kenma, por ejemplo el hecho de que a veces pienso mucho y me estreso. También podría incluir a Sakusa por el único motivo de que inconcientemente veo con asco a todo ser que se me acerqué mucho e invada ni espacio personal JAJAJJAJA y bueno, otros xd
Pero sobre todo Kuroo, y no solo por que compartimos el signo <3
Mega random, pido perdón, son las 3am y me siento mal.
Bye bye <3
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One shot [Haikyuu]
FanfictionDistintos shipps gays de Haikyuu <3 *No es mi primera vez escribiendo ¡!