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Final

Jeongguk no dormía, no podía hacerlo. ¿Cómo podría descansar cuando Hana probablemente estaba pasándola mal lejos de él? Se sentía atado de manos y pies, no importaba cuánto haya hablado Daniel ni cuánto le había explicado la situación que definitivamente no lo favorecía, no podía aceptarlo.

Hoseok apareció al día siguiente con un montón de libros y el teléfono sobre su oído, Daniel y Jihyo pronto lo hicieron también. Hacían llamadas y hablaban entre si como si comprendieran lo que decían. Jeongguk de sentía inútil.

—Cariño, ¿estás bien? —pregunta la mayor. —¿Por qué no intentas dormir un poco?

—No, díganme en que puedo ayudar...

—Daniel se está encargado, puedes ir a dormir. —pero Jeongguk niega —Lo arreglaremos Gguk, te prometo que lo intentaremos.

—Ha pasado casi una semana Jihyo... Debe estar asustada.

—Lo sé, lo sé pero lo vamos a lograr ¿si? Confía en nosotros.

Jeongguk iba a replicar cuando el timbre sonó, Jihyo le dijo que fuera a su cuarto y ella se encargaba pero no pudo hacerlo. Cuando su cuerpo comenzó a reaccionar y su trasero se separó del sofá una nueva persona lo encontró de frente.

Su cara lucía preocupada, su cabello rubio no estaba peinado como normalmente, tan solo caía sobre su cara casi cubrieron sus ojos.

El hombre se acercó cuidadosamente a él, con una pizca de tristeza inundando su bello rostro.

—¿Estás bien?

Jeongguk asintió sin estar seguro de ello. Jimin caminó hasta su lado brindadole un pequeño abrazo, el menor se aferró ligeramente sintiendo como las lágrimas podrían comenzar a brotar.

Pero no lloro, no era momento.

Daniel me ha contado como va el proceso —murmuró

Todo había sido demasiado rápido, habían descartado a Jeongguk cuando el proceso estaba casi completo y a su favor. Servicio social lo había clasificado como posiblemente inestable por lo que había pasado con Sungwoon y el trauma que este había provocado. Además de la obviedad de estar solo y sin que la niña pudiera desarrollarse con una figura materna.

—¿Podemos ir a mi cuarto? Quisiera hablar contigo.

Jimin asintió, dándole una mirada a Yoongi que el menor no supo comprender, aún así aún pudo observar como Yoongi se acercaba a su amigo y lo envolvía entre sus brazos, ambos con lagrimas en los ojos y una expresión triste.

Luego simplemente siguió su camino con la mano del mayor entrelazada a la suya. Necesitaba sentirlo o su cuerpo colapsaria.

—¿Estás bien, Gguk? —preguntó de nueva cuenta cuando ambos se sentaron en la cama.

—No se nada de ella, se niegan a decirme cualquier cosa. Solo dicen que está bien y se está adaptando a los demás niños pero... Tengo un mal presentimiento, debe estar muy asustada.

—Todo saldrá bien, te lo prometo. —le sonrió —Pero necesitas descansar, ha pasado menos de una semana y te ves horrible.

Jeongguk sonrió apenas ante la honestidad del rubio y se relajó con el toque del mayor.

—Gracias por estar aquí, Jimin.

—No es nada. —suspiró —He pensado en posponer el viaje y mantenerme aquí hasta que lo de Hana sea resuelto, ¿cómo suena eso?

Kill me → JJK + PJMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora