JOVEN... SEÑORITA?

LA CACHORRITA DE LOS MOLAN

Aun cuando cale se quejaba constantemente de los inconvenientes de su cuerpo femenino también agradecía enormemente las ventajas que venían con este.

El ejemplo más claro era su relación con los Molan, su cuidado fue aún más meticuloso y más vicioso con cale mujer, Ron solía "asustar" a los que veían de manera lujuriosa a su joven señorita, la vio crecer y refinarse en varios sentidos, podía ser dulce y amorosa con su padre, condescendiente y solidaria con su madrastra y hermanastros, dura y salvaje con los "malos" pero también considerada con los suyos, admiraba el hecho de que nunca golpeaba a los débiles, niños e inocentes y que esporádicamente ayudaba a los de barrios pobres, claro, todo en la sombra, no era tan discreta y sigilosa como él, pero para una niña que aprendió sola el arte del sigilo era bastante buena, una cachorrita con esencia de gato.

Por su parte Beacrox también mantenía un ojo sobre ella, en especial desde el día en que "secretamente" le llegó una espada larga y un juego de dagas lujosos "secretamente a su cuarto", cale mujer era aún más observadora y calculadora que cale hombre, mostraba cartas que no se podían usar por otros, cale sabía de los antecedentes de los molan pero los dejaba estar y mantenía en secreto, esa fue la única vez que le "dijo" a beacrox que sabía de ellos, pero al guardar silencio le daba una carta para quedarse siempre ahí o ser cubiertos por ella, así como indistintamente le ayudó a cumplir su deseo de ser cocinero, tiempo después descubrió que ella era la que ordenaba que tomara clases y cursos con chefs reconocidos del reino.

Ciertamente Rok Soo agradecía mucho a cale mujer, la sensación de posible homicidio para su persona disminuyó bastante, pero la sensación ominosa de vigilancia era más alta...

Ahora se encontraba recuperándose de casi morir por el desequilibrio de su plato, acababa de despertar, tenía ganas de tomar un baño, la cama estaba empapada de sudor, sangre y lágrimas, la mayoría suyos, a su lado un cansado raon seguía dormitando, le pareció lindo que despertaran al mismo tiempo, sus ojos reptilianos de un tono azul intenso la miraban, y confirmaban que ya no moriría, y con voz alegre y cansada susurró su atributo

-humana... mi atributo es el presente...- para volver a dormir de nuevo, cale le sonrió y acarició su redonda cabeza con cuernos pequeños, y con la voz más dulce y orgullosa le respondió

-buen trabajo raon, descansa

Ahora que se encontraba de nuevo sola se sentó en el borde de la cama, en verdad tenía ganas de darse un baño y limpiarse, sin aviso la puerta se abrió con suavidad, pudo visualizar al experto en torturas y salchichas de la familia Molan, Beacrox, su perfecto cabello peinado hacia atrás, su semblante serio pero esos ojos aliviados de verla despierta, era un contraste bastante curioso a su imagen mental y la real,

Con prisas pero con todo el respeto de un fiel sirviente se acercó a la pelirroja y se arrodillo frente a ella, inspeccionando con la mirada su estado y tomándose el atrevimiento de tocar la frente de la joven señorita, si cale no tuviera un alma que se identificaba más como hombre que como mujer este acto la hubiera enternecido, sin embargo al cale actual le dio escalofrío, bueno, no se podía evitar, los Molan le daban miedo aun.

-lo siento señorita, solo quería confirmar su temperatura

-no hay problema beacrox, como sea tengo ganas de tomar un baño y comer algo, me muero de hambre- dijo con su usual semblante estoico y la mirada de beacrox se suavizó un poco más

Decir que la quería era poco, beacrox veía en cale la hermanita que por culpa de ARM no pudo tener, el pobre hombre cargaba con ese secreto en su corazón, su madre murió estando embarazada, no mas de dos meses de gestación, un secreto que la mujer aun guardaba hasta que el riesgo de perder a su bebe fuera casi inexistente, en realidad no sabia con exactitud si era un hermano o hermana pero su madre le juro que sentía que sería una linda niña la que venia en camino.