One shot [Haikyuu]

Bokuto x Akaashi [+18]

Vestuario

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-¿Ya vamos a calentar? -preguntó Konoha tomando su toalla.

La mayoría del equipo estaba dentro del vestuario preparándose para el partido que tendrían en la tarde contra el Nekoma.

-Es temprano aún -respondió Akaashi- podemos-

-Si -Bokuto lo interrumpió y todo el equipo volteo a verlo sorprendidos.

Si bien era normal ver el entusiasmo en Bokuto a la hora de entrenar, esta vez lo había dicho de una forma insólita. Bokuto tenía una expresión seria y más que una sugerencia, sonaba más como que les había ordenado ir a entrenar. Los integrantes del equipo notaron la seriedad de sus palabras y su rostro y se vieron entre ellos extrañados. Terminaron por asentir y salieron uno a uno a la cancha para comenzar a practicar... aunque faltaran cuatro horas para que llegue el equipo con el que jugarían.

Akaashi también notó el tono extraño que usó su novio, pero en lugar de contradecirlo solo atinó a obedecerlo.

-Akaashi, quédate un momento -le dijo Bokuto sin mirarlo- y cierra la puerta, por favor.

-Claro -respondió el pelinegro extrañado, se acercó a la puerta y la cerró, viendo como el resto de sus compañeros comenzaban a entrenar- ¿Está todo bien, Bokut-

Las palabras del pelinegro fueron rápidamente cortadas por el abrazo que le dió Bokuto por la espalda, un abrazo bastante fuerte cabe aclarar.

-Keiji -murmuró el bicolor enterrando su nariz en su cuello y aspirando su aroma.

-B-bokuto-san, ¿Que hace? -le preguntó levemente asustado con sus manos en la puerta, pudo sentir claramente cuando el cuerpo del mayor se pegó completamente al suyo y el calor subió a sus mejillas y... a todo su cuerpo.

-No me llames así -le pidió, aún que sonó nuevamente como una orden.

-Koutaro, ¿Estás bien? -le preguntó tragando saliva, pudo sentir como el brazo de su novio que rodeaba su cintura lo apretaba un poco más hacia él.

-No -le respondió comenzando a mover con lentitud sus manos, ambos se metieron debajo de la remera del pelinegro y tocaron con suavidad todo su vientre y pecho- No estoy bien, Keiji.

-¿Q-que pasa? -preguntó con dificultad, podía sentir al amigo de su novio justo detrás de él restregarse con tranquilidad y fuerza, sin contar que las manos del mayor seguían tocando todo su pecho, rozándose "accidentalmente" con sus pezones.

La cara de Akaashi estaba de todos los colores.

-Te extraño -le respondió el bicolor con su voz grabé, aquella que debilitaba a su novio- Te necesito.

Bokuto se restregó con más fuerza contra el pelinegro y sonrió al oírlo soltar un jadeo. Hacía dos semanas que no tenían ese tipo de contacto y decir que Koutaro estaba necesitado era poco. Sin contar que estaba celoso de la manera en la que últimamente veían algunos chicos a su novio.